Una reforma electoral fallida sumerge de nuevo a Asturias en la inestabilidad

La exigencia de UPyD de modificar la ley electoral en Asturias fue el principal escollo que demor¨® su pacto de legislatura con el PSOE en mayo de 2012. Su aceptaci¨®n, aunque a rega?adientes, permiti¨® al socialista Javier Fern¨¢ndez ser investido hace 17 meses con mayor¨ªa absoluta. El respaldo de los 17 diputados del PSOE, 5 de IU y 1 de UPyD le dio a Fern¨¢ndez un respaldo s¨®lido (23 de los 45 votos) frente a una derecha (12 esca?os de Foro y 10 del PP) que, aunque suma los mismos diputados que la izquierda, no hab¨ªa sido capaz de entenderse tras su fractura traum¨¢tica de 2011 y tampoco hab¨ªa logrado captar el respaldo de UPyD.

La exigencia de reforma electoral del partido magenta y la divisi¨®n fraticida de la derecha fueron dos impedimentos determinantes para la formaci¨®n de un gobierno conservador. UPyD, convertido en partido "llave" de mayor¨ªas en la Junta General del Principado (C¨¢mara legislativa), acab¨® inclin¨¢ndose por el PSOE. Los socialistas hab¨ªan ganando las elecciones, supon¨ªan una mayor garant¨ªa de estabilidad y adem¨¢s fueron la formaci¨®n que accedi¨® a sus demandas. Entre ellas, cambiar la ley electoral.

Ahora la renuncia del PSOE a llevar adelante la reforma de la norma que rige los comicios auton¨®micos, y que tambi¨¦n apoya y exige IU, ha colocado al ejecutivo de Fern¨¢ndez en la orfandad, sustentado s¨®lo en la minor¨ªa de su propio grupo y supeditado en lo que resta de legislatura a negociaciones ¨ªmprobas para superar la insuficiencia de sus votos. El PSOE alega que no se puede hacer un cambio de tanto calado institucional con el rechazo frontal de todas las formaciones de la derecha. Pero el efecto ha sido la retirada inmediata de los apoyos que ven¨ªan dando estabilidad al Gobierno socialista.

Javier Fern¨¢ndez ha dicho que "no tirar¨¢ la toalla" y ayer lo repiti¨® el consejero de la presidencia y portavoz del ejecutivo, Guillermo Mart¨ªnez, quien garantiz¨® "iniciativa pol¨ªtica y capacidad de acci¨®n". Mart¨ªnez acus¨® a Rosa D¨ªez de querer convertir a los asturianos en "rehenes de sus intereses particulares y ego¨ªstas".

Los socialistas descartan nuevas elecciones anticipadas. Si las hubiese, los asturianos tendr¨ªan que ir cuatro veces a las urnas en cuatro a?os. Eligieron Gobierno en 2011, volvieron a hacerlo en 2012, tendr¨ªan que volver a pronunciarse en 2014 si ahora se disolviese la C¨¢mara y habr¨ªa que volver a celebrar comicios regionales en 2015 junto con el resto de las autonom¨ªas de r¨¦gimen com¨²n. El electorado dif¨ªcilmente lo soportar¨ªa y el da?o para las instituciones ser¨ªa elevado. IU ya ha dicho que actuar¨¢ "con sentido de la responsabilidad". Y el diputado de UPyD, Ignacio Prendes, tambi¨¦n ha descartado la disoluci¨®n de la C¨¢mara. El PP, Mercedes Fer pidi¨® altura de miras y, como IU; llam¨® al di¨¢logo de todas las fuerzas. El Gobierno anunci¨® que convocar¨¢ a IU y UPyD para negociar los presupuestos de 2014. Francisco ?lvarez-Cascos (Foro) calific¨® la crisis como "el derrumbe de la gran pantomima".

