Juez y fiscal vuelven a chocar sobre los ingresos de do?a Cristina
Los peritos de Hacienda y la polic¨ªa respaldan la tesis absolutoria ¡°No interprete mis preguntas¡±, se rega?aron Castro y Horrach
La infanta Cristina comparecer¨¢ en dos semanas ante el juez Jos¨¦ Castro, pero este s¨¢bado se vivi¨® un episodio preliminar en el juzgado de Palma. No fue un ensayo, pero s¨ª un debate de contenido penal, en el que se visualiz¨®, de nuevo, una confrontaci¨®n entre juez y fiscal.
La fiscal¨ªa pretendi¨® desbaratar el argumentario de sospechas expuesto por el instructor a lo largo de los ¨²ltimos meses. Se polemiz¨® sobre cuestiones muy t¨¦cnicas relacionadas con impuestos y arquitectura financiera, estructuras necesarias para el delito fiscal, expedientes de Hacienda e informes jur¨ªdicos. Tambi¨¦n se aclar¨® qu¨¦ se entiende por facturas ficticias, simuladas y no falsas y se profundiz¨® en el levantamiento del velo societario. Fue examinada la trama societaria del Instituto N¨®os de Urdangarin y su socio Diego Torres y el ap¨¦ndice de la sociedad Aizoon, una patrimonial creada por los duques de Palma, supuesta pantalla para ocultar ingresos.
El magistrado no grabar¨¢ en v¨ªdeo la declaraci¨®n
Cuando la Infanta se siente el 8 de febrero ante el juez Castro no funcionar¨¢ en el juzgado la c¨¢mara de v¨ªdeo que registra las declaraciones de imputados y testigos. Solo habr¨¢ una toma de audio para levantar acta del interrogatorio, un momento hist¨®rico por otra parte. Los abogados no podr¨¢n introducir en la sala tel¨¦fonos, c¨¢maras ni tabletas.
El instructor atiende una petici¨®n de la defensa de la hija del Rey para evitar el riesgo de filtraci¨®n de im¨¢genes. La defensa de Diego Torres y los acusadores de Manos Limpias protestaron ante lo que consideran un trato desigual. El juez razonar¨¢ su decisi¨®n.
Dada la repercusi¨®n medi¨¢tica del caso, el juzgado ha preservado en su caja fuerte los DVD con los documentos audiovisuales de los interrogatorios, que no se entregan a las partes. Los abogados interesados en repasar episodios deben visionarlos en el mismo juzgado. I?aki Urdangarin no fue grabado en su primera comparecencia y estuvo declarando casi 22 horas, en dos d¨ªas. En su segunda declaraci¨®n s¨ª hubo captura en v¨ªdeo.
En los relatos de hechos y en los argumentos incriminatorios instructor y acusador chocaron. El juez, que imputa a la hija del Rey por supuesto fraude fiscal y blanqueo de dinero, discrep¨® abiertamente del fiscal Pedro Horrach, que rechaza por completo la existencia de indicios. La tesis del fiscal resalta que Cristina de Borb¨®n no administr¨® Aizoon, no blanque¨® capitales ni cometi¨® fraude fiscal. Los representantes de la polic¨ªa y Hacienda rechazaron haber recibido instrucciones o presiones de sus superiores para amparar a la hija del Rey. Recalcaron que trabajaron a las ¨®rdenes del juez.
La pol¨¦mica entre juez y fiscal tuvo episodios de interpelaciones personales sobre una supuesta intervenci¨®n de los ¨®rganos del Gobierno en los informes exculpatorios. ¡°No interprete mis preguntas¡±, se reprocharon juez y fiscal.
Los testigos y peritos, entre ellos tres inspectores de Hacienda y una jefa policial especializada en delincuencia econ¨®mica (todos propuestos por el fiscal) cuestionaron las tesis del juez. Horrach y sus aliados (la abogac¨ªa del Estado y los representantes del Gobierno balear) consideran que las pruebas testificales y periciales contradicen la tesis del juez. Durante los interrogatorios a 12 testigos, de ellos cuatro peritos, propuestos por Horrach, se evidenci¨® el abismo jur¨ªdico que le separa del juez.
La inspectora jefe de la polic¨ªa que ha dirigido la investigaci¨®n sobre facturas y gastos efectuados por la Infanta en el palacete de Pedralbes asegur¨® que nunca vio ning¨²n indicio de un presunto blanqueo de capitales en la actuaci¨®n de Cristina de Borb¨®n. La inspectora dijo que, desde que empezaron a investigar las actividades de Aizoon, se sab¨ªa que la Infanta pag¨® gastos personales con la tarjeta de la compa?¨ªa, lo que no supone que cometiera delito fiscal.
La inspectora de Hacienda que investig¨® a Urdangarin y Diego Torres por presunto delito fiscal rechaz¨® interferencias de sus jefes. Ratific¨® que la Infanta no cometi¨® delito y explic¨® que, antes de que se iniciase el proceso penal por este fraude, ya hab¨ªan indagado cuentas y movimientos de la hija del Rey en el curso de una inspecci¨®n en N¨®os por el manejo de casi 150.000 euros en billetes de 500 por parte de la esposa de Diego Torres, Ana Mar¨ªa Tejeiro.
Finalmente, fue interrogado un perito de Manos Limpias, que se autodenomin¨® ¡°mercenario jur¨ªdico tributario¡± y considera que la Infanta habr¨ªa cometido los dos delitos por los que fue imputada por el juez Castro. La satisfacci¨®n del fiscal y la defensa de la Infanta era evidente una vez acabada la sesi¨®n: creen que qued¨® de manifiesto que la Infanta no generaba renta como para cometer un delito.
Adem¨¢s, representantes de siete grandes marcas y compa?¨ªas que retribuyeron al yerno del Rey como asesor y consejero (Lagard¨¨re Ressources, Havas Sport France, Mixta ?frica, Pernod Ricard, Aceros Bergara, Seelinger y Conde), tendr¨¢n que testificar sobre los trabajos ¡°de car¨¢cter personal¨ªsimo¡± facturados por I?aki Urdangarin a trav¨¦s de Aizoon, la sociedad particular de los duques de Palma.
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