Historias de mundos transparentes
La legislaci¨®n que permite el acceso de los ciudadanos a la informaci¨®n oficial llega a Espa?a con retraso y, pese a su avance, a¨²n queda lejos de los pa¨ªses m¨¢s abiertos
Los 27 alumnos de la escuela primaria de Roy Bridge, peque?a y remota poblaci¨®n de las Highlands escocesas, estaban a punto de quedarse sin colegio. Era diciembre de 2006 y las autoridades regionales hab¨ªan decidido enviarlos a Spean Bridge, pueblo situado a unos cinco kil¨®metros, donde se construir¨ªan nuevas aulas. Un informe que se manejaba en el Departamento de Educaci¨®n aseguraba que esta medida reducir¨ªa costes. Pero la asociaci¨®n de padres de alumnos decidi¨® que no se iba a quedar cruzada de brazos.
Enarbolando la ley de acceso a la informaci¨®n escocesa, toda una referencia para aquellos que creen en las bondades de la transparencia, pidieron que se hicieran p¨²blicos los informes en los que se hab¨ªa basado la decisi¨®n. Una vez conseguidos, los remitieron a expertos para que los revisaran. Hallaron graves errores en las proyecciones demogr¨¢ficas y financieras del informe: el ahorro esgrimido por las autoridades no era tal.
Tras 18 meses de batalla, en mayo de 2008, consiguieron que la escuela del pueblo no cerrara.
Esta peque?a historia ilustra la capacidad que pueden tener los ciudadanos de influir en las decisiones pol¨ªticas cuando cuentan con una ley de una transparencia amplia. Algo que no suceder¨¢ en Espa?a, seg¨²n afirman varias organizaciones que desde hace a?os abogan por una legislaci¨®n moderna. El jueves se votaba en el Parlamento la ponencia que ahora es remitida al Senado. ¡°La situaci¨®n de opacidad va a cambiar muy poco¡±, declara Victoria Anderica, abogada y coordinadora de campa?as de la organizaci¨®n Access Info en las c¨¦ntricas oficinas de la organizaci¨®n en Madrid. ¡°No nos vale una ley mediocre¡±.
La ley permiti¨® a los padres de alumnos de Roy Bridge impedir el cierre de la escuela del pueblo
Jos¨¦ Luis Ayll¨®n, secretario de Estado de Relaciones con las Cortes y hombre que ha estado al frente del buque de la ley en Espa?a, discrepa de este an¨¢lisis: ¡°Es una de las leyes m¨¢s dialogadas de las ¨²ltimas legislaturas", declara. ¡°En muchos casos supera a las de otros pa¨ªses: esa es la ventaja cuando llegas ¨²ltimo¡±.
Efectivamente, Espa?a, en este campo, llega como integrante del pelot¨®n de cola. Que a d¨ªa de hoy, a?o 2013, Espa?a a¨²n no cuente con una ley de transparencia es algo que provoca asombro fuera de nuestras fronteras. Suecia la tiene desde 1776. Los pa¨ªses latinoamericanos, en l¨ªneas generales, las elaboraron en los a?os 90. Espa?a a¨²n est¨¢ trabajando en ello.
El caso de la peque?a escuela de Roy Bridge acab¨® desencadenando un cambio legislativo de modo que, desde entonces, las autoridades locales tienen que ser consultadas ante medidas como el cierre de un colegio. Pero todo fue posible gracias a la ley de transparencia y a los poderes otorgados al comisionado, la figura, generalmente elegida por los Parlamentos, para velar por la aplicaci¨®n de la ley. ¡°Las autoridades se negaron a entregar la informaci¨®n demogr¨¢fica¡±, recuerda Kevin Dunion, comisionado en aquellos d¨ªas. ¡°Siempre es complicado pedir explicaciones a los gobernantes para que aclaren en qu¨¦ basaron sus decisiones¡±.
En Escocia, argumenta Dunion, que ocup¨® el cargo durante ocho a?os, las autoridades est¨¢n obligadas a entregar los informes internos y estudios en los que basan sus decisiones si el comisionado se los reclama; la legislaci¨®n tambi¨¦n incluye el contenido de e-mails intercambiados por funcionarios desde sus cuentas de correos p¨²blicas. Si las autoridades no quieren entregar alg¨²n documento, son ellas las que tienen que explicar por qu¨¦ lo retienen y qu¨¦ da?o se causa si se revela la informaci¨®n. ¡°Y esta es una de las claves¡±, apostilla Dunion. ¡°Hacer que est¨¦n disponibles las estad¨ªsticas y datos en que basan sus decisiones los pol¨ªticos es fundamental para un gobierno moderno; ayuda al ciudadano a entender que la toma de decisiones no es f¨¢cil¡±. No saber hace mucho m¨¢s da?o a la credibilidad, arguye Dunion.
