¡°El Rayo es la voz de la conciencia¡±

Vallecas es un homenaje a la austeridad y la Avenida de la Albufera un mundo lleno de vidas sencillamente heroicas. Las tertulias en las tascas y las conversaciones en el s¨²per est¨¢n estos d¨ªas casi monopolizadas por el desahucio de ¡°Do?a Carmen¡±, la vecina de 85 a?os a la que el viernes un tropel de antidisturbios sac¨® de su casa de toda la vida, y por el orgullo hacia el Rayo, el equipo del barrio que sali¨® al rescate de la anciana en un ejemplo de compromiso social.

¡°No queremos que un gesto solidario se convierta ahora en un circo medi¨¢tico¡±, explicaba un miembro de la plantilla antes del entrenamiento matinal de ayer en la Ciudad Deportiva del Ensanche de Vallecas. Los jugadores y el cuerpo t¨¦cnico encabezado por Paco J¨¦mez decidieron antes de la sesi¨®n cortar sus declaraciones sobre el tema y emplazar a los periodistas a una rueda de prensa este mi¨¦rcoles en la que detallar¨¢n c¨®mo se concreta su compromiso con Carmen Mart¨ªnez Ayuso. Desde que se conoci¨® que asumir¨ªan el alquiler de un piso para su convecina, el m¨®vil del jefe de prensa echa humo con peticiones variopintas de peri¨®dicos deportivos y de informaci¨®n general, de programas informativos y del coraz¨®n. ¡°No buscamos hacernos la foto, s¨®lo ayudar¡±, dicen para frenar el ¡°acoso¡± que abruma a un grupo acostumbrado a apoyar las causas justas con menos repercusi¨®n.

S¨®lo en este mes se ha visto a los jugadores y al t¨¦cnico rayista secundando iniciativas contra el c¨¢ncer de mama, apoyando a la Asociaci¨®n Aphisa para mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidad intelectual, a la Asociaci¨®n Madrile?a de Espina B¨ªfida e Hidrocefalia o haciendo campa?a por la donaci¨®n de ¨®rganos. A principios de mes, el presidente, Mart¨ªn Presa, fue tambi¨¦n el primero en ofrecer los campos de entrenamiento del club al hist¨®rico Deportivo Aviaci¨®n despu¨¦s de que el Ayuntamiento ejecutara la demolici¨®n de sus instalaciones dejando a 400 ni?os sin cancha para jugar.

Fue la ¨²nica plantilla de Primera que secund¨® la huelga general en noviembre de 2012

El Rayo naci¨® en 1924 como un modesto proyecto de agrupaci¨®n de barrio cuando Vallecas apenas era un n¨²cleo rural del extrarradio de Madrid que entonces pertenec¨ªa al t¨¦rmino municipal de Alcal¨¢ de Henares. Sus or¨ªgenes marcaron de forma indeleble su idiosincrasia reivindicativa. El primer campeonato en el que particip¨® fue la Liga Obrera entre 1931 y 1936 y desde entonces y hasta la fecha su vertiente social est¨¢ impregnada en los estatutos del club. ¡°El Rayo no es un equipo de f¨²tbol, es una religi¨®n deportiva aqu¨ª. Es orgullo de clase y la voz de la conciencia¡±, afirma Pedro Roiz, socio desde 1956 e hijo de Pedro Roiz Coss¨ªo, presidente entre 1965 y 1972. ¡°Vallecas es tierra de colonos, gente humilde y comprometida, emigrantes acostumbrados a ganarse el jornal a contracorriente. Luchadores. A otros les ayudan los pol¨ªticos. De nosotros s¨®lo se acordaron hace unos a?os con la Ciudad Deportiva y a finales de los 80 cuando Juan Barranco nos pag¨® una deuda¡±, cuenta Roiz haciendo referencia a las instalaciones inauguradas en 2010 con 15 millones de euros de inversi¨®n del gobierno regional de Esperanza Aguirre y a la ayuda del exalcalde socialista, que concedi¨® ¡°una subvenci¨®n de seis millones de pesetas para que el club pudiese pagar las facturas y las n¨®minas¡±, relata Rosa de la Vega en el libro Vallecas y el Rayo Vallecano, la historia oficial del club.

El primer equipo de barrio en llegar a Primera, en 1976, consigui¨® que durante unos a?os Santiago Bernab¨¦u ejerciera de mecenas y se hiciera cargo de su deficiente econom¨ªa; se convirti¨® despu¨¦s en el Matagigantes liderado por Felines y Potele; disput¨® una UEFA; baj¨® hasta Segunda B; y subi¨® seis veces a Primera. Sus jugadores se amotinaron contra los Ruiz Mateos, propietarios del club entre 1991 y 2011, para defender sus n¨®minas y fueron, en noviembre de 2012, la ¨²nica plantilla que secund¨® la huelga general. Actualmente, son uno de los presupuestos m¨¢s bajos de Primera con 20 millones de euros, pero con 10.300 socios y su nuevo patrocinador chino (Qbao.com) sobreviven tras sortear el concurso de acreedores al que se acogieron en 2011. Carmen no pudo salvar su casa de la amenaza de un prestamista pero el Rayo, que entiende de adversidades, sali¨® a su encuentro.