Rajoy ya solo conf¨ªa en la ayuda de Europa
La prima supera los 500 puntos en una nueva jornada de histeria por Grecia El presidente del Gobierno dice que Espa?a hace los deberes y pide a la UE que apoye al euro
El domin¨® ha arrancado y parece imparable. Grecia arrastra a Espa?a. Europa mira a Madrid, la otra gran preocupaci¨®n mundial, y Espa?a mira a Europa pidiendo ayuda. Mariano Rajoy surca una ola de miedo, a ratos histeria. Pero hace todo lo posible para que no se note. Y en eso, en aparentar normalidad, es un aut¨¦ntico especialista. Aunque a su alrededor, todo son noticias p¨¦simas.
Despu¨¦s de 48 horas desaparecido para el gran p¨²blico, Rajoy lleg¨® al Congreso a las nueve de la ma?ana con un desayuno dif¨ªcil de digerir: la prima de riesgo por encima de los 500 puntos, en 507. Una cifra desconocida incluso en la peor etapa de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero. Un r¨¦cord absoluto que dispara todos los rumores de rescate. El Gobierno insiste en desmentirlos con un argumento clave: no hay dinero suficiente para intervenir Espa?a.
La tensi¨®n crece porque alrededor de 500 ¡ªa ¨²ltima hora del d¨ªa la prima de riesgo se recuper¨® y baj¨® a 482¡ª se intervino Grecia, Irlanda o Portugal, y cay¨® en Italia el Gobierno de Silvio Berlusconi. Una cifra insostenible, seg¨²n el propio Ejecutivo. Claro que ya lo eran los 300, y los 400.
Lo m¨¢s preocupante para el Ejecutivo es que, lejos de mejorar, la situaci¨®n ha empeorado cinco meses despu¨¦s del cambio de Gobierno. Grecia sigue siendo el gran problema. Y este mi¨¦rcoles fue solo el primer d¨ªa de un largu¨ªsimo mes, hasta las pr¨®ximas elecciones en Atenas, convocadas ya para el 17 de junio. El mercado se ceb¨® con Espa?a, y en la propia Grecia se teme ya el colapso bancario. El banco central heleno lanz¨® la alarma y anunci¨® que en un solo d¨ªa, el lunes, salieron 800 millones de euros de sus entidades. El temor a un corralito al estilo argentino se ha instalado all¨ª. Toda Europa tiembla por el efecto en cadena de este peque?o pa¨ªs al que nadie, al menos oficialmente, quiere ver fuera del euro. Tampoco Rajoy, seg¨²n dijo este mi¨¦rcoles.
?Y en Espa?a? El ministro Crist¨®bal Montoro, ante la tensi¨®n creciente tambi¨¦n en las oficinas de los bancos espa?oles, se vio obligado a desmentir tajantemente la posibilidad de un corralito. ¡°Es materialmente imposible¡±, insisti¨®. La situaci¨®n es de tal histeria que Montoro tuvo que contestar a una especulaci¨®n poco argumentada en el blog del premio Nobel Paul Krugman. La sola menci¨®n del corralito desata todas las especulaciones. Y la Bolsa espa?ola, como otras europeas, se hundi¨® de nuevo y cerr¨® en 6.611 puntos, una nueva ca¨ªda del 1,33%.
?Y Rajoy? Seg¨²n todas las fuentes consultadas, hay dos presidentes. Uno, en p¨²blico, aparenta que no pasa nada y rechaza pedir una comparecencia en el Congreso para explicar la situaci¨®n. Ni siquiera cuenta con qui¨¦n habla. Todo es secreto. Pero el otro Rajoy, el del despacho, dicen los suyos, habla sin parar y a todas horas con dirigentes europeos y espa?oles y banqueros. A todos les traslada el mismo mensaje: Espa?a ha cumplido exactamente todo lo que se le ha pedido, incluso con la nacionalizaci¨®n de Bankia, que sigui¨® lo reclamado por el FMI y el BCE. Ha recortado todo lo recortable. Y ahora espera la ayuda, sobre todo del BCE.
