Unos 60 presos de ETA solicitan a la Audiencia su traslado a c¨¢rceles vascas

Los presos de ETA han abierto una v¨ªa de dudoso ¨¦xito para tratar de lograr el acercamiento a c¨¢rceles del Pa¨ªs Vasco y Navarra. Unos 60 miembros del colectivo, entre ellos varios hist¨®ricos como Henri Parot, han enviado una queja modelo al juez de Vigilancia Penitenciaria de la Audiencia Nacional, Jos¨¦ Luis de Castro, alegando m¨²ltiples vulneraciones de derechos derivadas supuestamente de la pol¨ªtica de dispersi¨®n. El problema es que, la ubicaci¨®n de los presos depende ¨²nicamente de la Secretar¨ªa General de Instituciones Penitenciarias, dependiente del Ministerio del Interior, y a los tribunales de lo contencioso-administrativo. Los jueces de vigilancia solo pueden corregirla en supuestos muy tasados.

Esta presentaci¨®n masiva de quejas se enmarca en la declaraci¨®n del colectivo de 28 de diciembre de 2013 en la que este asumi¨® por primera vez la legalidad penitenciaria y mostr¨® su disposici¨®n al acceso de sus miembros a los beneficios penitenciarios. Sin embargo, ninguna de las solicitudes de traslado a c¨¢rceles vascas recoge el reconocimiento del da?o causado y la desvinculaci¨®n expresa de la banda terrorista, las l¨ªneas rojas que mantiene el Gobierno para contemplar cualquier medida de favor a estos reclusos.

Ninguna de las quejas recoge el reconocimiento del da?o causado ni la desvinculaci¨®n de la banda

Los abogados de presos de la banda anunciaron la iniciativa el pasado 14 de diciembre despu¨¦s de que Instituciones Penitenciarias denegaran las peticiones que muchos de ellos hab¨ªan enviado a ese organismo dependiente de Interior. ¡°Esperamos no tener que recurrir al tribunal de Estrasburgo porque ser¨ªa triste que el mecanismo del Estado espa?ol funcione a trav¨¦s de impulsos internacionales¡±, afirm¨® el abogado de reclusos etarras I?aki Goioaga evocando la decisi¨®n de ese tribunal sobre la doctrina Parot.

El formulario presentado por todos ellos recoge las quejas t¨ªpicas y habituales de este tipo de internos. La distancia a sus domicilios. Las dificultades que la dispersi¨®n crea para acceder a las comunicaciones y visitas de familiares y amigos, incluidos los supuestos accidentes de tr¨¢fico sufridos por estos en sus viajes a los centros penitenciarios. La dificultad para acceder a m¨¦dicos de confianza o a la educaci¨®n y cultura en euskera, o la desestructuraci¨®n familiar y el desarraigo que, en su opini¨®n, les genera esa situaci¨®n.

Las quejas invocan los criterios refundidos de actuaci¨®n de los jueces de vigilancia penitenciaria aprobados por estos en junta en 1994. Su apartado 13 asegura que estos magistrados est¨¢n facultados para denegar un traslado cuando se haya producido alg¨²n abuso o desv¨ªo de poder por parte de Instituciones Penitenciarias.

Los abogados de presos de la banda anunciaron la iniciativa y su intenci¨®n de llegar a Estrasburgo

Sin embargo, fuentes de la Audiencia Nacional aseguran que esa no es la v¨ªa correcta para anular la dispersi¨®n y lograr el acercamiento. El procedimiento ordinario, seg¨²n esas mismas fuentes, consiste en solicitarlo directamente a Instituciones Penitenciarias, la administraci¨®n competente. En caso de que ese organismo lo rechazara, los reclusos podr¨ªan presentar un recurso ante los juzgados de lo contencioso-administrativo, pero no ante los penales o penitenciarios como han hecho ahora. Esas mismas fuentes recuerdan que los criterios de actuaci¨®n de los jueces de vigilancia no constituyen una disposici¨®n legal, sino solo unas directrices aprobadas por estos.

El Juzgado Central de Vigilancia de la Audiencia Nacional ha iniciado las comprobaciones para dirimir si, efectivamente, se dan esas vulneraciones de derechos que los presos denuncian. El magistrado ha solicitado a Instituciones Penitenciarias que elabore sobre cada uno de ellos varios informes sobre las solicitudes de traslado que hayan presentado y la respuesta que les dio ese organismo, el arraigo social y familiar de cada preso, las comunicaciones con familiares, amigos y abogados que hayan tenido, su estado de salud y su derecho a la educaci¨®n y la cultura en su lengua. Tambi¨¦n ha solicitado la relaci¨®n de quejas que ha presentado cada uno durante su condena y la respuesta que les dio prisiones.

El juzgado ha pedido informes para analizar si efectivamente se dan esas vulneraciones de derechos

En caso de que el juez De Castro deniegue, como parece previsible, los traslados a c¨¢rceles vascas, los reclusos podr¨ªan recurrir a la secci¨®n primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, la encargada de dirimir los asuntos penitenciarios. La resoluci¨®n de esta ¨²ltima podr¨ªa ser recurrida al Constitucional y, sucesivamente, a Estrasburgo, como anunciaron los abogados de los presos en noviembre. De hecho, las quejas invocan varias vulneraciones de derechos contemplados en el Convenio Europeo de Derechos Humanos.