La alternativa, una moci¨®n de censura promovida por los partidos de la derecha con el respaldo de UPyD, es casi imposible. Foro y PP est¨¢n enfrentados en una lucha tit¨¢nica por la hegemon¨ªa de la derecha asturiana y no cabe el entendimiento en lo que es una familia rota de modo traum¨¢tico tras la escisi¨®n liderada en 2011 por el ex secretario general del PP Francisco ?lvarez-Cascos, actual l¨ªder de Foro Asturias. Y UPyD tampoco tiene capacidad de entenderse con Foro y PP, que ya en 2012 se negaron a aceptar su exigencia de reforma electoral y que el jueves votaron en contra de la propuesta que hab¨ªan promovido UPyD, IU y PSOE. Ayer, la presidenta regional del PP, Mercedes Fern¨¢ndez, fue muy cr¨ªtica, al igual que el portavoz socialista, con Rosa Diez.

El veto frontal de los partidos de la derecha a la modificaci¨®n de esta norma b¨¢sica e institucional fue el argumento en el que se ampar¨® el PSOE para votar con Foro y PP en contra de la toma en consideraci¨®n por el parlamento de la propuesta de introducir cambios en el sistema electoral.

Javier Fern¨¢ndez ya hab¨ªa declarado sucesivas veces en los ¨²ltimos meses (por ejemplo, el 17 de abril) que la norma electoral, cuya actual redacci¨®n fue consensuada hace 26 a?os, "es una ley b¨¢sica y cuya reforma, aunque t¨¦cnicamente requiere el apoyo de 23 diputados, deber¨ªa contar con el mayor consenso. Los cambios de este tipo de leyes deben ir m¨¢s all¨¢ de la mayor¨ªa absoluta". "No es un asunto central, puede dejarse para el futuro", agreg¨® entonces. "Un cambio que cambia las reglas del juego merece un consenso amplio entre todas las fuerzas parlamentarias", sostuvo.

Para UPyD e IU esto supone un cambio de posici¨®n de los socialistas que "traiciona" lo pactado, "dinamita" los acuerdos y genera una profunda "desconfianza".

Los socialistas niegan la mayor y esgrimen el documento de los pactos de legislatura suscritos con UPyD el 18 de mayo de 2012 y que permitieron la investidura de Fern¨¢ndez con 23 de los 45 votos de la C¨¢mara cuatro d¨ªas m¨¢s tarde.

En el apartado 3.4 del documento de 15 folios firmado por Javier Fern¨¢ndez y el diputado de UPyD Jos¨¦ Ignacio Prendes se lee: "Partiendo de la idea de que el sistema electoral es un elemento estructural del sistema pol¨ªtico de la comunidad aut¨®noma (¡­) parece obvio que tanto su aprobaci¨®n como su reforma debe ser objeto de un amplio debate previo, y su configuraci¨®n final, objeto de consenso entre las fuerzas pol¨ªticas o, al menos, de un acuerdo de amplia mayor¨ªa".

Los socialistas interpretan este p¨¢rrafo como una exigencia que supedita el cumplimiento de este aspecto del pacto al entendimiento con otras fuerzas pol¨ªticas no firmantes del mismo pero que con las que habr¨ªa que contar, y m¨¢s por ser fuerzas con posibilidades de Gobierno, con el fin de garantizar la estabilidad de la norma. Para UPyD e IU, por el contrario, 23 de los 45 diputados de la c¨¢mara cumplen el requisito de "mayor¨ªa amplia".

La reforma electoral ten¨ªa dos pretensiones prioritarias. Una era introducir una mayor proporcionalidad y corregir el efecto distorsionador para las aspiraciones de las minor¨ªas de la existencia de tres circunscripciones electorales en las elecciones auton¨®micas.

