?Es la deflaci¨®n, est¨²pido!
Christine Lagarde, directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), ha pronunciado la palabra maldita: deflaci¨®n.
Es el nuevo fantasma que recorre el mundo desarrollado.
Es la primera vez que de forma tan clara y sin ambages, el FMI alza la voz. Detr¨¢s de los bastidores se advierten los esfuerzos del economista jefe del FMI urgiendo a la directora gerente. De franc¨¦s a francesa. De Olivier Blanchard a Christine Lagarde. La deflaci¨®n -que no desinflaci¨®n- puede bloquear la d¨¦bil recuperaci¨®n mundial.
Lagarde tiene una "gran esperanza".
"Que 2014 sea un a?o trascendental, el a?o en el que los `siete a?os d¨¦biles?, econ¨®micamente hablando, se deslicen hacia ?los siete a?os fuertes?". Lagarde evoca t¨ªmidamente, sin llegar a utilizar las mismas palabras, el libro del G¨¦nesis y el sue?o del fara¨®n en el cual siete vacas flacas se comen a siete vacas gordas. Las primeras representan, seg¨²n la interpretaci¨®n de Jos¨¦, siete a?os de penurias y las segundas siete a?os de prosperidad.
Ahora bien, vayamos a la realidad.
Mi experiencia en el seguimiento sistem¨¢tico de la informaci¨®n, los discursos y las reuniones del FMI, durante largos a?os, me dice que detr¨¢s de esta met¨¢fora esperanzadora hay ademas de un wishful thinking, expresi¨®n de deseos, una seria preocupaci¨®n.
?Es la deflaci¨®n, est¨²pido!
Lagarde dice: "Con una inflaci¨®n que discurre por debajo de los objetivos de muchos bancos centrales [?atenci¨®n especial a Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo!] vemos [s¨ª, Blanchard lo ha conseguido, la directora lo ha dicho] crecientes riesgos de deflaci¨®n, lo que puede ser desastroso para la recuperaci¨®n. Si la inflaci¨®n es el genio entonces la deflaci¨®n es el ogro que debe ser combatido decisivamente".
La directora gerente del FMI no habla de desinflaci¨®n, no. Est¨¢ invocando el fantasma que ha transformado durante m¨¢s de 15 a?os a la econom¨ªa de Jap¨®n en una econom¨ªa zombie, una econom¨ªa estancada, que a d¨ªa de todav¨ªa hoy tiene dificultades para levantar cabeza a pesar de los cuantiosos est¨ªmulos monetarios y fiscales.
Seg¨²n Lagarde, "los bancos centrales deben volver a pol¨ªticas monetarias m¨¢s convencionales solo cuando el crecimiento robusto se encuentre firmemente enraizado".
No se puede quitar las muletas. La econom¨ªa asistida debe mantenerse.
Ignoro si Lagarde se lo dijo a Mariano Rajoy, que la ha visitado a comienzos de esta semana en Washington.
Espa?a, precisamente, ha registrado una inflaci¨®n del 0,3% en 2013 con una tasa de paro cercana al 26%. Y lo que pasa en Espa?a es coherente con la evoluci¨®n de la Eurozona. La inflaci¨®n del mes de diciembre ha sido de una tasa interanual del 0,8% (contra un objetivo en torno, aunque por debajo, del 2% anual) con una tasa de desempleo del 12,1%.
Pero la ilustraci¨®n de las presiones deflacionistas (no hablamos de la cl¨¢sica definici¨®n de deflaci¨®n como ca¨ªda del nivel general de precios de bienes y servicios, ni de una deflaci¨®n en la Eurozona en t¨¦rminos agregados, es decir, del conjunto de los pa¨ªses del euro) la ha dado la econom¨ªa alemana, cuyo dato de crecimiento se ha dado a conocer en las ¨²ltimas horas.
La econom¨ªa m¨¢s poderosa y boyante de la Eurozona y una de las principales del mundo desarrollado ha registrado un crecimiento del 0,4% en 2013, contra un 0,7% en 2012.
El "modelo" econ¨®mico de la Eurozona ha experimentado en 2013, aproximadamente, un super¨¢vit por cuenta corriente del 6% en 2013, contra un 7% en 2012.
La teor¨ªa del "modelo" que se presume de aplicar en Espa?a dice que con unos importantes super¨¢vits de la balanza de pagos, convirtiendo a las exportaciones en el motor de la econom¨ªa, se genera un potente PIB. La realidad es que todo lo que ha podido comprar un fuerte super¨¢vit exterior como el de Alemania ha sido en 2013 una tasa de actividad positiva del 4%.