Rajoy est¨¢ cada d¨ªa m¨¢s descolocado. Perplejo. No entiende, explican los suyos, por qu¨¦ unas medidas que ¨¦l mismo considera dur¨ªsimas ¡ªsobre todo los recortes en sanidad y educaci¨®n o la reforma laboral¡ª no aplacan a los mercados. El Gobierno est¨¢ cada vez m¨¢s frustrado. Comprueba que los viernes anuncia medidas duras, impopulares, se lleva todo el coste pol¨ªtico, obedece las peticiones de la UE, y sin embargo los lunes los mercados vuelven a dar un nuevo golpe. Nada funciona.
Por eso ayer el presidente, en su estilo siempre indirecto, lanz¨® un mensaje en los pasillos del Congreso. La idea la repitieron despu¨¦s, en privado, muchos miembros del Ejecutivo, y se resume as¨ª: Espa?a ha hecho los deberes, solo queda que la UE act¨²e y la salve.
Rajoy lo dijo a su manera: ¡°Creo que el debate entre austeridad y crecimiento que hay ahora en Europa tiene bastante poco sentido, porque una cosa es compatible con la otra. Hay una tercera de la que nadie habla: austeridad s¨ª, crecimiento tambi¨¦n, pero me gustar¨ªa adem¨¢s que hubiera un mensaje claro y contundente sobre el proyecto del euro y la sostenibilidad de la deuda p¨²blica de todos los pa¨ªses europeos¡±. ¡°Que cada pa¨ªs haga sus deberes, Espa?a lo est¨¢ haciendo, Italia lo est¨¢ intentando, pero la prioridad hoy es la sostenibilidad de la deuda de los pa¨ªses¡±.
De nuevo, dos Rajoy: en privado no para de hacer gestiones para reclamar ayuda, en p¨²blico se niega a confesarlo: ¡°Yo no voy a pedir nada, hacer declaraciones pidiendo cosas no tiene sentido. Pero el euro debe ser reforzado¡±. Como Zapatero en el peor momento de la crisis, Rajoy y los suyos ven los ataques a Espa?a como una consecuencia de la crisis griega y un ataque al euro, y no como un gesto de desconfianza a su Gobierno. Rajoy ya apenas utiliza esa palabra, eje de su campa?a. No es una t¨¦cnica exclusiva del Gobierno espa?ol. El italiano tambi¨¦n apela a factores exteriores ¡ªahora Grecia, antes Espa?a¡ª para justificar los ataques de los mercados.
Rajoy, a diferencia del italiano Mario Monti, no es un tecn¨®crata. Quiere seguir su carrera pol¨ªtica. Y sabe que en este momento se la juega toda a una carta: lograr que Espa?a no sea intervenida. Este mi¨¦rcoles lo volvi¨® a descartar. Sin aclarar si ha hablado en las ¨²ltimas 48 horas con Merkel, dijo que no est¨¢ encima de la mesa ni un rescate ni ning¨²n tipo de ayuda ¡ªse especula con una inyecci¨®n de dinero del Fondo de Rescate a los bancos espa?oles¡ª. ¡°No se ha hablado absolutamente de nada de eso y yo hablo con los principales dirigentes europeos casi todas las semanas¡±, contest¨® el presidente. Efectivamente, nadie en p¨²blico se anima a hablar del rescate a Espa?a. Pero en privado en Bruselas se admite que los mecanismos est¨¢n preparados y Espa?a solo tiene que pedirlo.
En los alrededores del Gobierno, esto es, entre dirigentes del PP y veteranos diputados, se critica mucho al Ejecutivo, su forma de contar las cosas, sus tiempos, su funcionamiento interno, con la ausencia de una vicepresidencia econ¨®mica. Pero en los ministros no se ve esa autocr¨ªtica y apuntan a otro lado: es Europa la que est¨¢ fallando, dicen, no Espa?a.
