El PP deja solo al senador Granados y le fuerza a dejar sus dos esca?os

Nadie, ni en la direcci¨®n del Partido Popular ni en el Gobierno, se atrevi¨® a salir en su defensa, y Francisco Granados se vio forzado este jueves a abandonar sus dos esca?os, en el Senado y en la Asamblea de Madrid. El ex n¨²mero dos de Esperanza Aguirre anunci¨® la renuncia a sus cargos tras conocerse, el pasado mi¨¦rcoles, que tuvo hasta una cuenta en Suiza con 1,5 millones de euros. El dirigente popular se apresur¨® a negar esta circunstancia y solo reconoci¨® que mantuvo un dep¨®sito en ese pa¨ªs entre 1996 y 2000, cuando ya era alcalde de Valdemoro (Madrid). Pero nadie en la c¨²pula de la formaci¨®n quiso poner la mano en el fuego por ¨¦l. M¨¢s de un a?o despu¨¦s del estallido del caso B¨¢rcenas, cuyas consecuencias judiciales siguen sacudiendo al partido, el PP se limit¨® a difundir un comunicado sin membrete oficial en nombre de Granados.

El ex secretario general de los populares madrile?os se qued¨® solo desde el primer momento. Todos, en G¨¦nova, 13, la sede del PP; prefirieron desvincularse, al menos formalmente, de sus explicaciones: una actuaci¨®n que demuestra que, cada vez que el partido se enfrenta a un esc¨¢ndalo interno, la c¨²pula recurre a dos tipos de reacciones p¨²blicas. Esto es, cerrar filas con el interesado o dejarle solo.

Salvando las diferencias en el fondo de la cuesti¨®n, en el caso de la antigua mano derecha de Aguirre ocurri¨® algo parecido al episodio del supuesto chantaje del exdiputado navarro Santiago Cervera. En esa ocasi¨®n, la direcci¨®n nacional adujo que Cervera hab¨ªa sido descubierto en flagrante delito. La circunstancia de Granados es completamente distinta, aunque tanto en el Ejecutivo como en la direcci¨®n nacional del PP preocupa la posibilidad de que el exdirigente madrile?o pudiera conservar una cuenta en Suiza despu¨¦s de la aprobaci¨®n de la llamada amnist¨ªa fiscal en 2012, una medida impulsada por el Ministerio de Hacienda.

Y precisamente el departamento que dirige Crist¨®bal Montoro, que tambi¨¦n ha evitado pronunciarse sobre este caso, ya ha dado el primer paso para esclarecer el origen de los fondos. La Agencia Tributaria abri¨® el mismo mi¨¦rcoles una investigaci¨®n sobre la cuenta suiza atribuida Granados. Se trata, en realidad, de un procedimiento habitual, puesto que en estos casos Hacienda act¨²a de oficio para aclarar las circunstancias que llevan a las autoridades suizas a comunicar la existencia de una cuenta.

Seg¨²n lo publicado, el descubrimiento de los dep¨®sitos se produjo en un rastreo rutinario del Ministerio de Justicia suizo, una operaci¨®n que se realiza para prevenir los movimientos internacionales y la entrada de dinero negro procedente de la corrupci¨®n, el narcotr¨¢fico u otras actividades delictivas. A pesar de eso, el ministro espa?ol, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, no se quiso pronunciar sobre el dep¨®sito investigado.

El PP ha forzado a Granados a renunciar a sus cargos pero no podr¨¢ evitar un enfrentamiento con el ya exsenador. Ayer este manifest¨® su hartazgo por los comentarios que han circulado en el partido tras desvelarse la informaci¨®n, volvi¨® a insistir en que ¡°jam¨¢s¡± deposit¨® dinero en el extranjero durante su actividad pol¨ªtica e hizo el primer amago de revolverse contra su formaci¨®n. Vino a afirmar, primero en una entrevista en la cadena Cope y despu¨¦s en 13TV, que no se encuentra contento con el cargo que actualmente ocupa en el PP y en las instituciones, denunci¨® ¡°intoxicaciones¡± de algunos sectores del partido y mantuvo que, en su opini¨®n, lleg¨® a representar ¡°un estorbo¡± para Aguirre, l¨ªder del PP madrile?o y expresidenta de la Comunidad de Madrid, porque ¨¦l era quien ten¨ªa ¡°el apoyo de la militancia del PP¡±. En este contexto, Granados reconoci¨® que es evidente la existencia de una ¡°pelea interna en el seno del PP de Madrid¡±, controlado ahora por Aguirre y el presidente auton¨®mico, Ignacio Gonz¨¢lez.

Antes de estas manifestaciones, la propia Aguirre reiter¨® en Antena 3 que no considera suficientes las explicaciones ofrecidas hasta el momento por su antiguo hombre de confianza. ¡°Veo estupendamente bien que dimita¡±, se?al¨® la dirigente popular, muy beligerante con la direcci¨®n nacional en los meses m¨¢s complicados del caso B¨¢rcenas. La dimisi¨®n supone, en opini¨®n, un gesto de ¡°dignidad¡±, puesto que ¡°tener una cuenta en Suiza no es delito pero para un pol¨ªtico s¨ª¡±. Granados fue destituido como secretario general del PP madrile?o a finales de 2011. Su lugar lo ocup¨® unos meses despu¨¦s Gonz¨¢lez, su enemigo ¨ªntimo. Aguirre recompens¨® de esta manera a su n¨²mero dos durante nueve a?os en el Ejecutivo auton¨®mico.