¡°Si para lograr sus metas Podemos tiene que cambiar el discurso, lo har¨¢¡±
El decano de Pol¨ªticas de la Complutense analiza los referentes y el discurso del grupo
Heriberto Cairo (Lugo, 1958) conoce bien a los l¨ªderes de Podemos, la formaci¨®n que ha hecho saltar por los aires el tablero pol¨ªtico espa?ol. Es el decano de la Facultad de Pol¨ªticas y Sociolog¨ªa de la Complutense, cuna acad¨¦mica y laboratorio pol¨ªtico de Podemos, criticada a menudo por las protestas que protagonizan sus estudiantes y cuyo esp¨ªritu reivindicativo Cairo defiende. Pablo Iglesias e ??igo Errej¨®n, los dos principales l¨ªderes de Podemos, mantuvieron durante a?os una relaci¨®n discipular con este polit¨®logo especializado en Am¨¦rica Latina. ?l dirigi¨® sus tesis doctorales, aunque ahora est¨¢n distanciados.
Pregunta. De los l¨ªderes de Podemos se dice que son hijos de su Facultad. ?Hasta qu¨¦ punto?
Respuesta. El peso de la Complutense es muy grande y sobre todo de la Facultad de Pol¨ªticas. Basta con ver el cuadro directivo y el consejo pol¨ªtico del partido.
P. Usted les conoce bien. ?Qu¨¦ destaca de ellos?
R. Yo solo dirig¨ª la tesis de Pablo Iglesias y de ??igo Errej¨®n. Con Carolina Bescansa siempre he tenido buena relaci¨®n. Si hubiera que subrayar algo de Podemos es el magn¨ªfico ejercicio con las tecnolog¨ªas de la informaci¨®n y de la comunicaci¨®n aplicadas a la pol¨ªtica. Es absolutamente novedoso y marcar¨¢ la forma de hacer pol¨ªtica. Consiste en trabajar la idea del ¨¢gora electr¨®nica, que es complicada y tiene sus riesgos.
P. Se habla mucho de cu¨¢nto pesan en el pensamiento de Podemos Ernesto Laclau, el te¨®rico pol¨ªtico argentino, o el fil¨®sofo marxista italiano Antonio Gramsci. ?Qu¨¦ reconoce de ellos?
R. Cada uno [de los miembros] tiene una formaci¨®n diferente. La tesis de Errej¨®n se centr¨® en la construcci¨®n de la hegemon¨ªa en Bolivia. Ah¨ª no solo trabaj¨® a Laclau, tambi¨¦n a Gramsci. Una de las discusiones que ten¨ªamos era lo que yo consideraba una interpretaci¨®n mecanicista de Garc¨ªa Linera [?lvaro, vicepresidente de Bolivia] de la cuesti¨®n de la hegemon¨ªa. Su idea b¨¢sicamente es ir atrapando y consiguiendo candidatos y movimientos en lugar de establecer alianzas. Esto lo discut¨ªamos. ??igo compart¨ªa en buena medida este punto, lo que no s¨¦ es hasta d¨®nde lo est¨¢ llevando. Laclau es la idea de aglutinar en torno a una idea lo que llama significante vac¨ªo, llen¨¢ndolo de contenidos. Desde mi punto de vista, ser¨ªan las dos claves. Porque no veo el posobrerismo italiano que trabajaba Iglesias o la epistemolog¨ªa del sur de Boaventura de Sousa Santos [soci¨®logo portugu¨¦s e ide¨®logo de la antiglobalizaci¨®n] que Monedero maneja. Pero no hay que olvidar tampoco el trabajo oscuro de los polit¨®logos y los soci¨®logos, el de las encuestas. Eso es lo que aporta Carolina Bescansa y es fundamental para entender lo que est¨¢ pasando. Al margen de las teor¨ªas, sin su capacidad para hacer correctamente encuestas e interpretarlas no estar¨ªan donde est¨¢n.
La capacidad de Bescansa para interpretar encuestas es fundamental"
P. ?Es posible aplicar a Laclau o a Garc¨ªa Linera en Espa?a?
R. La teor¨ªa del populismo de Laclau puede implicar una pr¨¢ctica pol¨ªtica con consignas claras y an¨¢lisis no demasiado extensos para que puedan engarzarse unas luchas con otras. Y eso, de alg¨²n modo, es universal. En un pa¨ªs machacado por seis a?os de crisis, quiz¨¢s sea el objetivo de cambio compartido.
P. ?Se puede interpretar que los referentes de Errej¨®n est¨¢n m¨¢s presentes en el discurso que los de Iglesias o Monedero?
