El juez del ¡®caso Madrid Arena¡¯ ya tiene 9.257 entradas a mitad del recuento

Primer avance a la mitad del recuento de las entradas para la tr¨¢gica fiesta de Hallowen en la que murieron cuatro j¨®venes: 9.257. El juez del caso Madrid Arena y las partes personadas en la causa han examinado esta ma?ana cuatro de las ocho urnas que contienen los tiques y se calcula que la mitad de las cajas que faltan por revisar, que se ver¨¢n el pr¨®ximo mi¨¦rcoles, contiene una cifra similar, lo que dar¨ªa m¨¢s de 18.000 tiques en total. Los tiques fueron hallados el mi¨¦rcoles pasado dentro de unas urnas en un local anexo al lugar de celebraci¨®n del evento y la Polic¨ªa precint¨® las urnas por orden del magistrado.

Esta prueba pericial es clave para dilucidar la principal hip¨®tesis sobre la causa de la avalancha en la que murieron las cuatro chicas y que dej¨® a otra gravemente herida: que en el pabell¨®n municipal hab¨ªa la noche del 31 de octubre m¨¢s de 10.600 personas, el aforo m¨¢ximo permitido. Y hab¨ªa m¨¢s gente porque se colaron a las bravas, como sostiene el empresario que organiz¨® el evento y la polic¨ªa, porque las mismas entradas se usaron varias veces, porque hab¨ªa muchas falsificadas o por todo a la vez. Muchos j¨®venes que asistieron a la fiesta se?alan que el paso por los accesos fue "un descontrol", que no hab¨ªa lectores de c¨®digos para evitar que las entradas fueras fotocopiadas y que no se romp¨ªan las entradas para impedir que fueran reutilizadas.

El recuento ha comenzado a las diez de la ma?ana, hora en la que ha acudido el titular del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 51 de Madrid, Eduardo L¨®pez Palop, acompa?ado por su secretario judicial, a las dependencias de la Jefatura Superior de la Polic¨ªa de Madrid. Las labores, que se han prolongado hasta las dos de la tarde, se han llevado a cabo en la sala de control de la Jefatura (en la planta baja), donde el juez no ha permitido la entrada de la prensa.

Nada m¨¢s llegar, L¨®pez Palop ha avisado a las partes personadas en la causa, todas presentes durante el procedimiento, de que el recuento pod¨ªa durar hasta 10 horas porque se quiere hacer "de forma muy exhaustiva". Finalmente, se ha decidido hacerlo en dos partes, una esta ma?ana y otra el pr¨®ximo mi¨¦rcoles. En la urna A hab¨ªa 2.475 entradas, en la B, 2.123; en la C, 2.888; y en la D, 1.760. Entre las?9.257 que suman las cuatro urnas se incluyen las entradas de internet, talonarios e invitaciones. Todav¨ªa quedan por contabilizar la mitad de las urnas y fuentes del caso apuntan a que contienen m¨¢s o menos el mismo n¨²mero. En opini¨®n de Abdon N¨²?ez, abogado de la familia de Bel¨¦n Langdon, una de las fallecidas, "el n¨²mero de entradas vendidas puede ascender a m¨¢s de 18.500".

Adem¨¢s del juez, han examinado las entradas la fiscal del caso y los abogados de las partes personadas en este proceso, as¨ª como miembros del Grupo V de Homicidios encargados de la investigaci¨®n. Con esta diligencia se pretende conocer el n¨²mero de entradas que se vendieron y de personas que pudieron entrar en la fiesta del Madrid Arena y, sobre todo, si se super¨® el aforo que hab¨ªa sido comunicado al Ayuntamiento de Madrid para el permiso de la fiesta: 10.600 personas. Se trata de comprobar si las entradas est¨¢n rotas y si se guardaron o no, lo que pudo facilitar la reventa de los tiques.

El martes, el responsable de la empresa Diviertt que organiz¨® el evento, Miguel ?ngel Flores, reiter¨® ante el juez lo que ya hab¨ªa dicho al Ayuntamiento: que se vendieron 9.650 boletos para un aforo permitido de 10.600 personas. No obstante, Flores, que es uno de los cuatro imputados en el caso hasta el momento, reconoci¨® en su declaraci¨®n que se imprimieron un total de 17.500. Tambi¨¦n asegur¨® que se colaron cerca de 4.000 j¨®venes de los 6.000 que asistieron al botell¨®n que se celebr¨® en una zona adyacente dentro del recinto vallado del Madrid Arena.

Flores neg¨® todo conocimiento sobre una supuesta segunda venta de entradas, aunque admiti¨®? que es "algo que puede pasar". Seg¨²n su versi¨®n de los hechos, las entradas "eran retiradas e introducidas en unas cajas" y solo se devolv¨ªan al cliente "si ¨¦ste las pide", ya que sino se guardan, como "se hace habitualmente en este tipo de eventos".

El representante de la empresa Dise?o y Asesoramiento T¨¦cnico Organizativo (DATO), la empresa contratada por Diviertt para controlar las entradas, Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa, present¨® a los agentes del Grupo V de Homicidios un certificado en el que consta que ¡°todos los asistentes accedieron al recinto con una entrada original y v¨¢lida de las emitidas por la organizadora¡±. El documento afirma que no se autoriz¨® la entrada a los asistentes que portaban ¡°entradas falsas, duplicadas o repetidas¡±. Garc¨ªa no supo precisar si el programa facilitado a Diviertt permit¨ªa saber el n¨²mero de entradas registradas por los lectores ¨®pticos.

Ayer, la Fiscal¨ªa anunci¨® que pedir¨¢ la imputaci¨®n de otras siete personas, entre ellas el exgerente de Madrid Espacios y Congresos, Jorge Rodrigo, empresa municipal de la que depende el recinto en el que se celebr¨® la fiesta en la que murieron cuatro j¨®venes. Rodrigo fue destituido el d¨ªa anterior por Ana Botella. El abogado de la familia de una de las cuatro j¨®venes fallecidas ha pedido hoy al juez que investiga el caso que declaren como imputados ocho responsables municipales, entre ellos, el concejal de Movilidad y Seguridad, Antonio de Guindos. El juez considera que el Ayuntamiento de Madrid podr¨ªa ser responsable civil subsidiario de los hechos, por lo que admiti¨® ayer su personaci¨®n en la causa en esa condici¨®n.

Por otro lado, la Fiscal¨ªa de Madrid ha incoado hoy diligencias informativas con el fin de determinar c¨®mo han podido llegar a distintos medios de comunicaci¨®n, entre ellos EL PA?S, las grabaciones de las comparecencias de dos personas que han declarado como imputados. Se trata de Flores y de Carlos Manzanares, que acudieron al juzgado las ma?anas del martes y mi¨¦rcoles en calidad de imputados. Ambos declararon ante el juez, el fiscal y los distintos abogados y quedaron en libertad con cargos.