Mas quiere desbloquear el di¨¢logo con Rajoy hablando de econom¨ªa
La mayor¨ªa de los espa?oles son partidarios de una reforma constitucional
Once meses despu¨¦s de su ¨²ltima reuni¨®n, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el de la Generalitat, Artur Mas, se ver¨¢n hoy las caras en La Moncloa, en un intento de recomponer las relaciones entre ambas Administraciones tras largos meses de tensi¨®n por la crisis soberanista catalana. Mas es consciente de que Rajoy poco o nada puede ceder ante la consulta de autodeterminaci¨®n que la Generalitat impulsa para el 9 de noviembre. Por esta raz¨®n ha decidido ampliar el foco de la reuni¨®n introduciendo aspectos relacionados con la financiaci¨®n y la econom¨ªa, con el fin de transmitir la imagen de que, pese a todo, alg¨²n tipo de di¨¢logo es posible entre Gobierno y Generalitat.
Rajoy acude al encuentro con la idea de vetar la consulta, pero con una presi¨®n creciente en amplios sectores sociales, tambi¨¦n en su partido, para iniciar una reforma constitucional que garantice un mejor y duradero encaje de Catalu?a dentro de Espa?a. Seg¨²n un sondeo de Metroscopia para EL PA?S, un 62% de los espa?oles apoyar¨ªan que Rajoy negociase con la Generalitat la suspensi¨®n de la consulta y, al mismo tiempo, una reforma inmediata y a fondo de la Constituci¨®n. Esta idea seduce tambi¨¦n a los votantes del PP, favorables en un 64% a la reforma constitucional, lo que contrasta con el mensaje del Gobierno y de la direcci¨®n del partido de que ni es el momento ni hay una mayor¨ªa social suficiente para abordar esta empresa.
El 62% desea que los cambios en la Ley Fundamental frenen la consulta
El sondeo se llev¨® a cabo los d¨ªas 22 y 23 de julio con una muestra de 600 personas, una cifra que permite sacar conclusiones de la voluntad de los votantes de los principales partidos de ¨¢mbito nacional. De esta forma, los votantes de UPyD son los m¨¢s favorables a negociar una reforma constitucional (71%), pero las diferencias con el resto de los partidos nacionales no superan los siete puntos. Los votantes de otros partidos, entre ellos los nacionalistas e independentistas, tambi¨¦n apoyan mayoritariamente la reforma constitucional, aunque con porcentajes sensiblemente inferiores (52%).
Pase lo que pase hoy en la reuni¨®n entre los dos gobernantes, la posici¨®n de Mariano Rajoy no es la misma ni mucho menos que hace dos a?os. Ni siquiera uno. Ha habido avances en la comprensi¨®n del problema, aunque con seguridad no se van a traducir en una respuesta que pudiera satisfacer las demandas nacionalistas. Aun as¨ª, Rajoy est¨¢ persuadido de que el problema es muy serio, afecta a la sociedad catalana y al resto de Espa?a y la divide. Ahora bien, desde el Gobierno central no se va ayudar al Gobierno de la Generalitat a que se celebre un refer¨¦ndum el pr¨®ximo d¨ªa 9 de noviembre.
La invocaci¨®n de la ley con may¨²scula la escuchar¨¢ Artur Mas de Rajoy porque su pretensi¨®n invade de lleno el n¨²cleo central del concepto de Estado que hace la Constituci¨®n, cual es d¨®nde reside la soberan¨ªa popular. ¡°Esta no es troceable¡±, remarcan en el Gobierno para rechazar de plano que los catalanes decidan sobre algo que concierne a todos los espa?oles. Una puerta se abre en este t¨²nel de incomunicaci¨®n ante la decisi¨®n de Mas de presentar a Rajoy una agenda con m¨¢s asuntos y no solo la consulta para que los catalanes se pronuncien sobre si quieren ser independientes.
