Rajoy culpa a Mas de desgobernar Catalu?a y de haber fracasado el 9-N

Mariano Rajoy, presidente del Gobierno, arranc¨® ayer su campa?a para contrarrestar el independentismo y carg¨® con una inusual crudeza contra Artur Mas al acusarle de generar inestabilidad, de practicar el ¡°desgobierno¡±, de haber fracasado en su empe?o de mostrar una mayor¨ªa independentista el 9-N y de no tener derecho a hablar en nombre de Catalu?a cuando ha ignorado a dos de cada tres ciudadanos (los que no votaron en la consulta). Con un tono en¨¦rgico, Rajoy desde?¨® el gui¨®n que dibuj¨® Mas para alcanzar la independencia en 18 meses y le culp¨® de haber optado por una huida hacia adelante en aras de su ¡°supervivencia¡± pol¨ªtica. ¡°Es un viaje a ninguna parte¡±, afirm¨® en una conclusi¨®n que ya hab¨ªa expuesto en el Congreso.

El viaje de Rajoy a Catalu?a hab¨ªa despertado ciertas expectativas porque en Australia, durante una reuni¨®n del G-20, afirm¨® que deb¨ªa explicar ¡°mejor¡± sus razones despu¨¦s de que 2,3 millones de personas participaran en el 9-N. Qued¨® ayer claro que se trataba solo de profundizar en ellas para plantar cara al secesionismo pero no para seducir a quienes apuestan por la independencia. Una vez m¨¢s, Rajoy constat¨® que no pondr¨¢ ¡°en tela de juicio¡± la unidad de Espa?a y el derecho de todos los espa?oles en decidir sobre su soberan¨ªa e ignor¨® la petici¨®n de Mas de proponga alternativas a la suya.

No la hubo. Ni siquiera hizo la menor alusi¨®n a las 23 reclamaciones que el presidente catal¨¢n le expuso en su ¨²ltima reuni¨®n de julio en La Moncloa a la que, seg¨²n revel¨® Mas en el Parlament, todav¨ªa no ha recibido respuesta. Por contra, Rajoy contest¨® con acritud al plan de reforma federal de la Constituci¨®n propugnada por el secretario general del PSOE, Pedro S¨¢nchez, al generarle desconfianza alguien que en dos a?os, se desdice, por ejemplo, del cambio del art¨ªculo 135 de la Carta Magna.

¡°?C¨®mo se puede pactar una reforma cuando dos a?os despu¨¦s dicen lo contrario?¡±, se pregunt¨® airado el presidente. Converg¨¨ncia i Uni¨® interpret¨® la contundencia de Rajoy como un nuevo portazo que viene a refrendar su plan irreversible de convocar elecciones plebiscitarias ¡ªRajoy las situ¨® en marzo¡ª si consuma su proyecto de formalizar una lista unitaria. La vicepresidenta de la Generalitat, Joana Ortega, reproch¨® a Rajoy que visite Catalu?a para pronunciar un mitin sin propuestas y solo ¡°descalificaciones¡± hacia un proceso que tach¨® de ¡°ejemplo de democracia y transparencia¡±. ¡°No ha venido a escuchar. Es una falta de respeto que no se permita a los ciudadanos expresarse y que se imponga un tipo de sociedad", lament¨®.

Ortega lamenta

Arropado por la secretaria general del PP, Maria Dolores de Cospedal, y cinco ministros (Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz, Luis de Guindos, Ana Pastor, F¨¢tima B¨¢?ez y Jos¨¦ Manuel Soria), Rajoy viaj¨® a Barcelona para amparar a los militantes de su partido, que se sintieron desencantados durante el 9-N despu¨¦s de estar un a?o asegurando que se cumplir¨ªa la legalidad. La convenci¨®n se concibi¨® para responder a Mas y como un acto de consumo interno para alentar a Alicia S¨¢nchez-Camacho, con las encuestas en contra y muy criticada por los soberanistas tras avanzar el contenido de la querella de la Fiscal¨ªa ¡°Siempre has estado a la altura¡±, le dijo Rajoy en su defensa. La senadora le propuso esta f¨®rmula: no dialogar m¨¢s con CiU, reforzar el Estado en Catalu?a y explicar y vender mejor la idea de Espa?a.

Con todos los puentes ya rotos tras la judicializaci¨®n del conflicto y sin mencionar esa querella, Rajoy aparc¨® el terreno de la legalidad para combatir a Mas en el pol¨ªtico. Ante un a?o con una cargada agenda electoral, Rajoy se erigi¨® en el presidente de los 4,5 millones de catalanes que no se acercaron a las urnas y recrimin¨® a Mas haber abrazado el soberanismo anticipando las elecciones en 2012 con el fin de no encarar la herencia ¡°ruinosa¡± del tripartito y precisamente cuando el Gobierno central intentaba evitar el rescate. En su an¨¢lisis omiti¨® que para entonces ya se hab¨ªa celebrado la manifestaci¨®n en 2010 contra la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatuto y se hab¨ªa producido la primera explosi¨®n soberanista de la Diada.