La situaci¨®n de opacidad en Espa?a va a cambiar muy poco", declara Victoria Anderica, de Access Info
El acceso a los correos electr¨®nicos de funcionarios tambi¨¦n permiti¨® comprobar que la decisi¨®n del cierre de la escuela de Roy Bridge estaba tomada de antemano.
La ponencia de la ley de transparencia espa?ola remitida al Senado incluye la publicaci¨®n de ¡°memorias e informes que conformen los expedientes de elaboraci¨®n de los textos normativos¡±; pero excluye que se pueda pedir ¡°informaci¨®n que tenga car¨¢cter auxiliar o de apoyo como la contenida en notas, borradores, opiniones, res¨²menes, comunicaciones e informes internos o entre ¨®rganos y entidades administrativas (nuevo art¨ªculo 18)¡±.
¡°Esto es lo m¨¢s inaceptable¡±, exclama indignada Helen Darbishire, de la coalici¨®n Access Info. ¡°Las limitaciones de esta ley reflejan el comportamiento actual de la administraci¨®n en Espa?a¡±.
La frontera entre lo que es o no un informe interno es difusa y en la administraci¨®n, de hecho, no existe una tipolog¨ªa espec¨ªfica para determinar cu¨¢les ser¨ªan accesibles y cu¨¢les no.
Es una de las leyes m¨¢s dialogadas de las ¨²ltimas legislaturas¡±, dice el secretario de Estado Jos¨¦ Luis Ayll¨®n
El secretario de Estado Jos¨¦ Luis Ayll¨®n arguye que las legislaciones de pa¨ªses como Francia, Alemania o Portugal no abren la puerta a que se conozcan correos electr¨®nicos y estudios preparatorios y explica que lo importante es lo que afecta directamente a los ciudadanos y no las opiniones vertidas en el proceso de toma de una decisi¨®n. ¡°Excluir los e-mails y los borradores otorga mucho espacio a las autoridades para ocultar informaci¨®n¡±, declara el canadiense Toby Mendel, presidente del Center for Law and Democracy (Centro para la Ley y la Democracia). Y cuenta que en su pa¨ªs, si son de inter¨¦s p¨²blico, se puede reclamar que se abran: ¡°Los e-mails son el equivalente a lo que antes era el correo ordinario¡±, argumenta.
En Eslovenia, la legislaci¨®n funciona de manera similar a la escocesa o canadiense en este campo. Son las autoridades las que tienen que demostrar que desvelar una informaci¨®n es perjudicial, y que el da?o que puede causar prevalece sobre el inter¨¦s de la opini¨®n p¨²blica, para no liberarla. Como bot¨®n de muestra, un ejemplo sonado. El llamado Caso Patria. Un asunto cuyas derivadas han terminado conduciendo al exprimer ministro esloveno ante los tribunales por incurrir en una presunta corrupci¨®n.
Ocurri¨® en 2007. La comisionada tuvo que pronunciarse sobre una petici¨®n de informaci¨®n sobre la compra de armamento militar. El Ministerio de Defensa sosten¨ªa que se trataba de informaci¨®n clasificada. Pero en Eslovenia la comisionada tiene poder para desclasificarla en nombre del inter¨¦s p¨²blico.
As¨ª lo hizo. En el informe que redact¨®, dijo que al tratarse de un contrato p¨²blico y de la mayor compra de armamento militar de la historia en Eslovenia, el ministerio deb¨ªa entregar la informaci¨®n que se le requer¨ªa. Y el ministerio la entreg¨®. ¡°La informaci¨®n era altamente relevante¡±, explica Kristina Kotnik, vicecomisionada eslovena. ¡°Si no llega a ser accesible, no se habr¨ªa sabido del caso de corrupci¨®n de nuestro exprimer ministro¡±.
Esto siempre es una lucha. Un tira y afloja continuo con las autoridades¡±, dice la Comisionada eslovena
Los tribunales acabaron condenando a dos a?os de c¨¢rcel al exprimer ministro Janez Jansa por haber aceptado un soborno en la operaci¨®n de compra de 135 veh¨ªculos blindados por valor de 278 millones de euros. Jansa, l¨ªder del Partido Dem¨®crata esloveno, hoy en la oposici¨®n, ha recurrido al Tribunal Supremo.
Un comisionado comprometido con la transparencia y con poderes vinculantes para forzar a las autoridades a desclasificar informaci¨®n en nombre del inter¨¦s p¨²blico es una de las claves de una ley de transparencia moderna, se?alan desde Access Info. Eslovenia escogi¨® para el puesto a Natasa Pirc, una periodista con formaci¨®n en Derecho. ¡°La clave de una ley de transparencia es un comisionado que tenga coraje y energ¨ªa para mover las cosas¡±, dice sin asomo de dudas la comisionada desde su oficina en Liubliana. ¡°Hace falta conocimiento y persistencia. Si el comisionado es nombrado por motivos pol¨ªticos y le dan una oficina y gente que le traiga caf¨¦, no servir¨¢ para nada¡±.
