Mux¨ªa vuelve a vestir luto

Lo que pasa en Mux¨ªa (A Coru?a) en las ¨²ltimas horas recuerda bastante a lo que pas¨® hace once a?os por estas fechas, cuando otra ma?ana de invierno la villa se despert¨® con un olor extra?o. Entonces fue el del chapopote. Ahora ha sido el del humo de las llamas que consumieron el santuario de la Virxe da Barca. Y ahora los comit¨¦s de crisis de autoridades se reproducen y las ofertas de colaboraci¨®n ¡ª¡°muchas de antiguos voluntarios¡±¡ª llegan a miles, seg¨²n el alcalde, F¨¦lix Porto. El abatimiento ciudadano es el mismo.

¡°Se ve a todo el mundo con la cabeza baja, creyese o no creyese. Era como un museo de nuestra historia¡±, dice Ram¨®n Vilela, un marinero que vive camino del templo, y cuya casa es el punto de salida y llegada del circuito de las dos mujeres que hacen footing cada ma?ana y que fueron las que dieron la alarma. Vilela fue de los primeros en llegar y en comprobar que no se pod¨ªa hacer nada: ¡°El viento tiraba el agua hacia atr¨¢s, y las cubas de los bomberos no pod¨ªan maniobrar sobre las piedras¡±.

To?ico Haz Amigo sinti¨® en A Barca la misma impotencia que cuando vio el coido lleno de crudo y fue de los primeros en lanzarse a recogerlo. ¡°Ve¨ªas a la gente llorando, no solo de Mux¨ªa, sino de toda la costa. A una se?ora de Laxe que se deshac¨ªa en llanto hubo que detenerla porque quer¨ªa entrar como fuese¡±, dice este percebeiro de 37 a?os. ¡°Era, es, un s¨ªmbolo para todos, ni siquiera asociado al tema religioso, y como parte del camino de Santiago era s¨ªmbolo de la construcci¨®n de Europa de hace medio milenio¡±, dice Natxo Castro, gerente de la Cofrad¨ªa.

Lo peor, si cabe, es que el santuario del siglo XII reconstruido en el XVIII acababa de ser objeto de una restauraci¨®n que elimin¨® tropel¨ªas, como el suelo de terrazo que le hab¨ªan instalado en su d¨ªa, para dejar a la vista las losas de piedra originales. ¡°Es una pena que despu¨¦s de una obra as¨ª no se instalasen detectores de humo o esas alarmas de seguridad que tiene la gente en las casas. Claro que, como siempre, esas cosas se miran despu¨¦s de que pasan las desgracias¡±, se lamenta Vilela. Especialistas en incendios de la Guardia Civil trataron ayer de establecer el punto exacto en el que descarg¨® el rayo que provoc¨® el incendio. La iglesia, las instalaciones portuarias y el faro de Mux¨ªa est¨¢n conectadas. La arqueta m¨¢s pr¨®xima a la iglesia no presenta signos de haberse visto afectada por un rayo y no est¨¢ quemada, por lo que la descarga pudo incidir en otro punto de esa interconexi¨®n.