Rajoy est¨¢ ¡°muy satisfecho¡± con su reforma laboral y no piensa retocarla

El Gobierno est¨¢ sufriendo todo tipo de presiones, sobre todo de la patronal CEOE, Alemania y Bruselas, para que d¨¦ una nueva vuelta de tuerca a su reforma laboral. Dentro del propio Ejecutivo hay discrepancias serias sobre este asunto. A la vez, los sindicatos, a los que Mariano Rajoy ha citado el jueves en La Moncloa junto con la CEOE, reclaman una marcha atr¨¢s de esta reforma ante los p¨¦simos datos del paro. Este lunes entr¨® en el debate el comisario europeo de Empleo, el socialdem¨®crata L¨¢szl¨® Andor, que dijo no ver mal la posibilidad de que se implantara en Espa?a un ¡°contrato ¨²nico abierto¡±. Pero poco despu¨¦s el presidente ha dejado muy claro que no piensa hacer caso ni a unos ni a otros: la reforma se quedar¨¢ como est¨¢, al menos eso dice Rajoy.

El contrato ¨²nico no fue hoy una demanda. El comisario solo se refiri¨® a ello en respuesta a una pregunta y se expres¨® con tibieza: ¡°A lo mejor es una posibilidad que puede existir para Espa?a¡±. El contrato ¨²nico supondr¨ªa acabar con los diferentes tipos de contratos que existen y dejarlos en uno, que tendr¨ªa una indemnizaci¨®n por despido creciente seg¨²n la antig¨¹edad del empleado. El punto de partida ser¨ªa similar al de los contratos temporales (10 d¨ªas por a?o trabajado en 2013). Andor no tir¨® del manual cl¨¢sico de Bruselas (y Berl¨ªn) y aclar¨® que, en su opini¨®n, ¡°no hay una necesidad urgente¡± de ahondar en la flexibilizaci¨®n del mercado de trabajo

Tampoco est¨¢ en la agenda de Rajoy. El presidente, en una rueda de prensa conjunta en La Moncloa con su hom¨®logo portugu¨¦s, Pedro Passos Coelho, que tambi¨¦n ha realizado una dura reforma laboral en su pa¨ªs, reivindic¨® la norma espa?ola, que estuvo detr¨¢s de dos huelgas generales en 2012 (en marzo y en noviembre). Rajoy, preguntado expresamente por esa petici¨®n alemana, que lleg¨® el fin de semana, para que los pa¨ªses del sur, en especial Espa?a, profundicen su reforma laboral, descart¨® m¨¢s cambios. El presidente parec¨ªa as¨ª zanjar, de una manera mucho m¨¢s rotunda de lo que es habitual en ¨¦l, un debate interno en el Gobierno.

Desde el Ministerio de Econom¨ªa, presionan para endurecer la reforma. En el departamento que dirige Luis de Guindos no gusta que, si no se respetan los procedimientos formales de la norma, los jueces anulen los despidos colectivos. M¨¢s a¨²n despu¨¦s de que la nueva norma acab¨® con el preceptivo visto bueno de la autoridad laboral para llevarlos adelante. Pero ese fen¨®memo que se dio con relativa frecuencia en los primeros meses de la nueva norma, ya se est¨¢ invirtiendo y las declaraciones de nulidad por parte de los jueces remiten.

Tampoco la patronal ve con agrado lo que sucede en los tribunales. El presidente de la patronal, Juan Rosell, declara repetidamente que hay que hacer m¨¢s reformas laborales y pone como ejemplo a Alemania, donde la pasada d¨¦cada se hicieron cuatro.

Completa el triangulo Bruselas, donde aunque no se diga abiertamente, desagrada mucho que los tribunales tengan un papel relevante a la hora de decidir sobre los despidos. Y adem¨¢s, y esto s¨ª que lo dice la Comisi¨®n Europea por escrito y sin tapujos, reclama que se rebaje el coste del despido improdecente (33 d¨ªas por a?o trabajado con un l¨ªmite de 24 mensualidades tras la reforma laboral).

M¨¢s cerca de esta posici¨®n que de la de Guindos est¨¢ la ministra de Empleo, F¨¢tima B¨¢?ez. Ella ha descartado en m¨¢s de una ocasi¨®n cambiar la reforma y, concretamente, lo que ata?e al papel de los tribunales en los despidos.

Y en esta misma postura estaba este lunes Mariano Rajoy: ¡°Cuando uno est¨¢ gobernando tiene que tomar decisiones ateni¨¦ndose a la realidad y los intereses generales. Hay quien nos ha pedido, incluso hemos vivido una huelga general por este motivo, que demos marcha atr¨¢s en la reforma laboral. Y hay quien dice otras cosas¡±.

Despu¨¦s defendi¨® sin matices su reforma, a pesar de que en esta recesi¨®n se han destruido m¨¢s puestos de trabajo por cada punto de ca¨ªda del producto interior bruto que en la anterior. El Gobierno cree que sin ella habr¨ªan sido muchos m¨¢s y sobre todo ayudar¨¢ cuando Espa?a empiece a crecer, porque ser¨¢ necesario un crecimiento menor para generar empleo. ¡°Yo creo que la reforma laboral ha sido muy positiva, ha flexibilizado mucho la econom¨ªa, nos ha hecho ganar competitividad, ha dado lugar a que en vez de despedir a la gente muchas empresas han hecho suspensiones o cambios en la jornada, y ahora estamos en un proceso de evaluaci¨®n para ver los efectos de la reforma laboral. Ya le puedo adelantar que estamos muy satisfechos con c¨®mo ha funcionado esta reforma, y por tanto no tenemos ninguna intenci¨®n de cambiar ni en una ni en otra direcci¨®n la reforma laboral¡±, remat¨® el presidente, con una claridad inusual.

El propio Passos Coelho tambi¨¦n rechaz¨® m¨¢s cambios y dijo que en Portugal el proceso de la reforma laboral est¨¢ ¡°en lo esencial concluido¡±, por lo que tampoco acepta las sugerencias alemanas para endurecerla.

La satisfacci¨®n de Rajoy, y la que reiteradamente muestra el Gobierno con la normativa, contrasta con el compromiso que adquiri¨® el Ejecutivo con Bruselas a comienzos de mes en el Plan Nacional de Reformas remitido a Bruselas. En ¨¦l, se contempla la creaci¨®n de una comisi¨®n de expertos que analice la reforma laboral y sus consecuencias antes de tomar decisiones.