Transparencia, ?parcial o completa?
Jos¨¦ Antonio Monago declar¨® ayer en Madrid: "Qui¨¦n me ataca a mi, ataca a Extremadura". Esto nos suena, ?no? Qui¨¦n atacaba a Jordi Pujol y su familia atacaba a Catalu?a. Los asesores del presidente extreme?o seguramente conocen esa circunstancia y a pesar de ello han decidido identificar a Monago con Extremadura.
A partir de esta identificaci¨®n el caso Monago ha dado un salto cualitativo.
Se trata de llegar al fondo. Y el fondo no es otro que toda la verdad.
El presidente extreme?o ha esgrimido como carta de triunfo un documento del Senado.
El secretario general del Senado, Manuel Cavero G¨®mez, "certifica: que conforme que conforme a los datos que obran en la Secretar¨ªa General del Senado, en el periodo comprendido entre el d¨ªa 3 de mayo de 2009 y el d¨ªa 9 de noviembre de 2010 se abonaron, con cargo al Presupuesto del Senado, un total de diecis¨¦is desplazamientos en avi¨®n, con origen en la Pen¨ªnsula y destino en las Islas Canarias, del Excmo. Sr. D. Jos¨¦ Antonio Monago Terraza, Senador designado por la Comunidad Aut¨®noma de Extremadura para la IX Legislatura.
Y para que conste a solicitud del interesado, expido la presente certificaci¨®n en el Palacio de Senado a doce de noviembre de dos mil catorce".
En esta descripci¨®n, como es evidente, no se mencionan las fechas de los "desplazamientos".
Se supone, asimismo, que aparte de esos desplazamientos "con origen en la Pen¨ªnsula y destino en las Islas Canarias" el Senado habr¨¢ pagado tambi¨¦n los desplazamientos con origen en las Islas Canarias y destino en la Pen¨ªnsula, parafraseando la certificaci¨®n. En otros t¨¦rminos: 16 desplazamientos a Canarias y 16 desplazamientos de all¨ª a la Pen¨ªnsula.
?Por qu¨¦ raz¨®n no se da cuenta en el documento de las fechas en que tuvieron lugar los llamados desplazamientos?
Porque Monago no lo pidi¨®.
El director de comunicaci¨®n del presidente de Extremadura, Juan Rodr¨ªguez, me explic¨® este lunes, d¨ªa 17 de noviembre, que como la noticia sobre el asunto hablaba de 32 viajes se hab¨ªa pedido al Senado informaci¨®n sobre los viajes realizados.
A la pregunta sobre si se hab¨ªa solicitado al Senado la fecha de cada uno de los viajes, la respuesta es que no. Rodr¨ªguez a?adi¨® que el equipo de Monago ha podido, por su cuenta, reconstruir viaje por viaje, de acuerdo con las actividades del PP.
Explic¨® que si el hecho de que fueran actividades del partido lleva a que "se decida que no vale" pues entonces se plantear¨ªa "sufragarlos". Y a?adi¨® que "hay viajes del Senado y Congreso que los parlamentarios utilizan para su actividad partidista".
Monago ha presentado la certificaci¨®n como la prueba de que el Senado confirmaba que sus viajes eran viajes de "trabajo".
Como se puede apreciar en el lenguaje utilizado por el Senado no se habla de "viajes de trabajo" sino, simplemente, de "desplazamientos".
Este af¨¢n de hacerle decir al secretario general del Senado algo que no dice indica que Monago no qued¨® del todo satisfecho con la palabra "desplazamientos".
?Por qu¨¦ son relevantes la fechas de cada uno de los viajes?
Porque es la manera de conocer qu¨¦ actividades relacionadas con su cargo de senador pudo cumplir Monago en Canarias.
Con todo, la explicaci¨®n de Rodr¨ªguez ya indica que la reconstrucci¨®n que ha hecho el equipo de Monago va por las actividades del PP.
Y no por el Senado.
Pero las fechas permitir¨ªan, adem¨¢s, conocer el alcance de una informaci¨®n que introdujo por su propia cuenta Monago en sus explicaciones: los pagos de viajes hechos con una tarjeta Visa personal.
Conocer todos estos detalles no es incompatible con la defensa de Monago en los tribunales y en el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura.
Monago mismo lo reconoce de hecho cuando decide lanzar su caso al tribunal de la opini¨®n p¨²blica.
No otra cosa son sus m¨²ltiples comparecencias desde el viernes pasado, tras obtener la certificaci¨®n del Senado.
Con todo, ha aprovechado las comparecencias para lanzar su candidatura a las elecciones de mayo de 2015, aunque nadie del Gobierno del PP le ha acompa?ado en Madrid este lunes 17, como suele ser costumbre cuando visita la capital para hablar en p¨²blico un presidente de Comunidad Aut¨®noma
La avasallante conducta de Monago en este caso, despu¨¦s de sus titubeos y contradicciones iniciales, recuerda a la de Esperanza Aguirre - que s¨ª acudi¨® a escucharle al hotel Palace de Madrid -, al estallar la Operaci¨®n P¨²nica, cuando la Guardia Civil detuvo al que fuera su brazo derecho en la Comunidad de Madrid, Francisco Granados.
El paralelismo consiste en esto: Aguirre aprovecha la citada operaci¨®n para lanzar una campa?a contra la corrupci¨®n y parece erigirse en la zarina anticorrupci¨®n del PP, hearings ensayados mediante; Monago cabalga sobre el incidente de los viajes a Canarias con cargo al Senado (para desarrollar presuntas actividades que siguen sin estar acreditadas) y propulsa su candidatura.
A la luz de lo que ha dicho, el lema de su campa?a podr¨ªa ser Monago es Extremadura.
El striptease o revelaci¨®n o transparencia debe ser completa.
?Por qu¨¦?
Porque todos somos mayores y sabemos lo que es una verdad parcial...
Llegados a este punto, cabe preguntarse: ?sigue siendo el asunto de los viajes del entonces senador Jos¨¦ Antonio Monago un asunto privado como para que el Senado desvele solo por petici¨®n del interesado las fechas en que tuvieron lugar?
O, planteado por el presidente como un asunto de Estado, es decir, de Comunidad Aut¨®noma, a saber, que el que ataca a Monago en la cuesti¨®n de los viajes est¨¢ atacando a Extremadura, ?no deber¨ªa el Senado proceder a efectuar un full disclosure, una revelaci¨®n completa, aportando la fecha de cada uno de los viajes en cuesti¨®n?
?No ser¨ªa la mejor manera de evitar que su certificaci¨®n sea usada como patente de corso?
El criterio, en el punto en que nos encontramos, ?no deber¨ªa ser acabar con toda sombra de duda?
La respuesta: s¨ª.
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