28.000 inmigrantes eluden las vallas pese a los 140 millones invertidos

La sentencia de Gema Conde, diputada del PP, reson¨® este septiembre en la Comisi¨®n de Interior: "Alej¨¦monos del buenismo malentendido y de mundos sin fronteras". La parlamentaria respond¨ªa as¨ª a las cr¨ªticas de la oposici¨®n por la reintroducci¨®n de concertinas en las vallas de Ceuta y Melilla en 2013. Pero, con esas palabras, tambi¨¦n volv¨ªa a fijar la postura defendida por los sucesivos Gobiernos sobre la lucha contra la inmigraci¨®n irregular en ambas ciudades. Dos enclaves donde se erigen sendas verjas fronterizas que acumulan ya una inversi¨®n de, al menos, 140 millones de euros, seg¨²n los datos recopilados por EL PA?S, procedentes de las cifras facilitadas por el Ministerio de Interior en los ¨²ltimos 15 a?os.

Estas estructuras met¨¢licas, de seis metros de altura actualmente, bordean las dos localidades espa?olas desde que se empezaran a levantar a mediados de los 90, cuando se multiplic¨® la llegada de sin papeles procedentes del ?frica subsahariana. El Ejecutivo de Felipe Gonz¨¢lez (PSOE) la proyect¨® en Ceuta y el de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar (PP) en Melilla. Con ellas, decidieron poner un muro a la inmigraci¨®n. Y el Estado, al terminar esa d¨¦cada, ya hab¨ªa desembolsado m¨¢s de 9.800 millones de pesetas (58,9 millones de euros), seg¨²n las cifras proporcionadas entonces por las delegaciones del Gobierno y manejadas por varias ONG.

Todo para erigir las primeras verjas de dos metros ¡ªelevadas inmediatamente a tres al considerarse "insuficientes" para soportar la presi¨®n migratoria¡ª, instalar c¨¢maras t¨¦rmicas, torres de vigilancia y sensores. Instrumentos que, desde entonces, coleccionan las cr¨ªticas de los colectivos sociales. All¨ª han denunciado las devoluciones en caliente y las agresiones a sin papeles. Estos grupos, adem¨¢s, han calificado reiteradamente de "ineficaces" las vallas. "Si el objetivo es la lucha contra la inmigraci¨®n irregular, la inversi¨®n se equivoca de sitio. Ser¨ªa mejor destinarla a los puntos principales de entrada, como los aeropuertos", subraya Carlos Arce, portavoz de la Asociaci¨®n Pro Derechos Humanos de Andaluc¨ªa (Apdha).

Porque, como insisten las ONG, las verjas no logran frenar los flujos migratorios. Si no pueden entrar saltando las vallas, lo har¨¢n en patera. O en dobles fondos de veh¨ªculos. O en los bajos de un cami¨®n. O escondidos en las h¨¦lices de los ferrys. "Las alambradas solo consiguen que se desv¨ªen. Provoca que se creen rutas cada vez m¨¢s peligrosas", apunta Estrella Gal¨¢n, secretaria general de la Comisi¨®n Espa?ola de Ayuda al Refugiado (CEAR). De hecho, apoya sus argumentos en los propios datos de Interior: cerca de 28.000 inmigrantes han llegado a Ceuta y Melilla entre 2004 y 2013, utilzando todas las v¨ªas posibles (dobles fondo, superando la alambrada o pateras, por ejemplo).

Las alambradas solo provoca que se creen rutas cada vez m¨¢s peligrosas Estrella Gal¨¢n, portavoz de CEAR

"A?o tras a?o se van sofisticando los sistemas instalados en las verjas, pero no se producen descensos significativos. Solo fluctuaciones. Pero, mientras tanto, las lesiones que causan son cada vez m¨¢s graves", recalca Arce. Los datos evidencian esas oscilaciones, marcadas siempre por una constante entrada de sin papeles. El pasado ejercicio accedieron a ambas ciudades 4.261 de forma irregular. En 2005, cuando se produjo la primera crisis de las verjas, arribaron a las dos localidades 5.569 papeles. Ese a?o, por primera vez, se sucedieron los primeros saltos masivos a las vallas. Y, en apenas tres meses, ocho subsaharianos ¡ªtres en Melilla y el resto en Ceuta¡ª perdieron la vida en la frontera. Los ¨²ltimos cinco, tiroteados.

