El hombre que vaci¨® la burbuja

¡°En cuatro meses se ha esfumado el 90% de mi inversi¨®n y la ¨²nica causa de esta escandalosa ruina es Enrique Ba?uelos de Castro¡±. Una gran ovaci¨®n acogi¨® la desesperada intervenci¨®n de Felipe Izquierdo en la junta general de accionistas que Astroc celebr¨® en Valencia a finales de junio de 2007. Izquierdo hab¨ªa comprado en febrero 350 t¨ªtulos de Astroc, cuando val¨ªa 71 euros cada uno. El 27 de junio val¨ªan 9,5 euros.

El accionista anunci¨® una querella contra Ba?uelos por un supuesto delito de maquinaci¨®n para alterar el precio de las cosas. Varios m¨¢s se sumaron.

El empresario que ahora quiere liderar la construcci¨®n de seis parques tem¨¢ticos en terrenos de La Caixa junto a Port Aventura con una inversi¨®n de 4.500 millones de euros pasaba uno de sus peores momentos. El juez Baltasar Garz¨®n archiv¨® la querella tres meses despu¨¦s: ¡°El querellante deber¨ªa haber examinado mejor los riesgos de su inversi¨®n¡±.

Enrique Ba?uelos (Sagunto, 1966) puso a la venta el 25% de Astroc, la sociedad inmobiliaria sobre la que ciment¨® su fortuna en la Comunidad Valenciana, a un precio de 6,4 euros por acci¨®n en mayo de 2006. El joven abogado se presentaba como gestor de suelo. Exhib¨ªa una sonrisa encantadora y era capaz de hablar durante horas sobre las posibilidades de replicar n veces un producto inmobiliario bien concebido como si fabricara tornillos en una cadena de montaje. Ya lo hab¨ªa hecho en Canet d¡¯En Berenguer, donde levant¨® 5.000 viviendas en la playa, a 30 kil¨®metros de Valencia.

Sus or¨ªgenes eran muy modestos. Su padre trabajaba en Altos Hornos de Sagunto y falleci¨® en un accidente laboral cuando Enrique ten¨ªa 9 a?os. Ba?uelos fund¨® su primera empresa con 18 a?os. La siderurgia de Sagunto atravesaba una virulenta reconversi¨®n industrial. A trav¨¦s de la Caja de Sagunto logr¨® una subvenci¨®n para producir y comercializar miel mientras estudiaba Derecho. Y encandil¨® a los responsables de la caja.

Formado en leyes, apreci¨® las posibilidades que ofrec¨ªa la figura del agente urbanizador consagrada por las Cortes valencianas en 1994. Esencialmente, la posibilidad de promover la urbanizaci¨®n de suelo sin necesidad de ser propietario del mismo.

La cotizaci¨®n en Bolsa de su empresa, Astroc, se desplom¨® en 2007

Los socialistas pretend¨ªan evitar la especulaci¨®n y fomentar la construcci¨®n en solares urbanos. Pero el PP, que ocup¨® la Generalitat en 1995, nunca se preocup¨® de desarrollar reglamentos que acotaran las posibilidades del agente urbanizador. Todo el suelo era urbanizable.

La integraci¨®n de las cajas de ahorro locales en Bancaja creci¨® en paralelo a la fortuna de Ba?uelos, que fue generosamente avalado por la filial inmobiliaria de la entidad valenciana hasta que logr¨® consolidar un espectacular patrimonio.

Compr¨® el palacete del Marqu¨¦s de Salamanca en el Paseo de la Castellana. Era propietario del Castillo de Bendinat en Calvi¨¤, en Mallorca. Se hizo con otro edificio hist¨®rico en la calle de la Paz, en el centro de Valencia. Los tres inmuebles estaban llamados a ser la sede de la Fundaci¨®n Astroc, una entidad destinada al fomento de las artes y de la cultura valenciana.

Su patrimonio floreci¨® al amparo de la figura del agente urbanizador

Hab¨ªa exprimido el alza de la burbuja inmobiliaria en la Comunidad Valenciana y aspiraba a dar el salto al resto de Espa?a, a M¨¦xico, a Brasil. Dise?¨® una torre de negocios en Nueva York. Y se present¨® en la Gran Manzana con una paella para 25.000 comensales en Central Park en septiembre de 2006.

Cuando sac¨® a Bolsa la cuarta parte de Astroc en mayo de 2006 ya era muy rico. Caixa Galicia y Carmen Godia, vicepresidenta de Abertis, se vincularon a Astroc a primera hora. F¨¦lix Ab¨¢nades, presidente del Grupo Rayet, tom¨® una participaci¨®n cuando Ba?uelos compr¨® el 60% de Rayet Inmobiliaria, en diciembre. Poco despu¨¦s entr¨® en el accionariado la familia Nozaleda, propietaria de la inmobiliaria Nozar. Amancio Ortega, propietario de Inditex, fue el ¨²ltimo notable que apost¨® por Ba?uelos.

Cuando Astroc sali¨® a Bolsa su mayor activo era un extenso terreno no urbanizable en Mallorca, en gran parte protegido. Un hueso incluso para un gestor de suelo de ¨¦xito.

En febrero de 2007, las acciones de Astroc se intercambiaban por 72 euros. Hasta que las aguas volvieron a su cauce de forma torrencial. En seis semanas el valor de la empresa se depreci¨® un 76%.

CV Capital hab¨ªa avalado operaciones de Astroc por valor de 900 millones de euros en 2006, en su mayor¨ªa relacionadas con las garant¨ªas que Ba?uelos hab¨ªa concedido a sus grandes accionistas.

A finales de junio, en la junta en la que Felipe Izquierdo clamaba por los ahorros que hab¨ªa visto evaporarse en unos meses, Ba?uelos explic¨®: ¡°Yo me aparto totalmente de la gesti¨®n y me planteo dejar mi puesto en el consejo. Siento no haber sabido transmitir el modelo de Astroc¡±.

El promotor abandon¨® la empresa y viaj¨® a Brasil, donde anunci¨® que pretend¨ªa instalarse 40 a?os. Pero no ha dejado de moverse. Hace un mes se present¨® como socio de un proyecto capitaneado por Alejandro Agag para organizar el primer campeonato del mundo de F¨®rmula E, con coches el¨¦ctricos.

¡°Ba?uelos no vuelve a Espa?a¡±, asegur¨® ayer una portavoz del empresario, ¡°porque nunca se ha ido. Y ahora aporta 900 millones de euros para Barcelona World, un negocio de turismo familiar, nada que ver con la especulaci¨®n inmobiliaria¡±.