El Congreso autoriza a diez diputados a actividades extra del sector privado
Medios de comunicaci¨®n, fundaciones y despacho profesional, principales ocupaciones
Autorizados a trabajar fuera del Parlamento pero con muchas limitaciones. El Congreso de los Diputados ha dado el visto bueno a diez parlamentarios para que puedan realizar ¡°alguna actividad¡±, en la mayor¨ªa de los casos remunerada, siempre y cuando la contraprestaci¨®n econ¨®mica no venga de las administraciones. Esta ma?ana el pleno del Congreso ha votado a favor de la recomendaci¨®n de la Comisi¨®n del Estatuto del Diputado para que estos solicitantes puedan realizar la actividad para la que piden permiso. En el permiso se les recuerdan las dos normas b¨¢sicas: ¡°No podr¨¢n recibir remuneraci¨®n del sector p¨²blico¡± y sus tareas extra ¡°no pueden menoscabar su dedicaci¨®n absoluta¡±. Algunas de estas actividades solicitadas son para participar en medios de comunicaci¨®n.
Son los casos del exministro socialista Jos¨¦ Blanco y de la diputada del PP por Valladolid Arenales Serrano. El primero especifica que colaborar¨¢ con medios de comunicaci¨®n privados, en tanto que la diputada popular afirma que participar¨¢ en seminarios de los que obtendr¨¢ remuneraci¨®n. El Congreso parte de la base de que todo es incompatible con la tarea de representar a los ciudadanos, pero a partir de esa premisa se concede estudiar caso por caso. Y esto ocurre a lo largo de la legislatura en muchas ocasiones, dado que los parlamentarios reciben ofertas de colaboraci¨®n respecto a la que solicitan autorizaci¨®n. Lo mismo ocurre con su variaci¨®n patrimonial que debe ser comunicada.
Ya saben a qu¨¦ atenerse las diputadas ?ngeles ?lvarez (PSOE ) y Beatriz Escudero (PP) en el compromiso que tienen de no percibir remuneraci¨®n de administraciones p¨²blicas ni de organismos estatales o auton¨®micos. Estas no especifican nada sobre recepci¨®n de ingresos en su solicitud de autorizaci¨®n para participar en conferencias y debates p¨²blicos. Han obtenido la autorizaci¨®n pero deben tener en cuenta que si son organismos p¨²blicos no pueden cobrar de los mismos. Estas mismas recomendaciones las ha recibido el portavoz de Interior del PP, Conrado Escobar, que seguir¨¢ siendo miembro del Consejo Editorial de la Revista de Derecho Urban¨ªstico, de la que asegura no recibir ninguna compensaci¨®n econ¨®mica en tanto que declara la percepci¨®n de ¡°dietas¡± por formar parte del Observatorio de Actualidad Legislativa de la Universidad Internacional de La Rioja.
No recibe ninguna remuneraci¨®n el portavoz del Grupo Popular, Alfonso Alonso, por pertenecer a la Fundaci¨®n Fernando Buesa, ni tampoco es remunerada la actividad que realizada el diputado de CiU Carles Campuzano en la fundaci¨®n Roca i Gales, de car¨¢cter patronal. La participaci¨®n en medios de comunicaci¨®n del diputado del PSC Joan Canongia ¨C que ocupa el esca?o dejado por la exministra Carme Chac¨®n ¨C no tiene tampoco remuneraci¨®n y el otro diputado nuevo, Manuel Ib¨¢?ez Jim¨¦nez, que ha sustituido a Manuel Cervera, asegura que solo cobra los trienios por su condici¨®n de funcionarios de la Comunidad Valenciana, ya que de su puesto est¨¢ en excedencia.
De todos los examinados, quien m¨¢s quebranto econ¨®mico ha sufrido es el socialista Francisco Gonz¨¢lez Caba?a, diputado por C¨¢diz, que ha dejado su puesto en el Consejo de Administraci¨®n de Unicaja, toda vez que la nueva ley de Cajas, de 2011, proh¨ªbe a los cargos electos formar parte de las mismas.
Todos han obtenido el visto bueno de la C¨¢mara a sus nuevas actividades aunque todo queda a su sentido del deber y de la lealtad institucional de los parlamentarios en el cumplimiento de sus obligaciones. El Congreso no tiene capacidad fiscalizadora ni de control para saber si lo que dicen es cierto. Quiz¨¢ por esto la votaci¨®n no fue un¨¢nime: 242 votos favorables a que puedan realizar la actividad extra; 3 noes y 61 abstenciones.
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