Fue precisamente cuando el Gobierno de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero (PSOE) apost¨® por invertir 39 millones de euros para blindar a¨²n m¨¢s Ceuta y Melilla, como consta en una reciente respuesta parlamentaria de la Secretar¨ªa de Estado de Seguridad. Los socialistas redoblaron la altura (hasta los seis metros) de las vallas y colocaron las pol¨¦micas concertinas, retiradas en 2007 ante la presi¨®n de los colectivos sociales y reintroducidas por Mariano Rajoy (PP) en 2013.

Los saltos desbordaron hace una d¨¦cada al Ejecutivo espa?ol y pusieron en alerta a la Uni¨®n Europea. "La gran escala y los intentos coordinados para entrar en Ceuta y Melilla son un fen¨®meno nuevo, indicaci¨®n clara de la creciente presi¨®n migratoria en Marruecos y Europa", advert¨ªa ya una delegaci¨®n especial de la Comisi¨®n Europea enviada a las dos ciudades. Desde entonces, respaldados por Bruselas, el gasto de Espa?a en las vallas no ha cesado: 35 millones entre 2006 y 2014. Seg¨²n ha explicado el ministro de Interior, Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz, el Ejecutivo ha previsto para este a?o un gasto extraordinario de m¨¢s de dos millones para reforzar las verjas.

El dinero desembolsado en la frontera se ha traducido en m¨¢s alambradas, m¨¢s sistemas especiales antisalto, m¨¢s cuchillas y, por ¨²ltimo, en mallas antitrepa. Este ¨²ltimo dispositivo se ha introducido este mismo a?o, tras una nueva crisis de las vallas. Empez¨® con la muerte de 15 sin papeles en la playa ceut¨ª de Tarajal el pasado febrero, cuando un grupo de 400 subsaharianos intent¨® entrar en Espa?a. Y continu¨® con reiterados saltos en Melilla, a donde se traslad¨® la presi¨®n migratoria.

Aunque los, al menos, 140 millones de euros gastados solo ha servido, seg¨²n Estrella Gal¨¢n, para "fracasar" y "causar dolor y drama". Los saltos en Melilla no han cesado. En lo que va de a?o, cerca de 1.900 sin papeles han entrado en la ciudad tras superar la alambrada. Mil m¨¢s que el pasado 2013, cuando utilizaron esta v¨ªa 830. Y cuatro veces m¨¢s que en 2012, cuando lo hicieron 390; seg¨²n las cifras de Interior.

"Todo ser¨¢ ineficaz mientras no se solventen las causas de origen que provocan la expulsi¨®n de seres humanos de su pa¨ªs", remacha la representante de CEAR, que apuesta por m¨¢s partidas para pol¨ªticas de cooperaci¨®n. En esa idea ahonda Amnist¨ªa Internacional, que denuncia la desproporci¨®n que existe entre el gasto que Espa?a destina al control de sus fronteras y el reservado para ayuda a los refugiados: 289 millones frente a 9 millones, en el periodo comprendido entre 2007 y 2013.

El Gobierno, por su parte, sigue invirtiendo en las vallas de Melilla y Ceuta. Con el objetivo, seg¨²n las palabras utilizadas por Fern¨¢ndez D¨ªaz, de lograr una "impermeabilizaci¨®n de la frontera". Y en el Congreso, a su vez, el PP defiende todas las medidas adoptadas por el Ejecutivo, aunque sean cuchillas y provoquen graves heridas a las personas que buscan en Europa una vida mejor. Lo dijo la diputada popular Gema Conde: "Si la soluci¨®n al problema de la inmigraci¨®n ilegal fuera tan simple como eliminar los elementos disuasorios que garantizan las fronteras. Abramos todas las fronteras y, como dicen en mi tierra, ancha es Castilla".