?Expresi¨®n de una amenaza compuesta?
Ni el perfil de los tres individuos detenidos ni su supuesta adscripci¨®n organizativa se corresponden con la caracterizaci¨®n habitual y las conexiones m¨¢s frecuentes entre quienes han sido detenidos en Espa?a por actividades relacionadas con el terrorismo yihadista desde la d¨¦cada de los noventa. La procedencia turca y euroasi¨¢tica de aquellos contrasta con el origen argelino, marroqu¨ª e incluso paquistan¨ª de la mayor¨ªa de las cerca de cien personas que han sido condenadas en nuestro pa¨ªs por ese tipo de delitos. Las vinculaciones de estos con organizaciones yihadistas, cuando no actuaban al margen de las mismas, han tendido a establecerse principal, aunque no exclusivamente, con entidades norteafricanas. No es tanto el enlace con Al Qaeda de los tres detenidos ahora lo que llama la atenci¨®n como el trato que la polic¨ªa atribuye a alguno de ellos con Lashkar e Tayiba.
Si este dato se confirma, una implicaci¨®n conjunta de Al Qaeda y Lashkar e Tayiba para llevar a cabo atentados terroristas no deber¨ªa sorprender. Al Qaeda ha estado cerca de Lashkar e Tayiba desde sus or¨ªgenes. Pese a que esta ¨²ltima, desde su base en Pakist¨¢n, tolerada si no facilitada por los servicios de inteligencia de dicho pa¨ªs, est¨¢ detr¨¢s de los m¨¢s importantes atentados ocurridos recientemente en India, destacados operativos de la misma vienen actuando en territorio afgano y disponen de asentamiento en las zonas tribales al otro lado de la frontera. Pero Lashkar e Tayiba se ha convertido progresivamente en una fuente de amenaza terrorista fuera del sur de Asia, m¨¢s concretamente para las sociedades occidentales. Terroristas entrenados en campos de Lashkar e Tayiba situados en suelo paquistan¨ª, o implicados en actos de terrorismo reclamados en su autor¨ªa por esa organizaci¨®n yihadista, han sido detenidos, en los ¨²ltimos a?os, en Norteam¨¦rica, Europa Occidental y Australia.
Los numerosos ejemplos incluyen al cabecilla de los terroristas sucidas de Londres en julio de 2005, a un destacado miembro de la c¨¦lula yihadista que intent¨® ejecutar actos de terrorismo en Sydney a finales de ese mismo a?o, a uno de los cabecillas del grup¨²sculo que quiso perpetrar atentados en Otawa en 2006 y a uno de los extremistas que colabor¨® en el fallido intento de hacer lo mismo en Copenhage en 2009. Incluso el iniciador de una c¨¦lula yihadista desmantelada en Barcelona en el oto?o de 2004 habia sido con anterioridad militante activo de Lashkar e Tayiba.
Al Qaeda persiste como amenaza para el conjunto de Europa occidental. Un an¨¢lisis de los atentados y de las tentativas m¨¢s serias de atentados ocurridas en la regi¨®n desde 2002 revela que Al Qaeda ha estado implicada en no menos de 10 incidentes. En unas ocasiones, ideando, planificando, preparando y tratando por s¨ª misma de ejecutar atentados. En otras, en combinaci¨®n con sus extensiones territoriales y elementos de organizaciones afiliadas. Como, desde el 11-M, Lashkar e Tayiba, la Uni¨®n de la Yihad Isl¨¢mica o Therik e Taliban Pakistan. En estos casos queda de manifiesto la naturaleza compuesta que la amenaza del terrorismo yihadista adopta a menudo.
Fernando Reinares es investigador principal de Terrorismo Internacional en el Real Instituto Elcano y catedr¨¢tico de Ciencia Pol¨ªtica en la Universidad Rey Juan Carlos.
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