Contables, administradores, primos y otros figurantes
Antoine S¨¢nchez, Jos¨¦ Luis Izquierdo e Isabel Jord¨¢n... pero la lista es demasiado larga
? ANTOINE S?NCHEZ. Antoine S¨¢nchez, primo de Correa y tambi¨¦n nacido en Casablanca, fue uno de los detenidos, junto con Crespo, en febrero de 2009. Y all¨ª estuvo, en Soto del Real, hasta su liberaci¨®n en enero de 2011 por el juez Pedreira, 40.000 euros de fianza por medio. Vivi¨® muchos a?os en Senegal haciendo negocios varios. Prestaba su nombre para las empresas de Correa, que le encargaba todo tipo de trabajos, tanto en Espa?a como en el extranjero. La polic¨ªa grab¨® muchas de sus conversaciones desde Colombia con el propio Correa o con Crespo. No deb¨ªa tener una posici¨®n relevante en la toma de decisiones y parece el eslab¨®n m¨¢s d¨¦bil de la cadena, tal y como se le ha visto en los interrogatorios, siempre al borde del llanto.
Correa era consciente de ello y las cosas entre el jefe y su primo se deterioraron a lo largo del tiempo. Un informe de la Direcci¨®n General de la Polic¨ªa y de la Guardia Civil de la Nochebuena de 2008 recoge las conversaciones entre Correa y Pablo Crespo, en la que este le cuenta la detenci¨®n de su primo Antoine por la Polic¨ªa Nacional en la Comisar¨ªa de Marbella, por un presunto delito de malos tratos a su compa?era sentimental, Catherine Elsa Pereira, de nacionalidad senegalesa. Correa reacciona enfurecido y le insiste a Crespo en que le mande a cualquier sitio del extranjero porque le quiere ¡°ver fuera de su vida¡±. Le muestra, tambi¨¦n, su preocupaci¨®n por ¡°los problemas que les podr¨ªa acarrear las declaraciones que pudiera efectuar¡±. Alguna raz¨®n ten¨ªa, porque el primo enviaba un escrito en agosto de 2011 al juez Pedreira, poco despu¨¦s de su liberaci¨®n, en la que solicitaba que desbloqueara sus cuentas, porque estaba en una situaci¨®n ¡°dram¨¢tica¡± y a cambio se mostraba dispuesto a llegar a ¡°cualquier acuerdo¡± con la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n. O sea, a cantar lo que hiciera falta. Desde entonces, nada se sabe del primo Antoine.
? JOS? LUIS IZQUIERDO. Izquierdo es el contable que manejaba los libros de todas las sociedades en la oficina de Serrano, 40. Conoc¨ªa al detalle todas las operaciones, ya fueran de Easy Concept Comunicaci¨®n, de TCM o Good and Better porque adem¨¢s llevaba con Correa desde los a?os noventa. Intent¨® esconder el famoso pen drive durante el registro de la polic¨ªa en la oficina pero con nulo ¨¦xito. La polic¨ªa, tras examinar su contenido tuvo claro, y as¨ª lo escribi¨® en su informe al juez, que exist¨ªa ¡°un sistema de contabilizaci¨®n de operaciones con fondos de una caja paralela¡±. Un dinero que presuntamente ¡°procede de comisiones por la adjudicaci¨®n de obras urban¨ªsticas y la consecuci¨®n de un elevado n¨²mero de adjudicaciones p¨²blicas irregulares¡±. En sus declaraciones, muy detalladas, fue muy claro: ¡°Me limito a hacer lo que me dicen, lo que manda¡±. ?l, por si acaso, el d¨ªa de la detenci¨®n llevaba en el bolsillo 5.000 euros en billetes de 500. Por si llegaba alguna orden de improviso...
Izquierdo se sab¨ªa de memoria los movimientos de las distintas cuentas b de la trama. El esqueleto sobre el que se sustentaba toda la carne de la G¨¹rtel. Y los sobres, esos sobres omnipresentes en toda esta historia. Cont¨® a la polic¨ªa que en una ocasi¨®n le hab¨ªan entregado un sobre con un mill¨®n de euros. Y habl¨® de alg¨²n otro sobre m¨¢s: ¡°Conozco a Alfonso Bosch, me suena que es un amigo de Pablo. Lo he visto un par de veces por la oficina. Crespo me dio un sobre con 120.000 euros para que se le entregara a este se?or¡±. Alfonso Bosch: diputado regional del PP, exconcejal del Ayuntamiento de El Escorial cuando hubo que resolver los peque?os problemas de log¨ªstica que caus¨® la gran boda, y exgerente de la Empresa Municipal del Suelo de Boadilla del Monte.