R. Yo creo que s¨ª.
P. En cuanto a pa¨ªses, ?cu¨¢les son sus fuentes de inspiraci¨®n?
R. Ellos han trabajado fundamentalmente en Venezuela, Ecuador y Bolivia. Especialmente ??igo. Pablo estuvo muy poco tiempo en Bolivia y algo en Venezuela. Y, luego, Monedero en Venezuela mucho tiempo. Han dicho muchas veces que no tendr¨ªa sentido que pensaran en ninguno de esos pa¨ªses como modelo porque la situaci¨®n estructural es muy diferente. Ahora veo que son los pa¨ªses n¨®rdicos los que empiezan a mencionar como modelos, lo cual me alegra y me parece m¨¢s razonable. Su objetivo parece ser ocupar el lugar que la socialdemocracia tradicional ha dejado libre y recuperar las medidas, salvo alguna cosa que ir¨¢n suavizando, t¨ªpicas del Estado de bienestar. No van mucho m¨¢s all¨¢ de las ideas que se pod¨ªa esperar de la socialdemocracia. Por eso el gran envite es para el Partido Socialista.
P. Los detractores temen que sufra la democracia liberal, los derechos de las minor¨ªas, por ejemplo.
R. Ser¨ªa exagerado decir que con esta crisis se ha destruido todo el Estado de bienestar, pero en t¨¦rminos relativos la gente ha vivido las p¨¦rdidas de forma muy dura. De alguna forma, est¨¢n optando por patear el tablero. En el sentido de decir: este consenso que se alcanza en el 78, que incluye la sanidad gratuita, la educaci¨®n casi gratuita, unos salarios m¨ªnimos con los que se pudiera vivir, una tasa de desempleo aceptable... de repente ha desaparecido, si no por completo, se han visto reducidas [estas expectativas].Patear el tablero es: ¡°Arriesgu¨¦monos¡±.
Ahora tienen como modelo a los pa¨ªses n¨®rdicos, me parece m¨¢s razonable"
P. ?Cu¨¢l ser¨ªa el otro modelo?
R. Una democracia consolidada como es esta, con partidos, elecciones, nadie la quiere cambiar, sino hacerla m¨¢s efectiva. Hay que felicitarles por reconducir a la vida pol¨ªtica institucional a buena parte de la gente que estaba en las plazas hace unos a?os.
P. En la Facultad se dice que Iglesias y sus colegas ya apuntaban maneras de estudiantes.
R. Ni en la mejor de sus fantas¨ªas hubiesen so?ado llegar a donde han llegado. Pablo s¨ª ten¨ªa una posici¨®n, muy minoritaria en la academia, que es la de hacer pol¨ªtica adem¨¢s de analizarla. Quiz¨¢s fuera m¨¢s abierto, su tesis implica su participaci¨®n militante.
P. ?A trav¨¦s de asociaciones como Contrapoder?
R. Contrapoder fue una apuesta de Pablo para incidir en la vida de la facultad. Durante mucho tiempo fue la asociaci¨®n mayoritaria, ahora es absolutamente minoritaria.
P. De las europeas para ac¨¢, han cambiado su discurso. ?Es por convicci¨®n o por necesidad?
R. Son pragm¨¢ticos. Si tienen que cambiar el discurso para alcanzar sus metas lo cambiar¨¢n. Lo cual es bueno. El peor problema para este pa¨ªs ser¨ªan movimientos que reivindicasen ortodoxias y que polarizaran m¨¢s todav¨ªa. [Podemos] aspira a obtener votos de la derecha y la izquierda, lo que llaman la transversalidad. Todo esto no quiere decir que yo comparta sus ideas.
P. ?Es real la moderaci¨®n de su discurso o cree que si ganan regresar¨¢n a la izquierda radical en la que se formaron?
R. La izquierda en la que se han formado, el Partido Comunista e Izquierda Unida, no es tan radical, es la izquierda que aunque ha tenido un papel menos importante desde la transici¨®n, ha afianzado la democracia en este pa¨ªs. Todos han estado en IU hasta hace poco. Si hace seis meses hubiesen incluido a Iglesias en las listas de las europeas como les pidieron, probablemente nada de esto hubiese ocurrido.
P. De su Facultad se dice que es at¨ªpica y conflictiva.
R. S¨ª es singular. Ha formado a l¨ªderes de la izquierda y del PP. Es una facultad plural, pero el estudiantado en su mayor¨ªa es cr¨ªtico, radical. Eso es bueno para no caer en la repetici¨®n de mantras.
P. Se recuerdan ahora las protestas, en 2010, contra Rosa D¨ªez a la que se le oblig¨® a escuchar a los estudiantes antes de hablar o el escrache a Moral Sant¨ªn, de IU.
R. Hubo otra contra el exministro Josep Piqu¨¦ para protestar por los vuelos de la CIA. Uno de los que estaba vestido [de preso de Guant¨¢namo] era Errej¨®n. La protesta contra Rosa D¨ªez la promovi¨® Contrapoder, porque era la asociaci¨®n mayoritaria. Hubo muchas cr¨ªticas, pero para m¨ª el objetivo era que diera la conferencia. Puede que me equivocara o fuera lo menos adecuado que diese la palabra a estas personas [los estudiantes] pero as¨ª garantizamos que se diera la conferencia. La vez anterior que Rosa D¨ªez estuvo en la facultad hubo ocho furgones policiales. Esta vez entr¨® sin ning¨²n polic¨ªa.
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