¡°La salida de Ruz ser¨ªa un cataclismo para el ¡®caso G¨¹rtel¡±

Jos¨¦ Mariano Ben¨ªtez de Lugo, de 72 a?os y medio siglo de ejercicio como letrado, preside la Asociaci¨®n de Abogados Dem¨®cratas de Europa (ADADE), una de las acusaciones populares personadas en el caso G¨¹rtel, la trama de corrupci¨®n vinculada al PP. Su actuaci¨®n el pasado 27 de junio fue clave para que el juez que lleva la causa, Pablo Ruz, enviara a prisi¨®n al extesorero popular Luis B¨¢rcenas. Fue ¨¦l quien pidi¨® que se celebrara una vistilla para determinar las medidas cautelares y quien, al limitar su petici¨®n a prisi¨®n eludible bajo fianza, forz¨® a la fiscal¨ªa a pronunciarse y elevar su petici¨®n a prisi¨®n incondicional. B¨¢rcenas, antes de ser conducido a la c¨¢rcel de Soto del Real, ¡°demacrado, congestionado y con pinta de desolaci¨®n¡±, se gir¨® hacia ¨¦l en los pasillos y le amenaz¨®: ¡°Socialista, me vas a encontrar¡±. Despu¨¦s le pidi¨® disculpas.

Afiliado al PSOE desde 1974, aunque distanciado de los sucesivos aparatos del partido, motero y navegante en catamar¨¢n, Ben¨ªtez de Lugo ha sido uno de los letrados m¨¢s activos en la investigaci¨®n de G¨¹rtel, aunque sus peticiones m¨¢s espectaculares han sido descartadas casi siempre por el juez Ruz. En febrero, tras conocerse los primeros fondos de B¨¢rcenas en Suiza, solicit¨® que el extesorero fuera vigilado con una pulsera magn¨¦tica, soluci¨®n que la fiscal¨ªa rechaz¨® por ¡°prematura¡±. El 8 de mayo, fue el primero en reclamar una fianza de responsabilidad civil de 54 millones para Luis B¨¢rcenas ¡ªel magistrado impuso una cantidad algo inferior, 43,2 millones, dos meses m¨¢s tarde¡ª. Tambi¨¦n fue el primero en pedir ¡ªy tambi¨¦n ha sido desestimado por Ruz¡ª que el expresidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar comparezca como testigo por la contabilidad b del PP. Ben¨ªtez de Lugo ha recurrido todos estos revolcones.

Pregunta. El juez rechaz¨® su petici¨®n de comparecencia del expresidente Aznar. Su ¨²ltima iniciativa ha sido pedir que se cite como testigo a Mariano Rajoy, que figura como perceptores de fondos en los papeles de B¨¢rcenas. ?Cree que la aceptar¨¢?

Respuesta. Me temo que la fiscal¨ªa ¡ªy con ella el juez¡ª se va a oponer, pero yo voy a seguir recurriendo. Otros, como P¨ªo Garc¨ªa Escudero \[que tambi¨¦n figura en la contabilidad secreta\], han sido llamados a declarar, y hay un principio jur¨ªdico muy ¨²til en este caso que dice que ¡°donde hay la misma raz¨®n debe haber la misma soluci¨®n jur¨ªdica¡±.

P. ?Qu¨¦ escenario prev¨¦ si Ruz, magistrado en comisi¨®n de servicio, es apartado de la investigaci¨®n cuando el titular del Juzgado Central de Instrucci¨®n n¨²mero 5, Miguel Carmona, ocupe el puesto en septiembre?

R. Me da p¨¢nico pensar en un cambio de juez. Pese a que ha rechazado muchas de las diligencias que he solicitado y que tiene poca iniciativa al margen de lo que le sugiere la fiscal¨ªa, Ruz es un magistrado muy s¨®lido jur¨ªdicamente y muy trabajador. Lleva la causa a la mano, muy de cerca. En 50 a?os de ejercicio no he visto a ning¨²n juez con esta minuciosidad y con una actividad tan fren¨¦tica. Cualquier otro magistrado que cogiera el asunto de nuevo tardar¨ªa un m¨ªnimo de seis meses en enterarse. Si Ruz deja la causa ser¨ªa un cataclismo.

P. Pero su continuidad cuando se incorpore Carmona ?podr¨ªa provocar una catarata de peticiones de nulidad de la causa por los abogados defensores?

R. El problema del juez pre determinado por la ley es solventable, como ya se ha visto en el caso Madrid Arena [sobre la avalancha humana en la que murieron cinco j¨®venes en noviembre] en la operaci¨®n Guateque [sobre la trama de licencias expr¨¦s en el Ayuntamiento de Madrid]. Que Ruz no sea el juez predeterminado es una interpretaci¨®n m¨¢s pol¨ªtica que jur¨ªdica.

P. ?A qu¨¦ cree que obedece la discusi¨®n en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y la petici¨®n de Miguel Carmona de que la plaza de juez de refuerzo en el Juzgado n¨²mero 5 se saque a concurso y no se adjudique directamente a Pablo Ruz?

R. Lo de Carmona yo lo veo como un problema de celos. Creo que ¨¦l no quiere tener a un magistrado equivalente en su juzgado, sino un mero subordinado, un machaca. El problema es que el Consejo funciona con criterios pol¨ªticos. Una posible soluci¨®n podr¨ªa ser que uno de los magistrados se encargara de la pieza principal de G¨¹rtel y el otro asumiera la pieza separada de los papeles de B¨¢rcenas.

P. Tras entrar en prisi¨®n, B¨¢rcenas ha cambiado de actitud: en su ¨²ltima declaraci¨®n, el lunes 15, admiti¨® la autor¨ªa de su contabilidad secreta y se ha mostrado colaborador con la justicia.

R. A las acusaciones populares nos cogi¨® por sorpresa que aceptara contestar nuestras preguntas. De hecho, tuve que improvisar mi interrogatorio sobre la marcha, porque estaba convencido de que no iba a responder a nuestras cuestiones. Antes, su contestaci¨®n habitual era: ¡°No quiero involucrar a terceras personas¡±. Ahora ha dado los nombres de los papeles y titubea solo a la hora de dar los nombres de sus negocios, ofrece solo los que ya se han detectado Yo creo que no ha ense?ado todas sus cartas.