Y ello teniendo en cuenta que las exportaciones representan aproximadamente el 50 % del PIB, siendo dicha tasa en Espa?a del orden del 30%.
El aldabonazo de Lagarde es importante. Va dirigido a que la Reserva Federal, el Banco de Jap¨®n y el Banco de Inglaterra, mantengan y en alg¨²n caso, como el nip¨®n, incrementen, los est¨ªmulos monetarios (compra de bonos p¨²blicos y privados).
Y que el BCE se incorpore de una vez por todas a la batalla a trav¨¦s, por ejemplo, del est¨ªmulo de "pr¨¦stamos espec¨ªficos" con exigencias de garant¨ªas de menor nivel de solvencia para superar la fragmentaci¨®n financiera que sigue sin resolver el problema que Draghi admiti¨® durante la crisis y amenaza de desintegraci¨®n del euro, en julio de 2012.
El panorama espa?ol, seg¨²n Moody's
Precisamente, ayer Moody's Analytics, el servicio de estudios de la agencia de rating norteamericana Moody's, apuntaba, en un informe de coyuntura sobre Espa?a, el tema de la deflaci¨®n.
"Un indicador clave de presi¨®n de la demanda sugiere que Espa?a atraviesa un periodo de deflaci¨®n suave similar a la que padeci¨® entre marzo y octubre de 2009. El PIB de Espa?a es menor a su capacidad productiva potencial. La Comisi¨®n Europea, la OCDE y el Fondo Monetario Internacional esperan que este diferencial de producci¨®n [output gap] seguir¨¢ siendo negativo en 2014, lo que implica que el ¨ªndice de precios al consumo probablemente fluct¨²e alrededor de cero", se?ala.
El informe recuerda que "en noviembre el IPC sufri¨® una contracci¨®n interanual por primera vez en cuatro a?os".
Y a?ade: "Una deflaci¨®n prolongada impedir¨ªa que la recuperaci¨®n gane terreno. Los hogares y las empresas tendr¨ªan dificultades para pagar sus pr¨¦stamos actuales, impuls¨¢ndoles a reducir o posponer el gasto. Del mismo modo, la deflaci¨®n har¨ªa m¨¢s dif¨ªcil que el Gobierno pueda reducir su deuda, incrementando las presiones para reestructurarla y/o austeridad fiscal. Espa?a, con elevados niveles de deuda p¨²blica, es particularmente vulnerable".
Para la agencia, "si la recuperaci¨®n econ¨®mica es demasiado d¨¦bil para prevenir un periodo de deflaci¨®n prolongada, el pa¨ªs puede sufrir una c¨ªrculo vicioso en el que precios a la baja lleva a las empresas a recortar la producci¨®n, a?adiendo presi¨®n para reducir los salarios y la demanda, alimentando nuevas ca¨ªdas de precios".
Seg¨²n el estudio, "la perspectiva de riesgos para Espa?a est¨¢n ponderados a la baja. La posibilidad de separaci¨®n de Catalu?a puede desalentar la inversi¨®n de las empresas extranjeras y la [inversi¨®n] de capital"
Estas advertencias se producen precisamente cuando el ministro de Econom¨ªa, Luis de Guindos, est¨¢ solicitando ante las agencias de rating, entre ellas Moody's, una subida de la calificaci¨®n del Reino de Espa?a.
El informe tambi¨¦n analiza la deuda p¨²blica en las carteras de los bancos espa?oles.
"Es insostenible", se?ala tras recordar que los bancos espa?oles se endeudaron en el BCE a tipos bajos [carry trade] e invirtieron el dinero en bonos p¨²blicos espa?oles, obteniendo la diferencia, entre el 1% que les cobraba el BCE y el 4,6% de media que ha pagado el Tesoro espa?ol en 2013, para sus cuentas de resultados.
Pero "las compras de [bonos p¨²blicos de Espa?a] por bancos espa?oles han ayudado a elevar el precio de la deuda gubernamental y a bajar los tipos de inter¨¦s. El bono p¨²blico a diez a?os ha registrado un promedio del 4,6 en 2013, por debajo del 5,9% del a?o anterior".
En el ambiente de econom¨ªa "feliz" y "euforia" que se vive en el Gobierno espa?ol, la advertencia del FMI sobre el peligro de deflaci¨®n que amenaza a la d¨¦bil recuperaci¨®n mundial y los comentarios del servicio de estudios de Moody?s, deber¨ªan ser motivos de reflexi¨®n.
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