"Fortalecer la calidad del sistema democr¨¢tico puede requerir ajustes en los sistemas de representaci¨®n ahora vigente. Sin renunciar al principio de reequilibrio territorial, se tratar¨ªa de avanzar en una mayor proporcionalidad que haga de la Junta General del Principado una instituci¨®n m¨¢s representativa", reza el documento pactado el a?o pasado por PSOE y UPyD. Se trataba, seg¨²n el compromiso suscrito por ambas fuerzas, de introducir "modificaciones que propicien la correcci¨®n de desequilibrios en el valor del voto de cada asturiano, independientemente del lugar en que resida".

?sta es una vieja reivindicaci¨®n de IU y que tambi¨¦n abandera UPyD. La divisi¨®n de Asturias en tres circunscripciones electorales se hizo para que los extremos occidental y oriental de la regi¨®n (las dos zonas m¨¢s rurales, menos industrializadas y con menor densidad de poblaci¨®n) no quedaran demasiado relegadas en el parlamento auton¨®mico y confinadas a una ¨ªnfima representaci¨®n frente a la zona central, que aglutina al 80% de la poblaci¨®n y a las siete mayores ciudades.

La existencia de tres circunscripciones, y, por a?adidura, que se necesiten menos votos para obtener un esca?o por las comarcas oriental y occidental que por la central, favorece a las fuerzas mayoritarias y penaliza a las formaciones menores y m¨¢s cuando tienen su principal implantaci¨®n en las zonas industriales y obreras del centro de Asturias, caso de IU, y poseen un perfil predominantemente urbano, como UPyD. En los ¨²ltimos comicios s¨®lo PSOE, Foro y PP obtuvieron diputados por los extremos de la regi¨®n.

Por la zona central se eligen ahora 34 de los 45 diputados; por la occidental, 6; y la oriental, 5. Esto supone que en la circunscripci¨®n central hay un diputado por cada 21.596 electores censados, mientras que la occidental dispone de un representante por cada 17.386 y la oriental (la menos habitada), uno por cada 12.809, con lo que, a menores censo, el coste de obtener un esca?o tambi¨¦n es menor.

La propuesta a la que hab¨ªan llegado PSOE, IU y UPyD en los ¨²ltimos meses consist¨ªa en mantener las tres circunscripciones pero corrigiendo la asignaci¨®n de diputados. La propuesta planteaba que el Occidente tuviera 5 diputados; el Oriente, 3 y el centro, 28. As¨ª se elegir¨ªan 35 de los 45 diputados. Los 10 restantes se asignar¨ªan, tambi¨¦n mediante la ley D' Hont, en funci¨®n de los votos sobrantes recibidos por cada partido entre los tres distritos electorales y que formar¨ªan una "bolsa" ¨²nica para cada formaci¨®n. De este forma, 10 esca?os se elegir¨ªan en un distrito ¨²nico con los restos que no hubiesen obtenido representaci¨®n en las tres circunscripciones. Con ello se pretend¨ªa combinar la representaci¨®n territorial con una mayor proporcionalidad.

Los pactos de PSOE y UPyD manten¨ªan la actual exigencia de obtener al menos el 3% de los votos para entrar en el reparto de esca?os.

El otro compromiso de los acuerdos de mayo de 2012 era "el desbloqueo de las listas electorales". Para ello, las tres fuerzas concernidas en este prop¨®sito se hab¨ªan concertado en los ¨²ltimos meses en la introducci¨®n de la obligaci¨®n de primarias en los partidos para la elecci¨®n de los candidatos a la presidencia del Principado y el desbloqueo parcial del resto de las listas, de forma que los votantes pudieran cambiar el orden de sus integrantes.

El veto de Foro y PP, secundado por el PSOE, vuelve a colocar ahora a Asturias en la inestabilidad e incertidumbre por segunda vez dos a?os y medio y convierte a esta legislatura en la m¨¢s accidentada en 42 a?os de autonom¨ªa junto con la de 1995-1999, la ¨²nica en la que gobern¨® el PP y que acab¨® con este partido rompi¨¦ndose a mitad de mandato.