? ISABEL JORD?N. Jord¨¢n trabaj¨® a las ¨®rdenes de Correa desde 2003 o 2004. Seg¨²n cont¨® ella misma al juez Pedreira, fue el diputado Rafael Hernando, al que conoc¨ªa a trav¨¦s de otras amistades del grupo de Alejandro Agag, el que le facilit¨® una entrevista para trabajar en Easy Concept. Pero curiosamente, quien primero la entrevista es el mism¨ªsimo Jes¨²s Sep¨²lveda, entonces secretario de acci¨®n electoral en el PP, lo que da idea de la relaci¨®n entre Correa y algunos cargos del PP. Despu¨¦s la ve Correa. Pronto empieza a organizar actos para ellos. El primero, el homenaje de la Comunidad de Madrid a quienes trabajaron en el 11-M, bomberos, ambulancias¡ Su interlocutor es Alberto L¨®pez Viejo.
Jord¨¢n es una trabajadora espabilada y pasa a hacer m¨¢s cosas. Se encarga, por ejemplo, de todos los tr¨¢mites de Fitur ¡ªun buen pelotazo¡ª as¨ª como de poner en marcha algunos de los proyectos importantes, como las Oficinas de Atenci¨®n al Ciudadano (o Cliente, que dice ella). Y m¨¢s asuntos delicados, como pagar la ropa que le regalaron al alcalde de Boadilla, Arturo Gonz¨¢lez Panero ¡ª¡°porque no sabe vestir¡±, dec¨ªa don Vito¡ª, por un valor de 10.400 euros, que ya es ropa.
Correa la nombra administradora de algunas de sus empresas, siempre con ese car¨¢cter de tapar la propiedad real. Y ah¨ª surgen los problemas, porque Jord¨¢n se niega a firmar las cuentas. A partir de ese momento, es imposible seguir el hilo a la bronca, porque la exadministradora va ahora a declarar ¡ªcuando lo hace, porque en su ¨²ltima comparecencia ante el juez Ruz se neg¨® a hacerlo¡ª con escolta policial por las amenazas, seg¨²n ella, provenientes de sus exjefes. Tambi¨¦n denunci¨® seguimientos de un coche. Mientras, Correa y Crespo aseguran que Jord¨¢n les ha robado cerca de 300.000 euros y que por eso la echaron. Jord¨¢n tiene, como no pod¨ªa ser menos, una versi¨®n distinta. Cuenta que en una reuni¨®n en mayo de 2007 con Correa, Alfonso Bosch, Tom¨¢s Mart¨ªn Morales (le veremos m¨¢s veces), Gonz¨¢lez Panero ¡ªse supone que ya elegantemente vestido¡ª, El Bigotes, Pablo Crespo y Blanco Bal¨ªn, se habla abiertamente en la mesa de ama?ar un contrato para hacer unos folletos en Boadilla por dos millones de euros. Ella declar¨® a Pedreira que se neg¨® a participar en tan feo asunto, y ah¨ª, junto a no querer firmar las cuentas, empez¨® su declive. Sea cual sea su papel final en la trama, es obvio que en alg¨²n momento fue personal de absoluta confianza y supo, oy¨® y vio muchas de las operaciones que ahora ve la justicia. Los trajes de Camps incluidos. Todo lo cont¨® al magistrado y a la fiscal¨ªa.
Por supuesto que hay muchos m¨¢s personajes. Est¨¢ por ejemplo Javier Nombela, uno de los jefes de las oficinas de Correa, que tampoco acaba bien con la trama. Aunque al salir encuentra un acomodo respetable: asesor del concejal delegado de la Junta Municipal de Moncloa, ?lvaro Ballar¨ªn, cuando Alberto Ruiz-Gallard¨®n era alcalde. Sali¨® del Ayuntamiento en cuanto se supo su implicaci¨®n en el caso G¨¹rtel. Jes¨²s Calvo Soria, exgerente de la Complutense y ex alto cargo de la Comunidad de Madrid, imputado por blanqueo de capitales. O Andr¨¦s Bernab¨¦, el fiel ch¨®fer de Correa, que algo sabr¨¢ de las andanzas de su jefe, antes, durante y despu¨¦s de su paso por Soto del Real. Pero es que la lista ¡ªm¨¢s de 100 imputados, recordemos¡ª es demasiado larga para individualizar a todos y cada uno de ellos. Hay presuntos blanqueadores de nivel, como Eduardo Eraso o Antonio Villaverde, cargos directivos de las empresas de Correa, como C¨¢ndido Herrero, consejero delegado de Orange Market y simplemente empleadas, como Alicia M¨ªnguez o M¨®nica Magari?os.
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