Rajoy pide a sus barones unidad ante el malestar por la negociaci¨®n con CiU

Despu¨¦s de nueve meses sin reunir a su m¨¢xima direcci¨®n, el presidente del Gobierno hizo un llamamiento a la unidad de los suyos, claramente inquietos por la influencia que pueda tener la Generalitat catalana, gobernada por CiU, en la reforma de la financiaci¨®n auton¨®mica que ha puesto en marcha el Ejecutivo. Mariano Rajoy convoc¨® a su Junta Directiva Nacional, el m¨¢ximo ¨®rgano del PP, para pedir cohesi¨®n y apoyo al Gobierno en un momento especialmente delicado.

Una de las inquietudes de Rajoy en este momento, adem¨¢s de la econom¨ªa, su prioridad absoluta, es impedir que se resquebraje la unidad dentro de su partido. Su reuni¨®n secreta en La Moncloa con Artur Mas ¡ªde la que ayer no dijo una sola palabra¡ª y la posibilidad de que entre los dos negocien un nuevo modelo de financiaci¨®n ha generado un claro malestar entre algunos barones del PP. Y a ellos dirigi¨® el presidente la mayor¨ªa de los mensajes pol¨ªticos con una idea clara: va a dialogar con Mas y con todos, y pide que sus dirigentes territoriales le apoyen.

En la cuesti¨®n de la financiaci¨®n auton¨®mica se concentra ahora la batalla interna y por ah¨ª iban los comentarios de pasillo tras la Junta Directiva. ?Qu¨¦ va a pasar con el modelo de financiaci¨®n? ?Lograr¨¢ Catalu?a pactar con Rajoy un sistema que le beneficie? se preguntaban.

El presidente trat¨® de calmar a los suyos pero sobre todo hizo una llamada al orden. En su estilo cr¨ªptico, sin hablar directamente de Mas, ni de Catalu?a, ni de casi nada en un largu¨ªsimo discurso de 55 minutos, Rajoy les vino a pedir una y otra vez que le apoyen, que no se ¡°distraigan con cantos de sirena¡±. ¡°Una de las fortalezas del PP es su cohesi¨®n interna. Necesitamos m¨¢s que nunca la unidad de todos. Llevo muchos a?os en el PP, y s¨¦ que lograr que el partido funcione bien es fundamental¡±, explic¨®.

Rajoy vino a decir a los suyos que no va a dejar caer en la bancarrota a Catalu?a ni a ninguna comunidad aut¨®noma ¡ªla otra gran preocupaci¨®n es la valenciana, cuyo presidente, el popular Alberto Fabra, estaba ayer en el acto¡ª y anunci¨® que seguir¨¢ hablando con Mas pese a quien pese.

¡°Colaboraremos con todos los gobiernos auton¨®micos como estamos haciendo. Les apoyaremos como lo hemos hecho con el plan de proveedores y otros. Todas las administraciones estamos en el mismo barco. Seguiremos ayudando a los problemas de financiaci¨®n de las que no pueden salir al mercado. Seguiremos escuchando a todos. Yo escucho a todos, a los de mi partido y a los dem¨¢s; es mi obligaci¨®n, aunque algunos no parezcan entenderlo¡±, se?al¨® como aviso a navegantes. Eso s¨ª, de nuevo sin citarlo expresamente, aclar¨® que no aceptar¨¢ negociar sobre la consulta soberanista. ¡°De lo ¨²nico que no voy a hablar es de lo que se salga de la legalidad. Si alguien quiere cambiar la ley ya sabe lo que tiene que hacer, cu¨¢l es el mecanismo¡±.

Lo habitual es que nadie hable despu¨¦s del l¨ªder en estas juntas directivas. Ayer rompi¨® esa tradici¨®n uno de los barones m¨¢s veteranos, el murciano Ram¨®n Luis Valc¨¢rcel. Y precisamente para lanzar un aviso compartido por muchos en el PP sobre la nueva financiaci¨®n auton¨®mica. Sin citar a Catalu?a, pero en una alusi¨®n clara que todos entendieron, Valc¨¢rcel dijo que el actual sistema perjudica mucho a Murcia y que si se reforma ¨¦l no quiere ser ¡°m¨¢s que nadie pero tampoco menos¡±.

En los pasillos, varios barones comentaban despu¨¦s que Catalu?a ya est¨¢ muy beneficiada con el actual sistema y que conf¨ªan en que se reequilibren las cosas. En cualquier caso, el pacto es tan dif¨ªcil que algunos creen que no llegar¨¢ este a?o, como pretende La Moncloa. El ministro de Hacienda, Crist¨®bal Montoro, que ya est¨¢ hablando con todos, es ahora el principal responsable de encontrar un punto de acuerdo.

Rajoy no dijo una palabra sobre el otro gran asunto que inquieta al PP: el caso B¨¢rcenas. Pese a las crecientes cr¨ªticas por no aceptar preguntas de la prensa ¡ªlleva m¨¢s de tres meses sin hacerlo en Espa?a, hoy lo har¨¢ obligado por la visita de Ban Ki Moon, secretario general de Naciones Unidas¡ª el presidente insisti¨® en una comparecencia sin preguntas transmitida a trav¨¦s de una pantalla.

El partido pr¨¢cticamente no se re¨²ne y lleva cinco semanas sin dar ruedas de prensa. Muchos dirigentes piden m¨¢s explicaciones, un mensaje claro. Alicia S¨¢nchez Camacho, l¨ªder del PP catal¨¢n, lo dej¨® claro: ¡°Aunque B¨¢rcenas haya robado al PP, adem¨¢s el PP debe dar explicaciones a todos los espa?oles¡±, asegur¨® a la entrada de G¨¦nova 13.

Pero Rajoy no est¨¢ por la labor. De nuevo ni siquiera nombr¨® a B¨¢rcenas. A la misma hora en que Fran?ois Hollande, el presidente franc¨¦s, comparec¨ªa en Par¨ªs ¡ªtambi¨¦n sin preguntas¡ª para se?alar que el hecho de que su dimitido ministro de Hacienda, J¨¦r?me Cahuzac, tuviera una cuenta en Suiza, es un ¡°ultraje a la Rep¨²blica¡±, Rajoy insist¨ªa en fingir que su extesorero y sus cuentas en Suiza no existen.

Tampoco la secretaria general, Dolores de Cospedal, que habl¨® antes que el l¨ªder, cit¨® el nombre, aunque s¨ª dijo algo que parec¨ªa referirse a ¨¦l: ¡°Algunos que han pasado por el partido han dejado huella. Otros, una huella que no nos gusta. Pero el partido no son ellos. El partido son sus 700.000 afiliados¡±. Rajoy se limit¨® a asegurar que ya ha dicho todo lo que ten¨ªa que decir de este asunto, que ha propuesto medidas contra la corrupci¨®n y anim¨® a los suyos a confiar en que la tormenta pase r¨¢pido: ¡°Espero que pronto podamos decir que todo esto es una historia pasada¡±.