La vida de Jenny qued¨® marcada por la muerte de su hijo en Colombia

Jennifer Sof¨ªa Rebollo Tuir¨¢n, la primera v¨ªctima del falso maestro shaol¨ªn Juan Carlos Aguilar, hab¨ªa llegado a Espa?a 14 a?os atr¨¢s en busca de un futuro mejor. La vida no la hab¨ªa tratado del todo bien, sobre todo a ra¨ªz del atropello y muerte de su primer hijo, de tan solo cuatro a?os. Ese d¨ªa cambi¨® por completo la acomodada vida que llevaba en Monter¨ªa, capital del departamento colombiano de C¨®rdoba.

Sus amigos afirman que no sab¨ªan que Jennifer, de 40 a?os, ejerc¨ªa la prostituci¨®n, como se?alan fuentes de la investigaci¨®n, y recuerdan a una chica detallista y cari?osa que trabajaba de peluquera.

En Colombia viv¨ªa en una zona adinerada de la ciudad costera, en La Charme, donde su casa, seg¨²n cuenta Jael, vecina y amiga desde hace a?os, ¡°destacaba por ser la m¨¢s bonita y grande¡±. Jael cuenta que Jenny ten¨ªa pareja en Bilbao y ambos eran padres de un ni?o de tres a?os. En Monter¨ªa dej¨® otro hijo de ocho a?os al cuidado de su madre.

¡°La vida de Jenny en Colombia transcurr¨ªa sin grandes sobresaltos: entre semana acud¨ªa a la Universidad del Sin¨², donde estudiaba Medicina, y en los ratos libres ayudaba a sus empleadas en la peluquer¨ªa que regentaba en un conocido centro comercial. La muerte de su hijo de cuatro a?os lo cambi¨® todo. Se separ¨® y viaj¨® a Espa?a para empezar de nuevo¡±, recuerda su amiga. ¡°Viv¨ªa m¨¢s que bien all¨ª, pero la muerte de su hijo le cambi¨® la mentalidad¡±, recuerda Dominga Vega, presidenta de la Asociaci¨®n Colombiana de La Rioja.

De Logro?o a Bilbao

Logro?o fue la primera escala de Jennifer en Espa?a. Su t¨ªa Jovita Tuir¨¢n precisa por tel¨¦fono desde Monter¨ªa que ¡°all¨ª tambi¨¦n trabaj¨® como peluquera¡±. A pesar de mudarse a Bilbao, todav¨ªa manten¨ªa cierto contacto con las personas que la acogieron en la ciudad y no era dif¨ªcil que se dejara ver en las fiestas de San Mateo. Sus amistades la recuerdan como ¡°una chica encantadora y trabajadora que lleg¨® a Espa?a llena de ilusi¨®n¡±.

Su t¨ªa asegura que no daba muchos detalles sobre su trabajo. ?ltimamente hablaba de que la situaci¨®n se hab¨ªa complicado. Alberto Galindo, presidente de la Asociaci¨®n de Colombianos y Colombianas (Asocolvas), cuenta que hab¨ªa estado empleada en una peluquer¨ªa de Bilbao hace ya varios a?os, pero llevaba tiempo sin ejercer all¨ª. ¡°Jennifer era una chica muy feliz y sobre todo detallista, muy trabajadora. Con su madre hablaba todas las semanas¡±, recuerda su t¨ªa.