Becerril pedir¨¢ al Gobierno que Sanidad atienda a los inmigrantes irregulares

Una semana despu¨¦s de tomar posesi¨®n de su cargo como Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, ya sabe que la crisis econ¨®mica y sus consecuencias van a ocupar la mayor parte de su tarea. Al mes de julio de 2012 las quejas por razones econ¨®micas son ya tan numerosas como las de todo el 2011 y van a la cabeza de cualquier otra materia de demanda que llega a esta instituci¨®n. En su primera comparecencia desde su sede en Madrid y antes de ser recibida por el rey Don Juan Carlos, la defensora dio unos apuntes respecto hacia d¨®nde va a dar sus primeros pasos y recomendaciones al Gobierno. De entrada va a pedir al Ejecutivo de Mariano Rajoy, con el que comparte militancia en el PP, que no retire la tarjeta sanitaria a los inmigrantes irregulares como tiene previsto el Gobierno a partir del 1 de septiembre.

Va a ser beligerante con las medidas de restricciones en materia sanitaria y farmac¨¦utica aprobadas por decreto pero no tanto como para presentar recurso de inconstitucionalidad como ha pedido Izquierda Unida. Por las buenas, con di¨¢logo, Soledad Becerril tratar¨¢ de convencer al Gobierno de que esas medidas no pueden ser aplicadas a los m¨¢s necesitados. Tambi¨¦n quiere ir varios pasos por delante del Gobierno en la Ley de Transparencia aprobada por el Ejecutivo la pasada semana. Pedir¨¢ que se penalice a las administraciones que emprendan grandes proyectos sin tener asegurada la financiaci¨®n y sin que se justifique absolutamente su ¡°rentabilidad social¡±.

En las escasas horas que lleva al frente de su carga, que depende de las Cortes Generales, Soledad Becerril ha apreciado la avalancha de quejas, aunque tambi¨¦n la demanda de informaci¨®n, sobre las prestaciones por desempleo, los recortes en las subvenciones y la angustia de muchos ciudadanos sobre el futuro de sus ahorros depositados en entidades bancarias ahora nacionalizadas.

La crisis lo llena todo y esta instituci¨®n se va a someter ¡°a los mismos ajustes¡± que el resto de las administraciones aunque el presupuesto del Defensor del Pueblo es bastante reducido. Este a?o cuenta con 14 millones de euros y de entrada le va a dar un recorte de un 2%. No se cubrir¨¢n las jubilaciones, se suprimen tres de los seis coches con los que cuenta y ella misma se baja el sueldo en un 7,14%. ¡°?Cu¨¢nto gana usted?¡±, le pregunt¨® un periodista. ¡°Gano 117.00 euros¡± anuales brutos aunque de inmediato el secretario general de la instituci¨®n la corrigi¨®: ¡°Son 115.000 de los que hay que quitar ese 7,14%¡±.

No le corresponde a Becerril decidir o inmiscuirse en el debate que hay en algunas comunidades aut¨®nomas sobre la supresi¨®n de sus propios defensores del pueblo auton¨®micos aunque algunos ya han sido eliminados. ¡°Aqu¨ª estamos para atender a todos los espa?oles, de todos los lugares de Espa?a¡±, se limit¨® a recordar. Esta Defensora del Pueblo se ver¨¢ acompa?ada por el socialista Francisco Fern¨¢ndez Marug¨¢n, como adjunto primero ¨C¡°del que tengo la mejor opini¨®n¡±- y de Concepci¨®n Ferrer, en la adjunt¨ªa segunda, dirigente de Uni¨® Democr¨¢tica de Catalunya. Los tres se proponen ¡°agilizar y facilitar las quejas¡± y lograr una respuesta de la administraci¨®n ¡°m¨¢s r¨¢pida¡±. No hay una obligaci¨®n expresa de las administraciones a responder pero esta instituci¨®n tiene un arma en su mano que pal¨ªa esa obligatoriedad. ¡°Cuando una administraci¨®n no responde y les decimos que pasamos el caso a la fiscal¨ªa, responden r¨¢pido¡±, revela.