La polic¨ªa quiere a los periodistas lejos de la Infanta en la entrada del juzgado

Los reporteros ¨Cy la sociedad- se pueden quedar sin buenas im¨¢genes de la infanta Cristina en el juzgado de Palma, en su hist¨®rica cita judicial el pr¨®ximo s¨¢bado como imputada por supuesta corrupci¨®n. La polic¨ªa aduce razones de seguridad en su pretensi¨®n de distanciar a los periodistas de la que es ubicaci¨®n habitual en el patio del edificio de los juzgados. Este alejamiento del escenario en la puerta de entrada al final de la rampa dificultar¨¢ que los c¨¢maras y fot¨®grafos puedan trabajar con perspectiva general, cercan¨ªa y encuadre ajustados.

La polic¨ªa pretendi¨® que la prensa no estuviera en el patio, que quedara en la calle, sin apenas posibilidades de captar im¨¢genes directas. El juez decano, Francisco Mart¨ªnez Espinosa, que tiene la autoridad plena de la gesti¨®n en la sede judicial, consider¨® un ¨¦xito el que no fuera vetada la presencia de la prensa en el patio, al anunciar los criterios generales del plan de seguridad dise?ado por el Ministerio de Interior con la Casa del Rey para el acceso de la Infanta en coche hasta la puerta del edificio. El juez rechaz¨® esa media extrema de expulsi¨®n de la prensa que contemplaron y solicitaron los mandos policiales.

Unos 170 reporteros y camar¨®grafos (de los 300 informadores acreditados) acceder¨¢n a la zona habilitada. Si el juez decano no marca su criterio y autoridad ante la polic¨ªa en defensa de la ubicaci¨®n de la prensa para el ejercicio de su trabajo peligra, pues, la ilustraci¨®n de las cr¨®nicas de este momento hist¨®rico.

En un corralito aislado y alejado, sin una primera l¨ªnea de vallas de 12 metros como es habitual, ser¨¢n dif¨ªciles para la mayor¨ªa las buenas fotos al bajar del coche o las secuencias de varios segundos de la hija del Rey, a su llegada y salida. Las dos citas judiciales de su esposo, I?aki Urdangarin, se desarrollaron sin dificultades para los periodistas. En la primera ocasi¨®n, el yerno del Rey se par¨® ante la valla tras las cuales se sit¨²an los cronistas y efectu¨® una breve declaraci¨®n exculpatoria. Este extremo, en el caso de la Infanta, parece descartado.

Si esta decisi¨®n del Ministerio de Interior se mantiene, el punto base informativo quedar¨¢ esquinado, sin vistas directas y cercanas a toda la c¨¦lebre rampa de acceso.

Los periodistas tendr¨¢n acceso controlado y por turno al patio y a las zonas habilitadas en las calles de las inmediaciones. En la puerta de los juzgados, a m¨¢s de 150 metros del acceso trasero, se han convocado diferentes concentraciones y performances reivindicativas, republicanas y contra la corrupci¨®n.