El enorme dispositivo policial de Barcelona acaba sin ning¨²n detenido

Mossos d'Esquadra, Polic¨ªa Nacional, Guardia Civil... El macrodispositivo policial organizado en Barcelona con motivo de una reuni¨®n ordinaria del consejo del Banco Central Europeo (BCE) acab¨® este jueves sin ning¨²n detenido. El gigantesco despliegue de fuerzas del orden ha supuesto la movilizaci¨®n de 8.000 polic¨ªas, la suspensi¨®n del tratado de Schengen durante seis d¨ªas, el reclutamiento de agentes de la Guardia Civil y del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa de Madrid, Zaragoza y otros puntos de Espa?a ¡ªhospedados en hoteles de los alrededores de la capital catalana¡ª y la puesta a punto de cuatro helic¨®pteros, con al menos uno sobrevolando la capital catalana durante buena parte del d¨ªa. El Ministerio de Interior ha facilitado el coste del operativo.

Los Mossos d¡¯Esquadra ¨²nicamente identificaron a una persona a las tres de la tarde a la que imputaron luego por los altercados del 29-M. El hombre formaba parte de un grupo de un centenar de estudiantes que se vio sorprendido por una decena de furgones policiales y varios agentes antidisturbios que les rodearon y escoltaron, en ocasiones a empujones, cuando protestaban por la ciudad camino a una facultad de la Universidad de Barcelona (UB). Este fue el ¨²nico incidente remarcable ayer en la ciudad, que no pas¨® de an¨¦cdota.

El grupo de j¨®venes proced¨ªa de la manifestaci¨®n que al mediod¨ªa protagonizaron miles de universitarios , convocada por la Plataforma Unitaria en Defensa de la Universidad P¨²blica (PUDUP) ¡ªque agrupa profesores, estudiantes y personal administrativo de diferentes universidades¡ª en contra del aumento de las tasas y la restricci¨®n del acceso a las becas. La marcha, que congreg¨® a unos 7.500 universitarios seg¨²n la Guardia Urbana y 20.000 seg¨²n los organizadores, transcurri¨® sin incidentes y parti¨® a las 12.45 horas de la plaza de la Universitat. Recorri¨® Gran Via y acab¨® en el paseo de Llu¨ªs Companys una hora despu¨¦s. La idea inicial era finalizar la protesta en el campus de la Ciutadella de la Universidad Pompeu Fabra (el m¨¢s cercano al hotel Arts, donde se han congregados los responsables del BCE), pero el rectorado cerr¨® el recinto a la una del mediod¨ªa para evitar ¡°posibles problemas de seguridad¡±.

Esta ha sido la tercera huelga estudiantil de este curso. La primera, el 17 de noviembre de 2011, registr¨® una asistencia similar a la de este jueves, mientras que el paro del 29 de febrero (promovido por los profesores) congreg¨® el triple de asistentes. La concatenaci¨®n de las protestas (a la que se suma la huelga general del pasado 29 de marzo) y la precipitaci¨®n de la convocatoria, seg¨²n reconoci¨® la PUDUP, dificult¨® un seguimiento masivo del paro. Las aulas as¨ª lo mostraron y mientras algunas quedaron vac¨ªas en muchas facultades se imparti¨® clase con bastante normalidad.

La reuni¨®n ordinaria del BCE, en la que no existen precedentes de altercados, ha conllevado una exhibici¨®n inusitada de fuerza policial en la capital catalana que incluso mandos de la polic¨ªa han tachado de ¡°poco justificada¡±, teniendo en cuenta que el riesgo real por la visita de las autoridades europeas no era tan elevado. Las cr¨ªticas al dispositivo han llovido incluso desde las filas de CiU, que gobierna en Catalu?a. ¡°Creo que se han pasado. Es exagerado¡±, manifest¨® su portavoz en el Congreso de los Diputados, Josep Antoni Duran. Hasta el presidente de la Generalitat, Artur Mas, brome¨® en un almuerzo con empresarios y se refiri¨® al dispositivo excepcional dispositivo de seguridad como las "fuerzas de seguridad".

Desde francotiradores apostados en el hotel Arts, donde se encuentran alojados los consejeros, hasta controles aleatorios en la ciudad ante cualquier mochila abultada. Ni la visita del papa Benedicto XVI a Barcelona en 2010 sac¨® a la calle a tantos polic¨ªas. El ¨²nico precedente similar que se recuerda en Barcelona es la cumbre de la Uni¨®n Europea del a?o 2002, que moviliz¨® a 8.500 agentes. Para encontrar otro despliegue policial parecido hay que remontarse a los Juegos Ol¨ªmpicos.

¡°Podr¨ªamos haberlo asumido solos¡±, lleg¨® a decir el director general de la polic¨ªa catalana, Manel Prat, sobre el env¨ªo de 3.500 polic¨ªas estatales a Catalu?a para garantizar la seguridad durante la reuni¨®n. Aunque adujo luego que Espa?a ¡°se jugaba mucho¡±, en referencia a las consecuencias que podr¨ªa tener que la ciudad hubiese acabado sumida en el caos, algo de lo que ni siquiera se estuvo cerca.

Ya desde el Primero de Mayo, Barcelona es una ciudad tomada por la polic¨ªa. Los Mossos encapsularon una manifestaci¨®n pac¨ªfica el D¨ªa del Trabajo de unas 7.000 personas, en la que se dejaron ver decenas de furgones y de polic¨ªas vestidos de paisano ¡ªaunque con brazaletes en los que indicaban que eran agentes¡ª que vigilaron la manifestaci¨®n.

Tanto el ministerio como la Consejer¨ªa de Interior han esgrimido los graves incidentes de la huelga general del 29 de marzo, que acab¨® con 80 heridos (seis de gravedad) y casi 300 contenedores ardiendo. Pero incluso antes de que ocurriese ning¨²n incidente, el consejero de Interior catal¨¢n, Felip Puig, calde¨® el ambiente refiri¨¦ndose a un mayo complicado, con una ¡°huelga mundial¡± a la vista, en referencia al 15 de mayo, cuando se cumple un a?o del Movimiento del 15-M.