Rajoy busca refugio en la econom¨ªa en el debate del estado de la naci¨®n

La dicotom¨ªa entre pol¨ªtica y econom¨ªa, aunque sean parte de lo mismo, recorre toda la l¨ªnea estrat¨¦gica de Mariano Rajoy. Algunos de los suyos se quejan de que hace poca pol¨ªtica. Dicen que parece un tecn¨®crata y no un veterano que lleva 30 a?os en la c¨²pula del PP, antes de AP. Pero ¨¦l, dicen los m¨¢s cercanos, sigue pensando que los espa?oles solo le juzgar¨¢n por la econom¨ªa, lo ¨²nico que le har¨¢ ganar o perder elecciones. As¨ª que llega el debate del estado de la naci¨®n, acontecimiento pol¨ªtico clave, que empieza pasado ma?ana, y Rajoy parece decidido a refugiarse en la econom¨ªa, a desgranar datos de la recuperaci¨®n, para evitar los ataques de la oposici¨®n sobre asuntos pol¨ªticos en los que se mueve m¨¢s inc¨®modo.

¡°Esta legislatura empez¨® como claramente econ¨®mica, con un sobresalto tras otro, la amenaza del rescate y una gran subida de impuestos en la primera semana en La Moncloa, pero ahora est¨¢ dominada por la pol¨ªtica, con Catalu?a, el aborto, el final de ETA o la ¨²ltima crisis en Ceuta. Rajoy quiere hablar solo de econom¨ªa, es ah¨ª donde est¨¢ c¨®modo y cree que puede hablar de resultados, aunque los otros asuntos tambi¨¦n los tocar¨¢ al final¡±, se?ala una de las personas que conocen bien al presidente.

Rajoy arranca el a?o mucho peor de lo que esperaba, precisamente por los conflictos internos que han generado el aborto y otras cuestiones. Y quiere volcarse en el debate. Pero la cita, de dos intensos d¨ªas, es importante para todos los partidos. Es una especie de escaparate y esta vez coincide en plena precampa?a de unas elecciones como las europeas, donde todos tienen puestas muchas esperanzas, tambi¨¦n los peque?os ahora que el bipartidismo parece en crisis.

El PSOE en especial se juega mucho. Ganar estas elecciones europeas, como le auguran algunas encuestas ¡ªincluso en el PP est¨¢n preocupados porque sus datos les dan que es posible la derrota¡ª, implicar¨ªa una inyecci¨®n de moral y tal vez har¨ªa que Alfredo P¨¦rez Rubalcaba pensara en seguir. Perderlas implicar¨ªa una crisis interna dura, porque sobre ¨¦l caer¨ªa toda la presi¨®n, ya que ha colocado como candidata a su n¨²mero dos, Elena Valenciano.

En este contexto, y en el que podr¨ªa ser el ¨²ltimo debate del estado de la naci¨®n de Rubalcaba, el jefe de la oposici¨®n tambi¨¦n har¨¢ un discurso econ¨®mico, aunque mucho m¨¢s centrado en la crisis social y en c¨®mo est¨¢n afectando a los ciudadanos, en especial a la parte m¨¢s d¨¦bil, los recortes. Ah¨ª Rajoy siempre trata de neutralizarle recordando la herencia del PSOE, lo que suele anular el debate. Rubalcaba recordar¨¢ que desde que Rajoy lleg¨® a La Moncloa se han destruido 1.050.000 empleos, seg¨²n la EPA, y el presidente dir¨¢ que con el PSOE fueron 3,5 millones.

El presidente prefiere hablar de datos de recuperaci¨®n ¡ªadelantar¨¢ nuevas cifras de empleo y cotizaciones de febrero que son positivos, seg¨²n el Ejecutivo¡ª y de su prometida bajada de impuestos. No podr¨¢ detallarla, porque a¨²n no est¨¢ lista ni pactada con Bruselas, detalle clave porque la Comisi¨®n teme que los baje demasiado para ganar las elecciones de 2015. Ni siquiera estar¨¢ a¨²n el informe de los expertos. Pero el presidente s¨ª dar¨¢ pinceladas buscando titulares positivos.

Rubalcaba tiene inter¨¦s en sacar asuntos pol¨ªticos de largo recorrido. Por supuesto, la reforma del aborto. ¡°Nos ha derechizado y complica la campa?a de las europeas con Valenciano como candidata¡±, admite un parlamentario del PP. Rajoy huir¨¢ de ella.

El a?o pasado el debate se centr¨®, pese a los intentos de Rajoy por evitarlo, en la corrupci¨®n. Pocas semanas antes, EL PA?S hab¨ªa publicado los papeles de B¨¢rcenas. Rajoy no pronunci¨® el nombre del tesorero durante dos d¨ªas de largu¨ªsimos debates, pese a que todos se lo reclamaban. Trat¨® de escabullirse prometiendo las leyes anticorrupci¨®n que solo ahora est¨¢ enviando a las Cortes.

Rubalcaba no parece querer centrarse este a?o en la corrupci¨®n, aunque s¨ª en lo que ¨¦l llama triple crisis: social, pol¨ªtica y territorial. Y ah¨ª puede venir uno de los momentos clave del debate. El l¨ªder del PSOE exigir¨¢ a Rajoy que se mueva para resolver el problema de Catalu?a y defender¨¢ su salida, la misma que proponen Susana D¨ªaz, presidenta de Andaluc¨ªa, o incluso Felipe Gonz¨¢lez, que protagoniz¨® un largo debate con Artur Mas organizado por el periodista Jordi ?vole: una reforma constitucional para buscar un nuevo encaje. Rajoy intentar¨¢ apelar a la unidad PP-PSOE en este tema y los suyos no prev¨¦n movimientos, aunque en este asunto cualquier gesto es clave, y desde Catalu?a tambi¨¦n se seguir¨¢ con gran inter¨¦s el debate pol¨ªtico m¨¢s importante del a?o.