Dos polic¨ªas acusados de robar a Matutes piden protecci¨®n al juez

Dos polic¨ªas nacionales destinados en Ibiza temen por su vida. Acusados de haber robado 1,7 millones de euros de la caja fuerte de la sede de la empresa de la familia del patr¨®n y ex ministro de Exteriores, Abel Matutes, han solicitado la protecci¨®n del juez despu¨¦s de que uno de ellos, Jos¨¦ Joaqu¨ªn Fern¨¢ndez, fuera golpeado y torturado por dos encapuchados en su casa.

"Les han puesto dentro de un c¨ªrculo y llevan una diana en el pecho", advierte a EL PAIS Ascensi¨®n Joaniquet, la abogada penalista que defiende a los agentes, que ha reclamado este jueves a un juez de Ibiza que ordene que sus dos clientes dispongan de medidas de protecci¨®n personal y exige que los gastos corran a cargo de las fuerzas de seguridad. "Tienen miedo y uno ha sido atacado, herido grave", afirma.

Ambos agentes son ahora supuestos delincuentes, est¨¢n imputados y en libertad provisional por su implicaci¨®n confesa ¨Cuno como autor y otro como encubridor¨C, en el robo del a?o en la isla balear. Los encapuchados que apalearon a Fern¨¢ndez buscaban una parte del bot¨ªn sustra¨ªdo supuestamente oculta tras descerrajar la caja fuerte del grupo de empresas Matutes, la multinacional tur¨ªstica y de ocio propiedad de la familia.

Por ahora, 1,76 millones de euros en billetes y en paquetes clasificados por su valor (20, 50 y 100 euros) han sido recuperados en cuatro partidas y en tres confesiones-entregas consecutivas. ¡°Ellos [los dos polic¨ªas] se han arrepentido, han confesado y han devuelto el dinero del robo¡±, rese?a la letrada. Cientos de miles de euros sustra¨ªdos se guardaban en la c¨¦ntrica casa empresarial Matutes, el fin de semana del 26 de octubre. La abogada cree que las amenazas a sus clientes se debe al baile de cifras en torno al robo y exige al juez que emplace a los Matutes para que especifiquen la cantidad robada exactamente. Joaniquet razona que intenta frenar el cerco diab¨®lico sobre los dos polic¨ªas que hacen vida casi normal, a la espera del juicio.

En la primera denuncia, la empresa valoraba el robo en 187.810 euros, la cantidad total depositada en la caja fuerte. El exministro anunci¨® que dar¨ªa 100.000 para los hu¨¦rfanos de la Polic¨ªa por la pronta soluci¨®n del caso. Matutes fue ampliando la denuncia, sin embargo, a medida que se iban recuperando m¨¢s fondos en maletas, bolsas, enterradas o ocultas en el maletero de un coche en la carretera. La polic¨ªa ha retornado los fondos a sus propietarios.

Un portavoz de la empresa concret¨® que la caja blindada no estaba, ni siquiera camuflada, en el despacho del que llaman ¡°el jefe¡± ¨Cpara distinguirle de ¡°junior¡±, su hijo Abel Matutes Prats¨C, sino que estaba instalada en una dependencia de la tercera planta del edificio exclusivo donde se ¡°almacenan archivos y papeleos de administraci¨®n¡±. Un ejecutivo quiso minimizar la situaci¨®n y detall¨® que dos millones pueden parecer mucho dinero para un ciudadano corriente pero son poca cosa, casi "calderilla" en una firma que maneja cientos de millones ¨Clos Matutes fueron banqueros durante m¨¢s de medio siglo¨C.

El autor confeso del robo, quien desarbol¨® de madrugada y sin inconvenientes las cerraduras de la caja fuerte, tiene un altura media y us¨® un soldador de acetileno con la boca quemadora manipulada. El caco trabaj¨® con lentitud, sin prisas ni peligros. Conoc¨ªa bien la casa, sus sistemas de alarmas y el fluir de la caudales. El ladr¨®n confeso y arrepentido (destap¨® parte del bot¨ªn en sus manos y de su c¨®mplice) es el polic¨ªa Rafael Rodr¨ªguez, de 39, a?os que fue escolta y ch¨®fer durante a?os del "jefe" de la multinacional.

Rodr¨ªguez dej¨® la protecci¨®n oficial del millonario y expol¨ªtico en tercera generaci¨®n de financieros y navieros Matutes ¨Cque extienden sus negocios desde Sicilia hasta Jamaica¨C, retorn¨® a su escala policial y, a la vez, pas¨® a ser encargado de seguridad de la sede central de la casa empresarial de Matutes conocida en Ibiza como ca n'Abel. Un directivo de los Matutes indic¨® que ¡°el jefe est¨¢ fuera de la isla, en Am¨¦rica, y est¨¢ muy disgustado. Decepcionado con un hombre que fue de su confianza y que le pidi¨® por favor trabajar en casa. Le acogi¨® con su familia, le dio vivienda y le traicion¨® as¨ª".

Rodr¨ªguez trabaj¨® en ca n'Abel y, a la vez, en la comisar¨ªa varios a?os. Abr¨ªa de madrugada las oficinas, viv¨ªa all¨ª y vigilaba de noche porque habitaba con su mujer en una vivienda del edificio, una bella construcci¨®n moderna de V¨ªctor Rahola, reconocido arquitecto emparentado con los Matutes. El contrato empresarial del encargado de seguridad lo firm¨® la mujer? de Rodr¨ªguez para disfrazar la incompatibilidad manifiesta de este con su empleo de polic¨ªa. "Ella controlaba las labores de limpieza del edificio", narra la empresa. La familia Rodr¨ªguez fue desalojada de inmediato de su piso de acogida tras la acusaci¨®n.

Tras vac¨ªar la caja fuerte, Rodr¨ªguez tom¨® unos 100.000 mil euros para s¨ª, dio el resto a su amigo Fern¨¢ndez para que los guardara y ocult¨® otras partidas en otros lugares. Pocos d¨ªas despu¨¦s de ser detenido y confesar, a medias, regres¨® y revel¨® d¨®nde estaba escondida otra parte del bot¨ªn, hasta llegar a los 1,76 millones.

Veinte d¨ªas despu¨¦s del robo, el polic¨ªa encubridor que ocult¨® unos 800.000 euros, Jos¨¦ Joaqu¨ªn Fern¨¢ndez, fue apaleado y torturado por dos encapuchados que acudieron a su casa de campo en Bal¨¤fia, en el coraz¨®n de la isla. Un embozado que hablaba bien espa?ol y otro con acento rumano ¨Cseg¨²n su testimonio¨C los dos armados militarmente, le acosaron y exigieron que revelara d¨®nde ocultada m¨¢s dinero. ?l, fue sentado en una silla, recibi¨® golpes para que cantara y su mujer fue maniatada y recluida en una habitaci¨®n hasta que se deshizo de las ligaduras y llam¨® a la Guardia Civil.

La letrada Joaniquet sostiene que gente del hampa de la isla cerca y acosa a los dos polic¨ªas ¨Cahora sin armas ni placas porque est¨¢n suspendidos de empleo y sueldo¨C por la creencia de que ocultan m¨¢s dinero suelto del robo. Jos¨¦ Joaqu¨ªn Fern¨¢ndez, JJ, el encubridor apaleado, hab¨ªa sido condecorado recientemente con la Cruz al M¨¦rito Policial con distintivo blanco. Era un popular piloto de rallies automovil¨ªsticos precisamente patrocinado por las empresas de Matutes.