Pirc cuenta con un equipo de 30 personas, que velan tanto por la transparencia como por la protecci¨®n de datos. Diez se dedican en exclusiva a trabajar por el acceso de los ciudadanos a la informaci¨®n.
En Espa?a, la Comisi¨®n de la Transparencia estar¨¢ integrada por un presidente (¨²nico miembro con dedicaci¨®n exclusiva), un diputado, un senador y representantes del Tribunal de Cuentas, el Defensor del Pueblo, la Agencia Espa?ola de Protecci¨®n de Datos, la secretar¨ªa de Estado de Administraciones P¨²blicas y la Autoridad de Responsabilidad Fiscal. ¡°Me hubiera gustado que pudieran ser doce miembros con dedicaci¨®n exclusiva¡±, explica el secretario de Estado Jos¨¦ Luis Ayll¨®n, ¡°pero el pa¨ªs no est¨¢ para eso en estos momentos¡±.
El presidente del Consejo (y la Comisi¨®n) de la Transparencia ser¨¢ alguien elegido por el Parlamento. Y no har¨¢ falta una mayor¨ªa cualificada para votarlo, lo que forzar¨ªa que los partidos llegaran a un acuerdo; ser¨¢ suficiente una mayor¨ªa absoluta. De eso se queja Jos¨¦ Enrique Serrano, representante socialista en el tr¨¢mite parlamentario, que sosten¨ªa la necesidad de una mayor¨ªa cualificada. Serrano, de todos modos, cuestiona el que se elija eso que viene en llamarse un experto independiente: ¡°?Experto en qu¨¦? ?E independiente de qui¨¦n?: eso no lo hay¡±, espeta. ¡°No tiene sentido que sea un filtro, ni tampoco un activista¡±, se?ala. ¡°Lo normal es que sea un jurista, porque aqu¨ª la cuesti¨®n ser¨¢ actuar contra la administraci¨®n que obstaculiza demandas de informaci¨®n¡±.
Manuel Villoria, catedr¨¢tico de Ciencia Pol¨ªtica, y miembro de la organizaci¨®n Transparencia Internacional, se?ala que la ley espa?ola va a superar, en t¨¦rminos generales, los requisitos m¨ªnimos, pero avisa: ¡°El Consejo puede acabar siendo un ¨®rgano de comisarios pol¨ªticos nombrados por la mayor¨ªa parlamentaria¡±. David Cabo, director de la plataforma Civio, que aboga por la transparencia, ahonda en la misma direcci¨®n: ¡°Habr¨¢ gente nombrada a dedo por el Gobierno¡±.
Hay varios modelos de transparencia en el mundo, y los que mejor funcionan no son siempre los que tienen una legislaci¨®n m¨¢s avanzada. La clave est¨¢ en la cultura de transparencia que haya y en las competencias y voluntad del comisionado. En Nueva Zelanda se apost¨® en los a?os 60 por la figura del Ombusdman, una figura similar a la del Defensor del Pueblo, aplicada a cuestiones de acceso a la informaci¨®n. ¡°El coste pol¨ªtico de no atender una petici¨®n del ombudsman es muy alto en ese pa¨ªs¡±, relata en conversaci¨®n telef¨®nica desde Montevideo Fabrizio Scrollini, estudioso de la transparencia afincado en Londres ¡ªdonde est¨¢ elaborando una tesis sobre los modelos neozeland¨¦s, chileno y uruguayo¡ª y presidente de DATA (Datos Abiertos, Transparencia y Acceso a la Informaci¨®n).
Scrollini cuenta que en Uruguay el debate est¨¢ de plena actualidad; explica que la ley de transparencia permiti¨® acceder a informaci¨®n sobre los problemas del agua potable de Montevideo que inicialmente no fue entregada alegando que se podr¨ªa generar alarma p¨²blica. ¡°Eso es una gran mentira¡±, arguye Scrollini, ¡°la alarma la sembraron los rumores y se extendi¨® porque el gobierno no dio la informaci¨®n a tiempo. En un mundo interconectado, lo que asusta a la gente es no tener informaci¨®n¡±.
Scrollini dice que Uruguay cuenta con una ley de alcance amplio, pero se?ala que al estar conferida a los jueces, genera altos costes legales para quien decida pedir informaci¨®n. Y explica que Chile cuenta con un Consejo de la transparencia bastante independiente. ¡°En Am¨¦rica Latina quedan pocos pa¨ªses sin una ley de acceso a la informaci¨®n. La mayor¨ªa tiene est¨¢ndares muy altos y se desarrollaron a lo largo de los a?os 90¡±.
El experto uruguayo se?ala que una vez aprobada la ley, es cuando empiezan los problemas: ¡°Es entonces cuando se inicia la gran lucha contra la resistencia a la transparencia¡±, dice. La comisionada eslovena incide: ¡°Esto siempre es una lucha. Un tira y afloja continuo con las autoridades¡±.
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