30.000 inmigrantes aguardan en Marruecos para saltar a Ceuta y Melilla

Alrededor de 30.000 subsaharianos est¨¢n asentados en Marruecos a la espera de poder entrar clandestinamente en Europa, en la mayor¨ªa de los casos a trav¨¦s de Ceuta y Melilla, seg¨²n fuentes policiales espa?olas. Tras el reciente salto a la valla fronteriza de Ceuta, que por ahora se ha saldado con la muerte de 15 africanos ahogados en la playa del Tarajal, todos los informes resaltan la ¡°enorme presi¨®n migratoria¡± que hay en torno a las dos ciudades aut¨®nomas espa?olas. En Marruecos hay unas ¡°bien estructuradas organizaciones criminales¡± que se ocupan de transportar y canalizar a los miles de inmigrantes que huyen de sus pa¨ªses.

Los subsaharianos con medios econ¨®micos optan por los servicios de las redes mafiosas para llegar a Europa en barcos a motor o bien ocult¨¢ndose en coches con doble fondo para burlar as¨ª los controles fronterizos. Sin embargo, un gran n¨²mero de inmigrantes apenas tiene dinero para subsistir y menos a¨²n para pagar las tarifas de las mafias. Por eso, el salto de las vallas de Ceuta y Melilla es su ¡°¨²nica opci¨®n para pasar de Marruecos a territorio espa?ol, ya que no tiene coste econ¨®mico y puede realizarse en cualquier momento¡±, seg¨²n fuentes de la Seguridad del Estado.

Los saltos masivos del vallado, como el que se produjo el pasado 6 de febrero en Ceuta, no est¨¢n organizados por las mafias, aunque s¨ª se realizan de forma coordinada por los grupos de inmigrantes apostados en los campamentos cercanos. En muchas ocasiones, la fecha en que se va a producir una avalancha de este tipo desde Marruecos est¨¢ fijada con varios d¨ªas de antelaci¨®n y esa informaci¨®n es conocida incluso entre los inmigrantes que aguardan en otros pa¨ªses vecinos. Las fuentes informantes aseguran, por ejemplo, que en Nuadib¨² (Mauritania) se conoci¨® con cuatro d¨ªas de antelaci¨®n que el pasado d¨ªa 6 se iba a producir un salto tumultuario a la valla de Ceuta, hasta el punto de que un grupo de cameruneses se puso inmediatamente en marcha para intentar sumarse a esa avalancha humana.

Los servicios de informaci¨®n espa?oles saben que buena parte de las tramas de inmigraci¨®n irregular de Marruecos, Mauritania, Nigeria y Senegal no pueden enviar sus cargamentos humanos en cayucos hasta Canarias por el refuerzo de la cooperaci¨®n entre autoridades y las mayores medidas de control y vigilancia. Por eso las redes se han volcado en el traslado de sus ¡°clientes¡± hasta alrededores de Ceuta y Melilla.

La polic¨ªa conoce tambi¨¦n la existencia de grupos criminales marroqu¨ªes que se dedican a transportar a subsaharianos desde Ceuta a Melilla (o viceversa) en funci¨®n de la situaci¨®n puntual en cada ciudad. Si en una de ellas es m¨¢s f¨¢cil la entrada, disponen de medios para transportar a los inmigrantes durante los 400 kil¨®metros que las separan.

Seg¨²n fuentes policiales, los saltos masivos por Ceuta y Melilla son ¡°el m¨¦todo de entrada m¨¢s preocupante por su potencial desestabilizador, por la capacidad para crear alarma social y el riesgo que entra?a el empleo de la violencia por parte de los subsaharianos y de las fuerzas de seguridad marroqu¨ªes, lo que ya ha provocado varias v¨ªctimas mortales¡±.

Otra fuente de preocupaci¨®n en Ceuta y Melilla son las entradas clandestinas de inmigrantes ocultos en veh¨ªculos con dobles fondos o compartimentos secretos. ¡°Este m¨¦todo va en aumento, gracias a la complicidad de polic¨ªas corruptos en ambos lados de la frontera que alertan a las mafias del d¨ªa y momento id¨®neo para realizar estos transportes ilegales¡±, a?aden analistas policiales.

