Vientos de cambio
Las universidades espa?olas se especializar¨¢n y tendr¨¢n que competir
La revoluci¨®n digital est¨¢ produciendo ya cambios fundamentales en las universidades de todo el mundo y las espa?olas tendr¨¢n que transformarse sustancialmente en los pr¨®ximos a?os. Estos cambios van a afectar a la docencia, la investigaci¨®n y la transferencia, y, tambi¨¦n, a c¨®mo las universidades se organizan y se financian. Las universidades espa?olas se especializar¨¢n y tendr¨¢n que competir por estudiantes y por profesores en un entorno m¨¢s internacional y m¨¢s abierto.
En primer lugar, vamos a asistir a cambios fundamentales en los m¨¦todos docentes y en la organizaci¨®n de las ense?anzas. La aparici¨®n de Internet hizo posible la formaci¨®n on-line a distancia, pero no modific¨®, en s¨ª misma, el proceso de aprendizaje. Se grabaron clases en v¨ªdeo y se colgaron en la red con ejercicios, reproduciendo a distancia el m¨¦todo habitual de ense?anza presencial utilizado en las universidades desde su creaci¨®n en el siglo XIII. El cambio pedag¨®gico vino de la mano del MIT. En 2001 lanz¨® la iniciativa OpenCourseWare (OCW) dando acceso libre y gratuito a los materiales de muchos de sus cursos oficiales. La extensi¨®n de esta idea ha llevado a la aparici¨®n de plataformas abiertas como EDX, Cursera y MiriadaX en Espa?a, que ofrecen cursos universitarios gratuitos a distancia o cursos masivos on line (MOOCs). En 2004 Salman Khan, un joven ingeniero del MIT, inspirado por este esp¨ªritu de apertura, grab¨® y colg¨® en Youtube v¨ªdeos cortos explicando matem¨¢ticas para sus primos en New Orleans. Tuvo la intuici¨®n genial de grabar lo que ver¨ªa un estudiante si ¨¦l estuviese a su lado explic¨¢ndole el concepto en una hoja de papel, en lugar del busto parlante habitual en los v¨ªdeos docentes. Cada v¨ªdeo explicaba un s¨®lo concepto y equival¨ªa a una clase particular de unos pocos minutos de duraci¨®n. Adem¨¢s, despu¨¦s de la explicaci¨®n incluy¨® ejercicios de autocomprobaci¨®n simples, para que el estudiante pudiera comprobar por s¨ª mismo si hab¨ªa entendido el concepto y era capaz de aplicarlo. Si el estudiante no respond¨ªa adecuadamente a la comprobaci¨®n pod¨ªa escuchar de nuevo el v¨ªdeo y volver a intentarlo hasta conseguirlo. Su m¨¦todo tuvo un ¨¦xito inmediato y sus v¨ªdeos fueron utilizados por estudiantes de todo el mundo. Este efecto le anim¨® a fundar la Khan Academy, una instituci¨®n sin fines de lucro y financiada con donaciones privadas, que promueve la ense?anza gratuita a distancia con v¨ªdeos cortos y autocomprobaci¨®n del aprendizaje. La formaci¨®n en l¨ªnea tiene la gran ventaja de proporcionar informaci¨®n detallada sobre el proceso de aprendizaje de cada estudiante: si resuelve o no a la primera el ejercicio planteado despu¨¦s de escuchar el v¨ªdeo, cuanto tiempo le lleva revisarlo y donde se demora en el v¨ªdeo antes de volver a intentarlo, etc. Estos datos son muy valiosos para entender c¨®mo aprende cada estudiante y c¨®mo ayudarle mejor en el futuro. Toda esta informaci¨®n ha llevado a replantear el papel de la ense?anza on line como complemento de la ense?anza presencial. Algunas universidades est¨¢n cambiando el papel tradicional de la clase (flipping classroom): en lugar de impartir lecciones a grupos de estudiantes que hacen luego ejercicios en casa para comprobar su aprendizaje, los estudiantes escuchan v¨ªdeos en casa, comprueban su comprensi¨®n con ejercicios en l¨ªnea, y en la clase trabajan en grupo con la ayuda del profesor sobre las implicaciones de estos conceptos en la pr¨¢ctica.
