El Gordo de Navidad s¨ª toc¨® en el bar de Antonio

Juli¨¢n Valc¨¢rcel entra al bar Las Murallas como si fuese el due?o. Ha pasado m¨¢s de un mes desde que grab¨® all¨ª el anuncio de la Loter¨ªa de Navidad, pero f¨¢cilmente vuelve a entrar en su papel de Antonio, el regente del local. Es viernes por la noche, el lugar est¨¢ casi lleno y ¨¦l se esfuerza por reorganizar las mesas para acomodar a los actores protagonistas de la campa?a que regresan para celebrar el ¨¦xito de su trabajo. Y, por supuesto, para comprar un d¨¦cimo de Loter¨ªa.

El ¨²nico problema es que ya no hay. En dos d¨ªas, los verdaderos gerentes, Hern¨¢n Pareja y su esposa Margarita, han vendido los 700 d¨¦cimos que ten¨ªan del 37254, su n¨²mero asignado este a?o. Eso sin contar los que pidieron a unos locales en Valencia y Barcelona cuando se les agotaron los suyos. Ni los que ahora venden del 48388, que es el asignado a la Asociaci¨®n de Vecinos La Incolora, de Villaverde, el barrio donde est¨¢ el bar.

Lo bueno es que Valcarcel ha conseguido hacerse con 10 d¨¦cimos despu¨¦s de mover algunos hilos. ¡°Pero somos m¨¢s actores, as¨ª que cada uno lo repartimos entre varios, porque todos queremos este n¨²mero¡±, cuenta, refiri¨¦ndose al 37254. Prefieren no arriesgarse a que toque y que ellos no lo hayan comprado, como le pasa a Manuel, el personaje de Alfonso Delgado en la publicidad. ?l dice que se le hace curioso regresar al lugar donde pas¨® cinco d¨ªas grabando escenas ¡°tan emocionantes¡±. Despu¨¦s de 30 a?os trabajando como actor, Delgado admite que nunca antes hab¨ªa recibido tanta atenci¨®n: ¡°me ha desbordado totalmente. Estoy muy orgulloso de lo que ha salido, aunque no creo que esto vaya a cambiar mi carrera¡±.

Si ha cambiado, sin embargo, el ambiente del bar. No s¨®lo por la cantidad de gente que se abarrota frente a la barra pr¨¢cticamente a todas horas desde el mi¨¦rcoles, sino porque ahora, la esquina entre el Paseo Talleres y la calle de Acebes parece brillar en medio del silencio del suburbio. Quien reconoce la fachada desde fuera, la se?ala con emoci¨®n. Todo el que entra, mira a su alrededor como si sintiera esa esperanza que transmiten los v¨ªdeos de la campa?a dirigida por Santiago Zannou. Y Pareja no puede evitar sonre¨ªr cada vez que alg¨²n cliente le pregunta cu¨¢nto cuesta el caf¨¦, aunque no se atreve a responder m¨¢s que su t¨ªpico ¡°1,30¡±.

Los Pareja han manejado el bar durante 10 a?os y dicen que nunca hab¨ªan atendido a tanta gente en tan poco tiempo. Al ver llegar a los protagonistas, sacan r¨¢pidamente el champ¨¢n. Llenan las cuatro mesas que ocupan de copas y comida. Los atienden mientras se abrazan, conversan y disfrutan de las miradas de los clientes, muchos de ellos ansiosos porque -justo esta noche- ninguno ha podido comprar ni siquiera un billete de la ONCE. ¡°Antes casi ni se vend¨ªa, y ahora en minutos se nos ha acabado¡±, cuenta la due?a, una colombiana que emigr¨® a Espa?a hace 16 a?os.

¡°Estamos todos de subid¨®n¡±, exclama con emoci¨®n Charo S¨¢nchez S¨¢nchez, la actriz principal de uno de los siete v¨ªdeos un poco m¨¢s cortos que s¨®lo se han publicado en la web. Ella audicion¨® para el papel porque le gust¨® que se enalteciera la importancia de compartir con los vecinos. ¡°Creo que ahora m¨¢s que nunca necesitamos estas peque?as historias que te hacen ver que es verdad, que s¨ª existe gente as¨ª y que no todos estamos tan deshumanizados¡±. Dice que no tiene razones para quejarse, solo para celebrar. Entonces todos alzan sus copan y bridan. Si fuese 22 de diciembre, cualquiera pensar¨ªa que de verdad les ha tocado el Gordo.