Ceuta se ha convertido en uno de los principales focos de atracci¨®n para los subsaharianos debido a su proximidad a la Pen¨ªnsula y al gran n¨²mero de conexiones mar¨ªtimas con Algeciras (C¨¢diz). Eso aumenta las posibilidades de cruzar el Estrecho en ferrys, buques mercantes, autobuses y camiones. Los miles de inmigrantes que pretenden llegar al continente europeo desde Ceuta se asientan en campamentos montados en la zona de Casiago, en las inmediaciones de Castillejos (Marruecos), as¨ª como en los montes pr¨®ximos a la carretera que une T¨¢nger con Tetu¨¢n.

El vallado de Ceuta, debido a las caracter¨ªsticas del terreno en que se asienta, ¡°es m¨¢s dif¨ªcil de saltar que el de Melilla¡±, seg¨²n fuentes policiales. Eso hace que los intentos de franquearlo se produzcan siempre por los extremos, donde la cerca de la alambrada acaba en el mar (los espigones de Tarajal y Benz¨²). Esta, en efecto, fue la v¨ªa utilizada por los cientos de inmigrantes que protagonizaron el pasado d¨ªa 6 un salto que concluy¨® con el ahogamiento de 15 subsaharianos.

30.000 inmigrantes aguardan en Marruecos para saltar a Ceuta y Melilla

En Melilla, los inmigrantes aguardan a pegar el salto en campamentos improvisados en el macizo del Gurug¨², as¨ª como en los montes de Afrahy Selouane, adonde llegan procedentes de Oujda y Nador. Habitualmente proceden de pa¨ªses franc¨®fonos, pero en Oujda ¡°es notable la presencia de redes nigerianas que controlan el tr¨¢fico de seres humanos desde de la frontera argelina¡±. Las informaciones policiales recalcan que ¡°la topograf¨ªa de la frontera de Melilla dificulta el control de su valla y sigue permitiendo la aproximaci¨®n de los inmigrantes irregulares, a pesar de los esfuerzos de las fuerzas de seguridad marroqu¨ªes por impedirlo¡±.

Quienes intentan entrar en la Pen¨ªnsula por v¨ªa mar¨ªtima lo hacen bien en embarcaciones a motor o en balsas de remo playeras. Ambas posibilidades, que est¨¢n controladas por las redes criminales, tienen sus bases de operaciones en T¨¢nger, Alhucemas y los alrededores de Ceuta y Melilla. Aunque las balsas son peligrosas, los inmigrantes irregulares se lanzan a las aguas confiados en que, tras eludir la vigilancia de la Marina real marroqu¨ª, ser¨¢n posteriormente rescatados por el Salvamento Mar¨ªtimo espa?ol, que los conducir¨¢ a tierra firme.

Por otra parte, las autoridades espa?olas se muestran muy satisfechas de hacer cegado otra v¨ªa de entrada de inmigrantes: los cayucos que los trasladaban a Canarias desde Senegal y Gambia. Desde el a?o 2009, no se han registrado m¨¢s llegadas de este tipo de embarcaciones, gracias a la colaboraci¨®n de los Gobiernos respectivos. Ahora, esas mafias han cambiado sus rutas y se dedican tambi¨¦n a trasladar a sus clientes hasta el norte de Marruecos.

Los movimientos migratorios que acceden a Marruecos desde Argelia tienen que contar con la colaboraci¨®n de bandas nigerianas que disponen de medios de transporte y alojamiento. ¡°Esas tramas han alcanzado un alto grado de especializaci¨®n y ahora monopolizan gran parte del negocio¡±, seg¨²n diversos informes policiales.

Las redes criminales suelen cobrar una tarifa de entre 25 y 45 euros a cada inmigrante al que facilitan la entrada en Ceuta o Melilla a nado o con flotadores; 1.000 euros si lo hace en peque?as embarcaciones; entre 3.000 y 4.000 euros si lo meten en coche; y entre 5.000 y 6.000 euros si le facilitan un pasaporte falso.

Seg¨²n los servicios de informaci¨®n espa?oles, a cada subsahariano le cuesta entre 1.000 y 1.200 euros el pasaje para cruzar el Estrecho si lo hace en una peque?a embarcaci¨®n convencional; pero la suma se eleva a 3.000 si lo hace en una embarcaci¨®n r¨¢pida.