Un bot¨ªn de 500 joyas y el vendedor m¨¢s experto de la Costa del Sol

Miguel Montes Neiro era la persona adecuada para vender de una tacada en el mercado negro m¨¢s de 500 joyas valoradas en cerca de tres millones de euros. Ese fue, seg¨²n los investigadores, el papel del preso com¨²n m¨¢s antiguo de Espa?a ¡ªhasta el indulto y su salida de la c¨¢rcel en febrero de 2012¡ª en el robo cometido el pasado 18 de noviembre en el centro comercial Costa Marbella, en Puerto Ban¨²s. Y esa fue la sospecha que el mi¨¦rcoles llev¨® a los agentes del grupo de operativos especiales del Cuerpo Nacional de la Polic¨ªa en M¨¢laga al arresto de Montes Neiro en M¨¢laga.

Apodado El Profesor por sus supuestos contactos en el mundo del hampa, Montes Neiro fue contactado por los atracadores, con los que seg¨²n la investigaci¨®n mantuvo varias reuniones para intentar establecer contactos con alg¨²n posible comprador. No hubo tiempo y la banda apenas logr¨® empe?ar algunas piezas, despu¨¦s de que en enero, en un control de carretera, la polic¨ªa retuviera a los ocupantes de un turismo que portaban un reloj de oro y las piedras de una joya desmontada que figuraba en el inventario de lo sustra¨ªdo en el robo. Fue la pista que llev¨® a los agentes a montar el dispositivo de vigilancia. Durante varias semanas captaron im¨¢genes y pincharon tel¨¦fonos hasta recomponer el puzle que, de momento, se salda con 11 arrestados en Granada, Ja¨¦n, Sevilla y M¨¢laga.

Los asaltantes se hab¨ªan refugiado tras el atraco en la finca Torres-Hermoso, situada en la pedan¨ªa de El Jau una localidad de 1.200 habitantes situada a dos kil¨®metros del municipio de Santa Fe. El cabecilla de la banda, Jos¨¦ Antonio G. G., ten¨ªa desde hace algunos meses un contrato de alquiler con opci¨®n a compra de este cortijo, propiedad de Eduardo Torres, el decano del Colegio de Abogados de Granada. Es un picadero de caballos en plena vega, junto al r¨ªo Genil, con un camino de acceso poco transitado.

El plan parec¨ªa perfecto. Jos¨¦ Antonio G. G., viejo conocido de la polic¨ªa acusado de homicidio frustrado por presuntamente apu?alar varias veces por la espalda a otro hombre, hab¨ªa reunido a su banda: siete espa?oles y dos argentinos. El golpe iba ser limpio: asaltar la zona de alta joyer¨ªa de un centro comercial aprovechando que estaba cerrado en domingo. No era una gran superficie comercial al uso. Est¨¢ situada en la Milla de Oro de la Costa del Sol, expone anillos de m¨¢s de 11.000 euros, pendientes de m¨¢s de 30.000, y hasta un colgante en forma de paloma valorado en 102.000, la pieza m¨¢s cara.

El grupo se refugi¨® en una finca alquilada al decano de los

El grupo cont¨® con la ayuda de uno de los vigilantes de seguridad. Pasadas las cuatro de la tarde, tres atracadores llamaron a la puerta de servicio vestido de obreros, pues entonces hab¨ªa operarios trabajando en la reforma de la cafeter¨ªa. Les abri¨® el c¨®mplice. Una vez dentro, se enfundaron una capucha para ocultar el rostro y sacaron las armas. Maniataron y encerraron en una habitaci¨®n a los otros tres vigilantes y a los trabajadores. En tres horas abrieron unas vitrinas y rompieron otras, para llevarse las joyas, as¨ª como tres discos duros y el aparato grabador de las c¨¢maras de seguridad. Uno de los retenidos consigui¨® liberarse y pulsar la centralita de alertas a la polic¨ªa. Los asaltantes lograron huir en un coche. Recorrieron la Autov¨ªa del Mediterr¨¢neo hasta la provincia de Granada, con destino la finca Torres-Hermoso. Y, tras su detenci¨®n, la polic¨ªa lleg¨® a Montes Neiro.

¡°Qu¨¦ penita me dio el d¨ªa que se llevaron a mi Miguel al tard¨®n¡­¡±, le cant¨® en infinidad de ocasiones Jos¨¦ Monge, Camar¨®n de la Isla, a su supuesto amigo Miguel Montes Neiro. Este regresaba, una y otra vez, a prisi¨®n por robo y por eso el cantaor (cuenta la familia) le dedic¨® en 1984 la canci¨®n Mi sangre gitana. Montes Neiro acud¨ªa a sus actuaciones aprovechando sus fugas (hasta ocho figuran en su historial delictivo). Su afici¨®n por Camar¨®n es conocida entre algunos de sus vecinos del n¨²mero 49 de la calle Jazm¨ªn de Mijas-Costa, donde vive desde junio.

Los atracadores

Despu¨¦s de salir de la prisi¨®n de Albolote (Granada) en febrero de 2012, tras recibir el indulto del Gobierno, se fue a vivir a la casa de una de sus hermanas. No estaba a gusto porque sus dos hijas, de 15 y 17 a?os, ten¨ªan que compartir la misma habitaci¨®n. Busc¨® entonces una casa de alquiler y la encontr¨® en la urbanizaci¨®n Las Flores de la localidad malague?a.

Paga 420 euros al mes a su due?o, un amigo granadino. Con los 400 euros que recibe de la paga como preso liberado no puede afrontar los gastos. Sus hermanas le echan una mano. Incluso el periodista Antonio Izquierdo, autor del libro Miguel Montes, una vida en prisi¨®n le suele dejar dinero. Lo ¨²ltimo, 50 euros, para pagar unas facturas.

Lleva dos meses de retraso en el alquiler. Le han cortado el tel¨¦fono y tiene recibos de luz pendientes. Los vecinos le describen como educado y tranquilo. La mujer que reside en el piso de al lado, donde el pasado mi¨¦rcoles (por error) entr¨® la polic¨ªa buscando a Montes Neiro para detenerle, dice que suele verle con las manos llenas de barro.

Los murales son su otra gran afici¨®n junto al flamenco. Estos d¨ªas trabajaba en un busto de mujer que est¨¢ a medio terminar. Montes Neiro hab¨ªa apalabrado exponer algunas de sus obras en varias exposiciones de Granada. Desde hace semanas, estaba de promoci¨®n del libro de Izquierdo. Lo compaginaba con conferencias. Su detenci¨®n esta semana oblig¨®, el pasado jueves, a cancelar la charla titulada Cadena perpetua carcelaria, que iba a dar en la Universidad de Sevilla.