Una afirmaci¨®n sabia
El viaje del Rey a ?frica a cazar elefantes como una visita privada y sin conocimiento de las autoridades ha desencadenado una seria crisis institucional
El viaje del Rey a ?frica a cazar elefantes como una visita privada y sin conocimiento de las autoridades ha desencadenado una seria crisis institucional. La gravedad del accidente de Su Majestad con fractura m¨²ltiple ha creado una tensi¨®n y ha expresado un malestar muy profundo en el Gobierno y en la ciudadan¨ªa. Los medios de comunicaci¨®n se han hecho eco y han considerado que se trataba de un tema de gran trascendencia que iba desde un error muy grave hasta una crisis institucional. Nunca el Rey se hab¨ªa disculpado p¨²blicamente y la verdad es que en los hechos importantes de la vida p¨²blica no hab¨ªa existido hasta entonces un motivo para ello. Sin embargo, el profundo impacto situaba el tema en otra dimensi¨®n.
El Rey siempre ha tenido mucho sentido de la realidad y una gran prudencia tanto en el paso de la dictadura a la democracia como en la gesti¨®n del 23-F, siempre con respeto absoluto a la Constituci¨®n, al Parlamento y a las leyes. Adem¨¢s, durante estos a?os ha sido un elemento clave en la pol¨ªtica general de Espa?a y en concreto en lo referente a la desarrollada en las Am¨¦ricas, sobre todo de lengua espa?ola. El propio sentido de la realidad pol¨ªtica del Rey le ha hecho ver que est¨¢bamos en un momento diferente y que era necesario un acuerdo m¨¢s contundente y decidido. Por eso sus palabras de excusa y su afirmaci¨®n de que no volver¨ªa a producirse.
Es un tema de gran significado donde de manera sucinta el Jefe del Estado espa?ol ha concretado que no tiene vida privada, que todo su comportamiento se basa en la Constituci¨®n, en la democracia y en el derecho que marca el Gobierno de turno, como en este caso el del Partido Popular. Creo que es una afirmaci¨®n sabia y que hasta ahora el Rey no hab¨ªa tenido que pronunciar. El problema es el de saber si basta con eso para reparar el error cometido. En mi opini¨®n, la respuesta es afirmativa, si el Rey realmente cumple su compromiso. Por eso deben abandonar toda esperanza de cambio m¨¢s profundo aquellos sectores partidarios de otras posiciones que son en Espa?a minoritarios. Si la Corona y sus herederos son fieles a ese compromiso, estas minor¨ªas es dif¨ªcil que se conviertan en mayor¨ªas.
Gregorio Peces-Barba Mart¨ªnez es catedr¨¢tico de Filosof¨ªa del Derecho de la Universidad Carlos III de Madrid
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