Los ministros espa?oles no entienden por qu¨¦ la UE no hace m¨¢s. ¡°Ning¨²n pa¨ªs de Europa, ni del mundo, est¨¢ haciendo las reformas que se hacen en Espa?a. El problema de Europa no es Espa?a, es Europa¡±, se?ala uno de ellos. ¡°Son d¨ªas dif¨ªciles, el Gobierno franc¨¦s acaba de llegar, el holand¨¦s est¨¢ dimitido, en Grecia no existe, Merkel acaba de llevarse un varapalo electoral, pero Europa encontrar¨¢ la salida¡±, sentencia otro.
De hecho, este mi¨¦rcoles la canciller destituy¨® a su ministro de Medio Ambiente, Norbert R?ttgen, peso pesado de su partido y responsable de esa sonora derrota en Renania del Norte-Westfalia.
¡°El BCE no dejar¨¢ que se llegue a una intervenci¨®n. Tiene mecanismos para evitarla. No le interesa a nadie en Europa¡±, sentencia otro ministro. En p¨²blico, Montoro lanz¨® un mensaje similar, incluso m¨¢s duro: ¡°No podemos aceptar que determinadas instituciones europeas se refieran a veces a Espa?a con un tono despectivo. Ya est¨¢ bien. Cuando un pa¨ªs est¨¢ haciendo lo que hay que hacer para recuperar la credibilidad del pa¨ªs y del euro merece un respeto¡±. El Gobierno espa?ol parece dolido con la UE. Y Bruselas est¨¢ en otras batallas.
El presidente, mientras, insiste en lanzar la idea de que ¨¦l solo puede con todo. Ayer incluso evit¨® el guante de un gran pacto que le lanz¨® el l¨ªder de la oposici¨®n, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba. Pese a la escalada, no ha habido ni siquiera una llamada entre ambos dirigentes en todas estas semanas. Rajoy est¨¢ concentrado en Europa y nada m¨¢s parece interesarle. Quiere transmitir normalidad, pero le fall¨® el subconsciente cuando, al contestar a Rubalcaba, admiti¨® que todo lo que est¨¢ haciendo es para ¡°salir del pozo¡±, un t¨¦rmino descarnado, improvisado, que da idea de la preocupaci¨®n que se vive en La Moncloa.
La tensi¨®n es dif¨ªcil de ocultar. Rajoy sali¨® disparado del hemiciclo en cuanto termin¨® su ¨²ltima pregunta, y no escuch¨® a su vicepresidenta, al contrario de lo que es habitual. Una llamada importante le esperaba en la zona de Gobierno del Congreso. Sin embargo, La Moncloa explic¨® que no era Angela Merkel, ni Fran?ois Hollande, como se especulaba, sino un ministro de su propio Gobierno ¡ªposiblemente Luis de Guindos, que estaba en Londres visitando a inversores y al Financial Times e intentando calmar al mundo financiero¡ª.
Rajoy espera as¨ª que la UE haga su trabajo. Y mientras, quiere seguir dando mensajes. El que m¨¢s le interesa es el de que controla a las autonom¨ªas. El Consejo de Pol¨ªtica Fiscal de hoy es clave. Montoro cree que la mayor¨ªa de las comunidades cumplir¨¢n. A las que no lo hagan, se les dar¨¢n otros 15 d¨ªas. Y despu¨¦s, amenaza con la intervenci¨®n. La misma que sigue encima de la cabeza del propio Gobierno espa?ol. Y de la que nadie quiere hablar.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Prima de riesgo
- Mariano Rajoy
- Crisis econ¨®mica
- Rescate financiero
- Crisis deuda europea
- Gobierno de Espa?a
- Recortes presupuestarios
- Recesi¨®n econ¨®mica
- Pol¨ªtica financiera
- Financiaci¨®n d¨¦ficit
- Crisis financiera
- Coyuntura econ¨®mica
- PP
- Partidos pol¨ªticos
- D¨¦ficit p¨²blico
- Pol¨ªtica econ¨®mica
- Finanzas p¨²blicas
- Gobierno
- Uni¨®n Europea
- Europa
- Administraci¨®n Estado
- Organizaciones internacionales
- Econom¨ªa
- Pol¨ªtica
- Relaciones exteriores