Ataque con bomba frustrado en la sede del PP

Daniel P¨¦rez Berlanga no era exactamente un kamikaze. Por mucho que a sus 37 a?os le siguieran llamando ¡°el loco del pueblo¡± ¡ªseg¨²n dijo ayer el Jefe Superior de Polic¨ªa de Madrid¡ª, no bastaba con empotrar a toda velocidad su coche contra la sede del Partido Popular de Madrid para que la bomba casera que llevaba dentro explotase. De hecho, lo hizo. Y fracas¨®. Estrell¨® su Citr?en Xantia azul oscuro contra la puerta principal del edificio de la calle G¨¦nova a las 7.12 de ayer, cuando estaba dentro el personal de la limpieza.

Hab¨ªa pasado la noche tomando copas por Bronchales (Teruel), su pueblo. Y ya de madrugada, hacia la 1.00, meti¨® dos bombonas de butano ¡ªde las naranjas¡ª en el coche, adosadas a 5,8 kilos de nitrato am¨®nico ¡ªun fertilizante com¨²n de f¨¢cil adquisici¨®n¡ª mezclado con un poco de combustible y un detonador rudimentario confeccionado a base de cabezas de cerillas y un temporizador b¨¢sico que extrajo de un ventilador. Era su artefacto explosivo, hecho en casa, siguiendo las instrucciones que encontr¨® en Internet y en un programa que hab¨ªa visto hace tres meses en Discovery Channel, seg¨²n relat¨® m¨¢s tarde ante los polic¨ªas que lo detuvieron.

La idea inicial del atacante era empotrar el veh¨ªculo en el Congreso

A mitad de camino hacia Madrid, par¨® en un bar de carretera y ensambl¨® todos los componentes de su bomba. Inicialmente ¡ªsiempre seg¨²n fuentes de la investigaci¨®n¡ª su objetivo era el Congreso de los Diputados, pero su conocimiento de Madrid era limitado para moverse con soltura en el coche. Se encontr¨® en la Plaza de Col¨®n y opt¨® por un sitio que s¨ª conoc¨ªa: el edificio de los populares. All¨ª se estrell¨®.

¡ª ?Ret¨ªrense!, llevo un explosivo en el coche que estallar¨¢ en una hora y media, dicen que advirti¨® ¡ªcuando logr¨® salir del coche entre los cascotes¡ª a los agentes del equipo de intervenci¨®n de Chamber¨ª que acudieron a la llamada de alerta del 091.

La bomba no estall¨®, pero el caos rein¨® durante horas en el centro de la capital. Calles cortadas, paradas de metro cerradas, ambulancias de los servicios de emergencia... Miembros de los TEDAX, los artificieros de la polic¨ªa, lograban a las 9.30 desactivar el artefacto explosivo. Acto seguido se reanudaron los servicios de transporte y se volvi¨® a abrir el paso a los viandantes. La vida de la ciudad volv¨ªa a la normalidad. Pero a P¨¦rez Berlanga, que asegur¨® en su posterior declaraci¨®n ante los polic¨ªas de la Brigada de Informaci¨®n que s¨®lo quer¨ªa ¡°llamar la atenci¨®n de los pol¨ªticos por haberle arruinado la vida¡±, la vida se le complicaba ostensiblemente.

El detenido sigui¨® instrucciones de Internet y de un programa de 'Discovey Channel' para fabricar el artefacto

Estaba en paro desde el mes de mayo, hab¨ªa estado en tratamiento psiqui¨¢trico por una posible esquizofrenia y hab¨ªa tenido algunos problemas con las drogas, seg¨²n cont¨® el alcalde y vecinos de la localidad turolense. Pero su intento desesperado por captar la atenci¨®n de los pol¨ªticos le puede costar ahora una acusaci¨®n de terrorismo.

Lo cierto es, seg¨²n explicaron los t¨¦cnicos de explosivos, que si el artefacto ideado por P¨¦rez Berlanga hubiese estallado ¡°habr¨ªa causado graves da?os¡±. Al menos dos agentes de seguridad se encontraban dentro del edificio de los populares en el momento del choque, seg¨²n fuentes policiales.

Pero tambi¨¦n es cierto que la bomba casera elaborada por P¨¦rez Berlanga en la soledad de su hogar durante d¨ªas, requer¨ªa una manipulaci¨®n posterior para ser detonada. Fuentes cercanas a la investigaci¨®n aseguran que intent¨® activarla pero, al verse por unos momentos atrapado en el coche sin posibilidad de huida, desisti¨®. No obstante, se tomaron todas las precauciones posibles y durante horas los artificieros manejaron robots de control remoto para reconocer las caracter¨ªsticas del explosivo.

La planta baja de la sede de los populares sufri¨® importantes da?os materiales, ya que el coche no s¨®lo logr¨® arramblar con los bolardos que defienden la acera, sino que atraves¨® las puertas y casi lleg¨® hasta la escalera de subida a la primera planta. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, acudi¨® por la tarde a comprobar los da?os. ¡°Ojal¨¢ estas cosas no vuelvan a ocurrir en Espa?a¡±, escribi¨® el jefe del Ejecutivo en su cuenta de Twitter tras la visita.

A ¨²ltima hora de ayer, agentes de la Brigada de Informaci¨®n de Madrid registraban junto a P¨¦rez Berlanga su apartamento de Bronchales, donde esperaban encontrar restos y pruebas de los materiales utilizados en la fabricaci¨®n de esa bomba que nunca explot¨®.