¡°Nunca voy a poner en tela de juicio la unidad de Espa?a¡±, avisa en Barcelona

Rajoy mostr¨® en su informe de 15 folios su estupor por que Mas persista en su empe?o ya que en esas elecciones perdi¨® 12 esca?os (pas¨® de 62 a 50) y el 9-N llovi¨® sobre mojado porque se evidenci¨® que yerra en el diagn¨®stico. ¡°Si lo que pretend¨ªa era presentar una Catalu?a independentista, fracas¨® en toda regla ateni¨¦ndonos a sus propias cifras¡±, afirm¨® el presidente en alusi¨®n a que s¨®lo particip¨® un 30% de censo. ¡°Si la mayor¨ªa de catalanes no le sigue ?C¨®mo se atreven a hablar en nombre de Catalu?a al pregonar la independencia?¡±, se pregunt¨® en medio de una ovaci¨®n de los 700 militantes que asistieron a su conferencia. El 9-N fue, a su juicio, una ¡°farsa bajo una escandalosa parcialidad de la Generalitat¡± que s¨®lo sirvi¨® para dividir a la sociedad catalana, para saltarse la ley y para ¡°ara?ar¡± unos votos a Esquerra. Pero no solo eso: con iron¨ªa, Rajoy desliz¨® que no alcanza el grado de ¡°inteligencia y sofisticaci¨®n¡± de CiU pero revel¨® que sab¨ªa que la Generalitat hab¨ªa orquestado una ¡°gran operaci¨®n de propaganda internacional¡± el 9-N.¡°Ese fue su gran fracaso. Se vino abajo, sin ruido y sin estr¨¦pito. Los delirios se calman con tranquilidad y menos alborotos¡±, dijo en defensa de su inacci¨®n en aquella jornada y al supuesto deseo de CiU de que la polic¨ªa hubiera retirado las urnas.

¡°Son 18 meses de viaje a ninguna parte¡±, afirma sobre el plan de Mas

La hoja de ruta que perfil¨® Mas el martes en el F¨°rum de Barcelona para los pr¨®ximos meses fue descalificada por Rajoy que recit¨® las numerosas ocasiones en que los catalanes han sido y en teor¨ªa ser¨¢n llamados a las urnas: las de 2012; el ¡°simulacro¡± de 2014; las de ¡°marzo¡± de 2015; m¨¢s las votaciones de una constituci¨®n y otros refer¨¦ndums ¡°ilegales¡±. ¡°Son 18 meses que no van a ninguna parte, a los que hay que sumar los casi 50 meses que le han precedido desde que Mas lleg¨® al poder. Nunca un gobernante hab¨ªa perdido tanto el tiempo ni se lo hab¨ªa hecho perder a los ciudadanos; no hab¨ªa generado tanta confusi¨®n ni provocado tanta inestabilidad¡±. El colof¨®n es, a juicio de Rajoy, que Mas aspire a una lista unitaria negando la realidad de Catalu?a: ¡°No queremos un pa¨ªs de listas ¨²nicas, partidos ¨²nicos y pol¨ªticas ¨²nicas al servicio de una ¨²nica causa. Por favor, un poco de respeto a Catalu?a¡±.

Camacho pide a Rajoy que deje de dialogar con CiU y refuerce el Estado

Frente a ese recorrido, Rajoy se centr¨® en desgranar todas las aportaciones que ha realizado el Gobierno de Espa?a para sostener a Catalu?a y ocupar ese supuesto de vac¨ªo de poder. Sin explayarse, como otras veces, sobre en qu¨¦ situaci¨®n quedar¨ªa Catalu?a en caso de secesi¨®n, Rajoy desgran¨® las aportaciones de su Ejecutivo: afirm¨® que los ¡°plebiscitos¡± de Mas no sirven para recurrir a los mercados y que la Generalitat se ha financiado del Fondo de Liquidez Auton¨®mico (el principal acreedor de Catalu?a es ahora el Estado); que fue el Tesoro de Espa?a el que auxili¨® a Mas cuando no pudo devolver los fondos patri¨®ticos; que fue el Fondo de Pago a Proveedores el que abon¨® la deuda a las farmacias y que fue el Gobierno de Espa?a el que permiti¨® mantener los servicios p¨²blicos y los pagos de las n¨®minas adem¨¢s de sanear las cajas de ahorros.

No solo carg¨® contra CiU. Rajoy arremeti¨® contra el PSOE por no querer firmar el pacto de corrupci¨®n ¡ª¡°Nos averg¨¹enzan los casos de corrupci¨®n que tambi¨¦n los hemos tenido en nuestro partido¡±¡ª y las ¡°soluciones milagrosas¡± de Podemos. Rajoy mostr¨® su estupor por que sus adversarios no admitan la recuperaci¨®n econ¨®mica al escrutar la realidad ¡°con las anteojeras del sectarismo¡±. Su discurso fue acogido con indignaci¨®n por los partidos soberanistas. Josep Rull (CDC) le reproch¨® que hubiera protagonizado un ¡°acto cerrado, encapsulado, para hablar de los suyos y de lo suyo¡±. El democristiano Ramon Espadaler, acus¨® a Rajoy de alimentar ¡°el frentismo¡± y no formular alternativas. ¡°Que no nos de lecciones de pluralidad¡±, apunt¨® Alfred Bosch, de ERC. Y Miquel Iceta, l¨ªder del PSC, avis¨® a Rajoy que no se ganan votos en Catalu?a despreciando a los catalanes. ¡°La soluci¨®n ser¨¢ federal¡±, vaticin¨®.