En el Gobierno se reabre la tesis de hace meses de que una negociaci¨®n sobre la mejor financiaci¨®n para Catalu?a podr¨ªa rebajar la tensi¨®n y abrir el di¨¢logo. Ya se hab¨ªa perdido la esperanza, porque muchas voces de Catalu?a se expresaron en el Congreso de los Diputados a trav¨¦s de los portavoces de CiU, Josep Antoni Duran; de ERC, Alfred Bosch, y de ICV, Joan Coscubiela, principalmente, negando que se tratara de dinero. ¡°Ya no, ya entran los sentimientos¡±, explicaban portavoces nacionalistas. Ahora, sin embargo, se podr¨ªa hablar de financiaci¨®n y de competencias.
El consejero de Presidencia catal¨¢n, Francesc Homs, recalc¨® ayer que Mas llevar¨¢ propuestas a La Moncloa y con voluntad de ¡°hablar de todo¡±. Y reclam¨® lo mismo al presidente del Gobierno: ¡°Tenemos ganas de escuchar, iremos a escuchar¡±, dijo, al tiempo que negaba que el presidente catal¨¢n llegue debilitado por el esc¨¢ndalo de Jordi Pujol.
La consulta del 9 de noviembre, si bien ser¨¢ un elemento central, no ser¨¢ el ¨²nico. Homs enumer¨® los objetivos del encuentro, y la consulta aparece en una llamativa cuarta posici¨®n. ¡°El presidente Mas tiene disposici¨®n a hablar de todo; de la situaci¨®n de la econom¨ªa y su evoluci¨®n, de la situaci¨®n de las estructuras del Estado del bienestar, de la situaci¨®n de las finazas p¨²blicas, de la consulta, obviamente, y del cumplimiento de las leyes, de todas¡±, dijo en referencia al reparto del d¨¦ficit entre las diferentes Administraciones. Homs tambi¨¦n dijo coincidir con Rajoy y con el l¨ªder del PSOE, Pedro S¨¢nchez, en que la Generalitat no quiere ¡°una consulta ilegal¡±.
El 64% de los votantes del PP tambi¨¦n apoya esta soluci¨®n
La agenda econ¨®mica de la reuni¨®n no es una cuesti¨®n balad¨ª. La Generalitat, como otras autonom¨ªas, necesita una inmediata inyecci¨®n econ¨®mica a trav¨¦s de un nuevo sistema de financiaci¨®n. Y es que las finanzas catalanas siguen en n¨²meros rojos. Catalu?a ha registrado un d¨¦ficit de 1.583 millones de euros hasta mayo, el 0,81% del PIB, y es una de las comunidades que ha presentado saldos m¨¢s negativos, precedida por Extremadura (-1,5%), Navarra (-1,24%) y Andaluc¨ªa (-0,81%).
El encuentro de hoy puede condicionar de forma importante la reuni¨®n del Consejo de Pol¨ªtica Fiscal y Financiera de ma?ana. Catalu?a acudir¨¢ al a ese encuentro con la intenci¨®n de que el ministro de Hacienda, Crist¨®bal Montoro, aclare sus palabras de la semana pasada en Barcelona, cuando habl¨® ambiguamente de mejorar las condiciones para las que las comunidades reciban dinero del Fondo de Liquidez Auton¨®mica. El consejero catal¨¢n de Econom¨ªa, Andreu Mas-Colell, pidi¨® este lunes que el ministerio no tenga en cuenta los intereses de la deuda a la hora de contabilizarlo. Sin no hay un gesto firme, vino a decir, el anuncio ¡°ser¨¢ humo¡±. ¡°Me interesar¨ªa saber qu¨¦ quiso decir. Si va en la l¨ªnea de que el pago de intereses se pudiera posponer, ser¨ªa una buena direcci¨®n¡±, dijo, tras solicitar por en¨¦sima vez una ¡°flexibilizaci¨®n¡± del reparto de impuestos o de los objetivos de d¨¦ficit.
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