El idioma espa?ol se bate en retirada en Gibraltar
El cierre del Instituto Cervantes en El Pe?¨®n solo alegra a los ultranacionalistas
Dijo el ministro Jos¨¦ ManuelGarc¨ªa-Margallo el mi¨¦rcoles en el Parlamento que en Gibraltar ¡°todos hablan espa?ol, salvo los simios¡±. Y este argumento, entre otros, le sirvi¨® para justificar el cierre del Instituto Cervantes en El Pe?¨®n, la ¨²nica instituci¨®n espa?ola all¨ª domiciliada. La noticia no fue bien recibida en los alrededores (ning¨²n alcalde espa?ol la ha defendido) y solo ha sido aplaudida por el sector gibraltare?o m¨¢s ultranacionalista, que vio en la llegada del Cervantes una pica espa?ola dentro de Gibraltar.
El Cervantes de Gibraltar ha dado clases de espa?ol a 4.000 alumnos en sus cuatro a?os de vigencia, lo cual no parece mucho, pero lo es para una poblaci¨®n de 30.000 habitantes. Un 65% de su alumnado han sido ni?os y adolescentes, justo la generaci¨®n que m¨¢s dificultades tiene con la lengua espa?ola.
El Cervantes no ha supuesto una gran inversi¨®n para las arcas del Estado: tiene dos empleados, 10 profesores en calidad de colaboradores y ocupa 350 metros cuadrados de un se?orial edificio en pleno centro de Gibraltar, local por el que Espa?a no paga un euro porque el empresario James Gaggero, de 56 a?os, decidi¨® regalar el alquiler. ¡°Tengo muchos amigos espa?oles¡±, dice Gaggero, ¡°no entiendo estas cosas de la pol¨ªtica, pero me parec¨ªa que era bueno para ambas partes. Nos permit¨ªa ganar confianza. Es una l¨¢stima¡±. James representa a la sexta generaci¨®n de los Gaggero, que llegaron a Gibraltar en 1810 procedentes de G¨¦nova. Vive en Londres desde hace cuatro a?os y da empleo a 380 trabajadores en El Pe?¨®n.
El espa?ol es una asignatura obligatoria en el sistema educativo gibraltare?o, que sigue las pautas del modelo brit¨¢nico, pero solo se imparte una clase a la semana hasta secundaria, donde avanza hasta las tres horas semanales. El franc¨¦s tiene dos horas y el ingl¨¦s, cinco. ¡°El espa?ol ha perdido terreno entre los ni?os desde que los padres modernos¡±, dice Albert Danino, profesor de espa?ol ya jubilado, ¡°hablaban a sus hijos en ingl¨¦s para no perderlo. Luego llegaron las televisiones por sat¨¦lite y se acab¨® esa ¨¦poca en la que en Gibraltar se ve¨ªan solo los canales espa?oles. Ha habido una inversi¨®n. Los padres nacidos en los cincuenta hablaban a sus hijos en espa?ol. Ahora, no¡±. Danino ha sido profesor del Cervantes. ¡°Aporta cultura espa?ola. Los chicos ven¨ªan porque sus padres quieren que se mantenga el espa?ol¡±. En el mismo sentido se manifiestan fuentes del Gobierno de Gibraltar y empresarios.
Los que m¨¢s han celebrado la medida anunciada por Margallo han sido quienes se opusieron al Cervantes y lo trataron como ¡°un caballo de Troya espa?ol¡±, como ¡°un infiltrado¡±. Entre ellos, Joe Bossano, ex ministro principal y exl¨ªder laborista, partidario de mantener siempre una l¨ªnea dura con Espa?a.
¡°Los ni?os aprenden geograf¨ªa espa?ola, empiezan a conocer Espa?a, hacemos amigos. Espa?a sale de ah¨ª in¨²tilmente¡±, dice otro profesor. Los partidarios de britanizar a cualquier precio est¨¢n de enhorabuena: el espa?ol se retira.
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