Interior priorizar¨¢ el ingreso en los CIE de personas con antecedentes
Las ONG har¨¢n las labores asistenciales en los CIE, que cambiar¨¢n de nombre
Al caminar por el Centro de Internamiento de Extranjeros de la Zona Franca (CIE) hay que cruzar varias puertas enrejadas: la de la entrada, la del comedor, la de la habitaci¨®n, la de la zona de ocio, la del ba?o, la del patio, la de la cocina... y las que franquean el paso a cada uno de estos espacios del centro. Los internos tampoco pueden pasear libremente por el lugar, y decenas de polic¨ªas se encargan de controlarlos, incluso cuando est¨¢n en el patio. No es una c¨¢rcel, insisten fuentes de Interior, pero es lo que m¨¢s se le parece. Este lunes, por primera vez desde su construcci¨®n en 2006, el CIE de la Zona Franca abri¨® sus puertas a los medios.
Los CIE son centros para personas en situaci¨®n irregular que esperan a ser expulsadas del pa¨ªs y para personas inmigrantes condenadas a las que se les ha conmutado la condena (que debe ser inferior a seis a?os) por el regreso a su pa¨ªs. El secretario de Estado de Seguridad, Ignacio Ulloa, asegur¨® que su prioridad es que ingresen en los CIE solo personas con antecedentes penales. Los sin papeles que no tengan cuentas pendientes con la justicia y demuestren arraigo, entendido como domicilio, familia, amigos o trabajo, incluso sumergido, en Espa?a, no ser¨¢n confinados en este tipo de centros. Es una de las novedades del Gobierno del PP, que ultima un anhelado reglamento para los CIE, que hasta ahora estaban en un limbo legal.
De esta forma, se podr¨¢ evitar que muchas personas pasen en los centros 60 d¨ªas ¡ªtiempo m¨¢ximo permitido¡ª para volver finalmente a la calle, como ocurri¨® en 2011 cuando, de las 13.241 personas que fueron encerradas en un CIE, solo se expuls¨® a 6.825. Desde enero, seg¨²n Ulloa, se aplica esta nueva pol¨ªtica. Aunque, seg¨²n fuentes policiales, el CIE de Barcelona tiene entre un 70% y un 80% de personas con antecedentes, lo que implica que todav¨ªa siguen confinando a inmigrantes que no han delinquido. Algo que el propio PP admite que no se podr¨¢ evitar por completo, y espera regularlo a trav¨¦s de una circular interna.
Pero la nueva norma no mejorar¨¢ la asistencia m¨¦dica. En la actualidad, en el centro de Barcelona, con capacidad para 236 personas, solo hay un m¨¦dico de las ocho de la ma?ana a las tres de la tarde, y hasta las diez de la noche, tres enfermeras, seg¨²n se explic¨® en la visita. El reglamento no mejora esas condiciones ni garantiza que ese servicio dependa de los departamentos de Salud de cada comunidad aut¨®noma. Es ¡°objeto de estudio¡±, asegur¨® ayer Ulloa, aunque advirti¨® de que el ¡°coste econ¨®mico¡± ser¨¢ clave en la decisi¨®n que adopten. ¡°Tampoco ser¨ªa l¨®gico, y menos con las restricciones que padecemos, que el servicio sanitario que se presta en los centros de internamiento fuera incluso superior al que gozamos los nacionales¡±, indic¨®.
La madrugada del 6 de enero un joven de 21 a?os muri¨® en el CIE de Barcelona despu¨¦s de sufrir un ictus en un d¨ªa festivo, cuando no hab¨ªa ning¨²n tipo de asistencia m¨¦dica. Tambi¨¦n en otro centro de extranjeros, esta vez en Aluche, una mujer que llevaba interna m¨¢s de un mes muri¨® despu¨¦s de ser trasladada al hospital Doce de Octubre. Desde su llegada al centro, hab¨ªa acudido a los servicios santiarios nueve veces, sin que nadie detectase la gravedad de su estado.
Un centenar de periodistas pudieron constatar que los suelos del CIE de Zona Franca estaban impolutos, que en los ba?os no hab¨ªa ni un pelo y que la comida del d¨ªa, lentejas y pollo rebozado con aros de cebolla, pan y una naranja, cumpl¨ªa los m¨ªnimos esperados. Pero las habitaciones, con rejas, tienen dos o tres literas con colchones muy delgados. Los ba?os y las duchas son comunes, y en la ¡°zona de ocio¡± hay apenas una docena de mesas.
¡°La situaci¨®n presupuestaria es complicada¡±, advirti¨® el director general de la Polic¨ªa, Ignacio Cosid¨®, sobre la mejora de las instalaciones. El reglamento prev¨¦ cambios en la gesti¨®n diaria: la polic¨ªa, que hasta ahora se hac¨ªa cargo de todo lo que pasaba en el centro, se ocupar¨¢ solo de la seguridad. La tarea asistencia se delegar¨¢ en ¡°ONG y personas de la sociedad civil¡±, indic¨® Ulloa, en una visita que ten¨ªa que haber presidido el ministro de Interior, Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz, pero la anul¨® en el ¨²ltimo momento, alegando motivos de agenda. Tambi¨¦n han optado por cambiar el nombre: de ahora en adelante los CIE ser¨¢n Centros de Estancia Controlada de Extranjer¨ªa (CECE).
Denuncia por maltrato
Mientras las autoridades pol¨ªticas y policiales abr¨ªan ayer a bombo y platillo las puertas del Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de la Zona Franca, el s¨ªndic de greuges, Rafael Rib¨®, ultimaba la presentaci¨®n de una petici¨®n a la fiscal¨ªa para que investigue un presunto caso de maltrato. Un interno de 37 a?os, de origen ruso, acab¨® la madrugada del domingo 22 de abril en el centro de atenci¨®n primaria Manso por un traumatismo tor¨¢cico.
El hombre explic¨® al defensor del pueblo catal¨¢n que esa noche un compa?ero se sent¨ªa indispuesto, por lo que pidieron asistencia a la polic¨ªa. Seg¨²n su versi¨®n, se la negaron y los polic¨ªas reprimieron a golpes su queja. "No podemos afirmar nada, solo informamos al fiscal", indic¨® Rib¨®. El s¨ªndic intent¨® entrar en el CIE el pasado 17 de abril, sin ¨¦xito. Para Rib¨®, que mantuvo ayer una reuni¨®n con el secretario de Estado de Seguridad, Ignacio Ulloa, la visita de ayer con los medios no cumple la normativa europea. "Se debe hacer sin avisar, pudiendo hablar con los internos y con conocimiento de los problemas de los ¨²ltimos tiempos", indic¨®. Rib¨® expres¨® su preocupaci¨®n a Ulloa sobre las informaciones que le han llegado de "autolesiones, huelga de hambre y malos tratos". "Quiero dejar muy claro delante de quien sea que seguir¨¦ rigurosamente el encargo que he recibido del Parlament", indic¨® sobre sus posibles visitas al CIE. Ulloa asegur¨® a los periodistas que la competencia es del Defensor del Pueblo.
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