Urdangarin y Torres deber¨¢n entregar 3,5 millones para evitar la c¨¢rcel
Los correos que Torres llev¨® al juez han forzado las negociaciones
I?aki Urdangarin y Diego Torres quieren enterrar el hacha de guerra. El duque de Palma y su exsocio est¨¢n tratando de alcanzar un acuerdo que les permita plantear a la fiscal¨ªa la posibilidad de eludir la prisi¨®n a cambio de reconocer los hechos por los que se les investiga y reparar el da?o que han causado al erario p¨²blico. A trav¨¦s de personas de su entorno, el yerno del Rey ha tomado la iniciativa para poner fin a la guerra abierta que mantiene con Torres a prop¨®sito de sus responsabilidades en el Instituto N¨®os, la entidad sin ¨¢nimo de lucro con la que ambos lograron, durante cuatro a?os, diez millones de dinero p¨²blico a trav¨¦s de Administraciones gobernadas, en su mayor¨ªa, por el PP.
Desde hace unas semanas, Urdangarin y el que fue su mano derecha tratan de alcanzar una entente. Por ahora, sus posiciones son distantes, seg¨²n fuentes conocedoras de las negociaciones. Ese posible pacto pasa por devolver el dinero presuntamente malversado e implica el pago, de forma solidaria, de unos 3,5 millones de euros por los da?os causados a la Administraci¨®n.
El principal escollo para sellar el acuerdo es, precisamente, determinar qui¨¦n de los dos debe asumir la mayor parte de ese desembolso. En su declaraci¨®n ante el juez Jos¨¦ Castro, Urdangarin afirm¨® que desempe?aba un papel ¡°institucional¡± en N¨®os y descarg¨® toda la responsabilidad en Torres. La tesis del esposo de la infanta Cristina, sin embargo, ha sido desacreditada por decenas de testigos e imputados en la pieza separada del caso Palma Arena.
El pago de los 3,5 millones para cubrir la responsabilidad civil por los perjuicios causados es necesario para que, si se llega a una conformidad, pueda aplicarse a Urdangarin y a Torres la atenuante de reparaci¨®n del da?o. La mayor parte de ese dinero procede de la organizaci¨®n de los eventos F¨®rum Illes Balears y Valencia Summit. Durante su etapa al frente de N¨®os, ambos lograron adjudicarse, a dedo, contratos por casi seis millones de euros con los Gobiernos de Baleares y de la Comunidad Valenciana, en manos del PP.
Urdangarin y Torres negocian entre s¨ª para presentar una propuesta conjunta a la fiscal¨ªa, que podr¨ªa dar su visto bueno a cambio de que se cumplan ciertos requisitos. El objetivo de los dos imputados es que, si se impone una pena privativa de libertad, esta sea inferior a los dos a?os de c¨¢rcel, de forma que puedan eludir el ingreso efectivo en prisi¨®n. En el caso del duque, adem¨¢s, se impone la necesidad de evitar la celebraci¨®n de un juicio que podr¨ªa erosionar a¨²n m¨¢s la imagen de la Monarqu¨ªa. Seg¨²n fuentes judiciales, el yerno del Rey podr¨ªa ser juzgado por los delitos de malversaci¨®n, prevaricaci¨®n, fraude a la Administraci¨®n y falsedad documental. El delito de evasi¨®n fiscal por un cobro a trav¨¦s de una cuenta en Suiza no formar¨¢ parte, en principio, de la acusaci¨®n, ya que la cantidad defraudada no supera la cuota m¨ªnima que fija el C¨®digo Penal.
En los pr¨®ximos d¨ªas, el abogado del duque, Mario Pascual Vives, y el de Torres, Manuel Gonz¨¢lez Peeters, mantendr¨¢n entrevistas con miembros de la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n para abordar ese asunto. Los encuentros los realizar¨¢n cada uno de ellos por separado, en fechas distintas.
Los correos electr¨®nicos remitidos por Torres al juzgado hace apenas dos semanas han cambiado el tablero de juego y han forzado las negociaciones entre los dos principales implicados. En tres de esos correos, de 2007, Urdangarin afirma que el Rey hizo gestiones como mediador para que su yerno lograse la participaci¨®n de un nuevo equipo de vela en la Copa del Am¨¦rica. ¡°Tengo un mensaje de parte del Rey y es que le ha comentado a Cristina, para que me lo diga, que le llamar¨¢ Camps a Pedro para comentarle el tema (...). Y que en principio no habr¨¢ problema y nos ayudar¨¢n¡±, dice Urdangarin en alusi¨®n a unas instalaciones del puerto de Valencia necesarias para el proyecto. El entorno de Urdangarin teme que Torres haya guardado otro as en la manga y que saque a la luz nuevos documentos que comprometan la imagen de la Casa del Rey.
¡®Arrepentidos¡¯ en el ¡®caso Palma Arena¡¯
La colaboraci¨®n de imputados con la justicia y los pactos de conformidad con la fiscal¨ªa son habituales. Implican confesarse culpable. Los arrepentidos declaran su implicaci¨®n en supuestos delitos en investigaci¨®n para beneficiarse de un mejor trato en la sentencia.
El avance de la instrucci¨®n judicial, la acumulaci¨®n de indicios, suele precipitar la decisi¨®n del imputado. Por este reconocimiento, los arrepentidos merecen ser beneficiarios de atenuantes penales: reducci¨®n de los tipos delictivos y de las posibles penas. Pactan para no entrar en la c¨¢rcel o cumplir penas bajas. En especial han de reponer totalmente, m¨¢s un tercio de carga, el da?o patrimonial causado a la Administraci¨®n si se trata de malversaci¨®n, cohecho o fraude.
Hay casos en los que el colaborador/infractor de la ley debe asumir la demolici¨®n de una obra ilegal, como ha sucedido en el caso Andratx de corrupci¨®n. Un arrepentido, funcionario de Andratx, ayud¨® a desentra?ar varias causas pero la acumulaci¨®n de condenas por los delitos que confes¨® le llevo a cumplir c¨¢rcel.
En el caso Palma Arena, en la pieza del caso Urdangarin ya se ha dado un pacto de un arrepentido, con hechos, citas, personajes y firmas, contactos y contratos de la trama de N¨®os. As¨ª, Jos¨¦ Luis Ballester, amigo de Urdangarin y de la infanta Cristina, pact¨® con fiscal¨ªa un acuerdo que perjudic¨® los intereses del duque de Palma.
El pacto de conformidad puede ser global entre todos los coimputados y comportar la no celebraci¨®n de la vista p¨²blica. El fiscal conduce con los letrados las negociaciones y los acuerdos y los somete al tribunal, en anuencia con aquellos que est¨¢n sentados en el banquillo.
El expresidente Jaume Matas, del PP, ha sido condenado en la Audiencia de Palma a m¨¢s de seis a?os de c¨¢rcel en parte por el relato de dos coimputados, un ex director general de Comunicaci¨®n de su Gabinete y un empresario publicista del entorno de confianza de Matas y del PP, que est¨¢ imputado en otras piezas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.