Impedir el gota a gota

ETA ha vuelto a desplegar su estrategia para tratar de sacar el mejor provecho de las situaciones pol¨ªticas. El comunicado en el que anuncia la constituci¨®n de una comisi¨®n para abrir un di¨¢logo con el Gobierno se superpone a la reclamaci¨®n, hace diez d¨ªas, del Comit¨¦ de Verificaci¨®n Internacional al Ejecutivo para que abra un canal de comunicaci¨®n informal con la banda terrorista. Lo hace, adem¨¢s, horas despu¨¦s del debut del socialista Fran?ois Hollande como presidente de la Rep¨²blica, con la pretensi¨®n de implicar a Francia.

ETA sabe que desde el momento en que hace p¨²blica una petici¨®n de di¨¢logo a un Gobierno, este se ve obligado a rechazarla. Estamos, pues, ante una operaci¨®n de propaganda a meses de las elecciones vascas.

La banda pretende frenar la estrategia penitenciaria del Ejecutivo

La banda pretende con este movimiento descolocar al Gobierno e impedir su estrategia de avance hacia la consolidaci¨®n del fin de la violencia por el gota a gota. Una estrategia de pasos cortos en pol¨ªtica penitenciaria, que al cabo de la legislatura sumen un buen balance. El primer paso fue el plan de reinserci¨®n individual de presos etarras anunciado hace tres semanas. Con el se?uelo del di¨¢logo, ETA trata de sacar el foco del terreno de la pol¨ªtica penitenciaria y llevarlo a un campo m¨¢s favorable para sus intereses. Estamos, pues, ante una partida de ajedrez en la que ETA trata de mejorar posiciones ante la opini¨®n vasca a meses de los comicios auton¨®micos.

En esta batalla, los partidos y, sobre todo, el Gobierno deben jugar inteligentemente sus cartas. La Moncloa hace bien en rechazar la negociaci¨®n con ETA e impedir que le marque la agenda. Pero no es ¨®bice para que mantenga un canal discreto e indirecto de comunicaci¨®n con una ETA definitivamente cesada para consolidar su final con el desarme de la banda. El Ejecutivo dispone, adem¨¢s, de recursos suficientes para neutralizar la campa?a de opini¨®n de ETA. Cuenta con la complicidad anunciada del PSOE y el PNV. Solo tiene que superar la presi¨®n de la ultra derecha.