Seis meses, un secuestro y pocas certezas

Medio a?o ya de cautiverio y el mismo tiempo de incertidumbre. Hoy se cumplen seis meses desde que los cooperantes Ainhoa Fern¨¢ndez de Rinc¨®n y Enric Gonyalons fueron secuestrados por una rama de Al Qaeda en los campamentos saharauis de Tinduf (Argelia). La inestabilidad pol¨ªtica en Mal¨ª ¡ªdonde se encuentran retenidos¡ª tras el golpe militar ha complicado su liberaci¨®n, seg¨²n admiti¨® el ministro de Exteriores, Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa-Margallo, este mi¨¦rcoles en el Senado. Otros dos espa?oles se encuentran tambi¨¦n cautivos en el exterior: se trata de las cooperantes de M¨¦dicos sin Fronteras (MSF) Blanca Thiebaut y Montserrat Serra, secuestradas el pasado 13 de octubre en el campamento de refugiados de Ifo, en Dadaab (Kenia).

"Las familias est¨¢n mal, ya llevamos seis meses y parece que no hay soluci¨®n a corto plazo", lamenta Jos¨¦ Taboada, portavoz de la plataforma que agrupa a las ONG que trabajan en los campamentos de Tinduf, (Ceas-S¨¢hara). El pasado 5 de marzo Margallo confirm¨® en una entrevista radiof¨®nica que las autoridades de Mal¨ª y de Somalia le hab¨ªan dado garant¨ªas de que los activistas se encontraban en buen estado ¡ªEnric Goyanols y Ainhoa Fern¨¢ndez de Rinc¨®n est¨¢n retenidos en Mal¨ª y Blanca Thiebaut y Montserrat Serra, en Somalia¡ª. Pero despu¨¦s del golpe militar en Mal¨ª, Exteriores no ha ocultado que la situaci¨®n ha empeorado. El ministro ha admitido que la asonada sobrevino cuando se estaba "muy cerca" de conseguir una soluci¨®n para liberar a los dos activistas. Seg¨²n explic¨®, el intermediario con el que estaba trabajando el Gobierno, un ¨¢rabe maliense emparentado con uno de los secuestradores, "desapareci¨®" despu¨¦s de que los militares sublevados se hicieran con el poder.

El intermediario con el que estaba trabajando el Gobierno "desapareci¨®" despu¨¦s del golpe militar en Mal¨ª

La ¨²ltima noticia que se tuvo de los cuatro cooperantes fue en febrero, cuando Exteriores confirm¨® que el Gobierno hab¨ªa recibido una prueba de vida en forma de v¨ªdeo de 1' 23''. En las im¨¢genes grabadas, cada reh¨¦n ped¨ªa a las autoridades que hicieran los esfuerzos posibles para su liberaci¨®n. El grupo terrorista exige 10 millones de euros por reh¨¦n, 30 millones en total, la cantidad m¨¢s elevada jam¨¢s pedida para un rescate. El Gobierno, muy implicado en la liberaci¨®n, mantiene "gestiones discretas", seg¨²n un portavoz, a trav¨¦s de la Embajada espa?ola en Kenia y Mal¨ª: el jefe de la diplomacia espa?ola ha viajado este pasado marzo a este pa¨ªs para recabar la colaboraci¨®n de las autoridades locales.

En los seis meses de cautiverio de Fern¨¢ndez de Rinc¨®n y de Gonyalons la confusi¨®n informativa ha sido tambi¨¦n protagonista: primero con la autor¨ªa del secuestro, que fue inicialmente atribuido a la rama de Al Qaeda en el Magreb Isl¨¢mico (AQMI) - responsables del cautiverio tambi¨¦n en Mal¨ª de los cooperantes Roque Pascual, Albert Vilalta y Alicia G¨¢mez en noviembre de 2009- y que la organizaci¨®n rechaz¨® en un comunicado. Finalmente, un grupo terrorista disidente de Al Qaeda y desconocido, el Movimiento para la Unificaci¨®n del Yihad en ?frica del Oeste (MUYAO), reivindic¨® el secuestro.

"No sabemos qui¨¦n ha sido, pero s¨ª sabemos a qui¨¦n beneficia su cautiverio: a alguien que quiere paralizar la solidaridad en el Sahara y atemorizar a la ayuda humanitaria, y a quien quiere desprestigiar la capacidad de seguridad del Frente Polisario", apunta Taboada, que explica que las ONG no han cesado su actividad en la zona a pesar del "acto terrorista". "Queremos demostrar que la solidaridad est¨¢ por encima de los actos de terrorismo", se?ala. La liberaci¨®n de la cooperante italiana capturada junto a ellos y posteriormente desmentida tambi¨¦n a?adi¨® notas de caos: varios medios italianos informaron de la noticia pero el Gobierno italiano la acab¨® descartando.

Fern¨¢ndez y Gonyalons fueron secuestrados el pasado 23 de octubre en Rabuni, la capital administrativa del Frente Polisario en el suroeste de Argelia. Fern¨¢ndez, de 32 a?os, hab¨ªa trabajado para ONG en zonas aparentemente m¨¢s peligrosas, como L¨ªbano o Camer¨²n. Gonyalons, de 26 a?os, llevaba ya un a?o de trabajo en los campamentos de Tinduf. Los dos llevaban ya meses fuera de casa: los ¨²ltimos seis no por voluntad propia.