Vamos a asistir a cambios profundos en los m¨¦todos docentes y en la organizaci¨®n de las ense?anzas
Estos cambios est¨¢n afectando a la organizaci¨®n de la docencia en las mejores universidades del mundo y tendr¨¢n su repercusi¨®n en Espa?a. Se modificar¨¢ el papel del profesor, de conferenciante a estimulador del aprendizaje, y el del estudiante, protagonista de su propia formaci¨®n. Adem¨¢s, har¨¢ cambiar la tradicional organizaci¨®n de un Grado en asignaturas de duraci¨®n fija. De hecho, es posible que las lecciones que siga un estudiante hayan sido grabadas por profesores de una universidad distinta a la suya, de la misma forma que ahora utiliza textos de profesores de otras procedencias. La duraci¨®n del curso tambi¨¦n puede variar en funci¨®n del trabajo e inter¨¦s del estudiante. Se favorecer¨¢ la colaboraci¨®n docente entre universidades y las titulaciones conjuntas, con estudiantes que siguen a distancia con plenos efectos acad¨¦micos cursos de distintas instituciones.
La globalizaci¨®n y la apertura van a cambiar tambi¨¦n la relaci¨®n entre investigaci¨®n y la transferencia. En el pasado estas funciones de la universidad se han movido por caminos distintos, donde por un lado los mejores investigadores creaban nuevo conocimiento, sin relaci¨®n con su posible aplicaci¨®n, y por otro, algunos profesores desarrollaban consultor¨ªa, con frecuencia con poca innovaci¨®n real. En el futuro ambas funciones estar¨¢n mucho m¨¢s pr¨®ximas y se llevar¨¢n a cabo en centros de investigaci¨®n con financiaci¨®n privada y p¨²blica, donde los profesores universitarios trabajen mano a mano con investigadores de empresas e instituciones para crear y mejorar productos y servicios. Las mejores universidades integrar¨¢n esta investigaci¨®n en la docencia, y los estudiantes tendr¨¢n que demostrar su capacidad para innovar y aplicar los conocimientos adquiridos en nuevos contextos para graduarse.
La investigaci¨®n del futuro ser¨¢ cada vez m¨¢s interdisciplinar, y habr¨¢ que crear nuevos espacios
La investigaci¨®n del futuro ser¨¢ cada vez m¨¢s interdisciplinar, y habr¨¢ que crear nuevos espacios m¨¢s flexibles para romper los cotos cerrados de los peque?os departamentos especializados. La gobernanza de las universidades espa?olas, basadas en un sistema de contrapesos de poder que hace f¨¢cil mantener privilegios y dif¨ªcil el cambio, tendr¨¢ que adaptar su toma de decisiones a lo que es habitual en las buenas universidades del mundo.
Las universidades tendr¨¢n que especializarse en lo que hacen bien y cooperar con otras para complementar su oferta docente e investigadora. Hoy un profesor puede impartir en la intimidad de su clase un curso muy mediocre, pero este curso no podr¨¢ sobrevivir si sus estudiantes tienen la opci¨®n de elegir y seguir a distancia un curso impartido por un profesor excelente. De la misma forma es dif¨ªcil justificar un programa de doctorado impartido por investigadores que no han demostrado su capacidad para crear conocimiento relevante y que produce tesis doctorales cuyo impacto en la ciencia es nulo. La ventaja de un mundo m¨¢s abierto es que la competencia docente o investigadora de los profesores ser¨¢ cada vez m¨¢s p¨²blica, y por lo tanto la exigencia aumentar¨¢ y la competici¨®n por atraer a los mejores estudiantes y profesores cambiar¨¢ la estructura de las universidades espa?olas. Inevitablemente este proceso llevar¨¢ a replantear su financiaci¨®n, de manera que sus recursos dependan cada vez m¨¢s de sus resultados, como ocurre en las universidades de los pa¨ªses m¨¢s desarrollados y l¨ªderes en educaci¨®n e investigaci¨®n cient¨ªfica.
Daniel Pe?a es rector de la Universidad Carlos III
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.