El suelo del colegio privado, negocio para Granados
La Operaci¨®n P¨²nica pone el foco en la cesi¨®n de parcelas p¨²blicas para centros privados, una f¨®rmula que ha vivido un boom en Madrid en una d¨¦cada de la mano de Aguirre
La trama de corrupci¨®n en la Comunidad de Madrid destapada en la Operaci¨®n P¨²nica ha puesto uno de sus m¨²ltiples focos en la nueva ense?anza concertada. El sistema que supone dar suelo p¨²blico a entidades privadas a cambio de la construcci¨®n del colegio ¡ªf¨®rmula que creci¨® de manera exponencial durante la presidencia de Esperanza Aguirre¡ª permiti¨® supuestamente grandes negocios a los principales imputados en la trama, el exconsejero Francisco Granados y su amigo constructor David Marjaliza.
Cuando fueron detenidos los dos supuestos cerebros de la trama de corrupci¨®n, la Guardia Civil requiri¨® documentaci¨®n de cuatro centros concertados a la Comunidad de Madrid. Tres en Valdemoro (donde Granados fue alcalde hasta 2003) y otro en Torrej¨®n de Velasco. La Consejer¨ªa de Educaci¨®n envi¨® a los agentes a los Ayuntamientos correspondientes, por tratarse de acuerdos firmados entre cooperativas y los citados Consistorios.
El diario Abc public¨® que Granados recib¨ªa entre 900.000 y 1,2 millones de euros de mordidas por la construcci¨®n de colegios de una empresa (Alfedel) que ha gestionado la puesta en marcha de 18 centros de este tipo en la regi¨®n, entre ellos los cuatro investigados. Su responsable, Alfonso Ferr¨®n, est¨¢ imputado en la causa. Declar¨® ante el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco el pasado 26 de febrero y neg¨® haber efectuado ning¨²n pago. El juez no le impuso ninguna medida cautelar, seg¨²n su abogado.
Un informe de la Agencia Tributaria incluido en la causa se?ala un pago sospechoso de medio mill¨®n de euros que hace una cooperativa a una de las empresas de Marjaliza por la construcci¨®n de un colegio. Las supuestas mordidas a Granados no aparecen en los papeles del sumario hecho p¨²blicos hasta la fecha pero, con la noticia, resurgieron las cr¨ªticas a los ¡®colegios negocio¡¯, como los llaman sus detractores.
Valencia copia el modelo madrile?o
La empresa Alfedel, investigada en la Operaci¨®n P¨²nica, concurr¨ªa a la construcci¨®n de los dos colegios privados sobre suelo p¨²blico que hasta la fecha ha licitado la Generalitat Valenciana, en Elche y Calp. Con los concursos convocados en julio del a?o pasado, el Gobierno de Alberto Fabra cumpl¨ªa un compromiso electoral consistente en favorecer los llamados centros de iniciativa social (CIS) para concertar a 75 a?os. El canon anual es de 8.500 y 11.500 euros. En total, cinco ayuntamientos acordaron ceder suelo a tal fin, pero solo dos ha querido llegar hasta el final.
Seg¨²n las actas oficiales, Alfedel ha quedado fuera en ambos casos al no subsanar deficiencias relativas al objeto social, sin ¡°relaci¨®n directa con el objeto de la concesi¨®n¡±, y carecer de ¡°solvencia econ¨®mico-financiera¡±, porque su cuenta anual en el Registro Mercantil era ¡°inferior a 500.000 euros¡±. Llama la atenci¨®n en una firma que ya ha gestionado 18 centros en Madrid. Al no constar ¡°ning¨²n acto tendente a subsanar las deficiencias observadas¡±, esta empresa ha quedado fuera de ambos concursos. En Calp su eliminaci¨®n fue certificada el 20 de febrero; a partir de ah¨ª, solo queda una aspirante en liza. Los socialistas pidieron el viernes en el pleno de Calp la retirada de la licitaci¨®n, porque ¡°visto lo ocurrido en Madrid, todo el proceso est¨¢ bajo sospecha¡±. En Elche, adem¨¢s de la empresa madrile?a se presentaron tres firmas m¨¢s, cuyas ofertas fueron desestimadas. Pese a ello, la consejera de Educaci¨®n, Mar¨ªa Jos¨¦ Catal¨¤, dijo el viernes que se volver¨ªa a licitar.
CC OO ha pedido una auditor¨ªa en Madrid para que se revoquen ¡°todos los conciertos con coste alto para el erario p¨²blico y que han sido impulsados en detrimento de los centros p¨²blicos¡±. La oposici¨®n exige explicaciones al ministro Jos¨¦ Ignacio Wert porque su reforma educativa (la Lomce) incluy¨® una modificaci¨®n que da carta de naturaleza a estas cesiones.
En Madrid, se han cedido entre 2000 y 2013 unas 80 parcelas su suman m¨¢s de mill¨®n y medio de metros cuadrados de terreno, seg¨²n estimaciones de UGT. La Consejer¨ªa de Educaci¨®n madrile?a, con 1.634 centros p¨²blicos y 563 concertados, admit¨ªa 79 parcelas en 2011 pero no ofrece estimaciones actualizadas. No hay parang¨®n en ninguna otra regi¨®n. La Comunidad Valenciana, que anunci¨® en 2000 un plan similar, tiene los concursos paralizados.
Los suelos madrile?os han ido a parar a congregaciones ultrarreligiosas que segregan por sexos o a empresarios ajenos al sector, como el expresidente de la patronal madrile?a Arturo Fern¨¢ndez, que ha gestionado a medias con un socio tres colegios de los que se deshizo en 2014. Se han firmado convenios de cesi¨®n de suelos municipales y regionales para colegios en nuevos desarrollos urban¨ªsticos con Ayuntamientos de todos los colores pol¨ªticos, aunque mayoritariamente del PP. El Gobierno regional defiende que las familias demandan este tipo de educaci¨®n y apela a la ¡°libertad de elecci¨®n¡± de los padres.
Los cooperativistas a los que se les adjudica el suelo deben pagar un canon anual. Las cantidades pueden llegar a oscilar entre 8.000 y m¨¢s de 400.000 euros. Ellos construyen y sufragan el edificio, con lo que la Comunidad se ahorra unos 15 millones de euros. La Administraci¨®n paga los sueldos y los gastos de funcionamiento. El c¨¢lculo se hace por m¨®dulo (aula) o por alumno.
Seg¨²n distintas estimaciones, el precio de un alumno de un centro p¨²blico ronda los 5.500 euros frente a 3.500 en la concertada. Distintas fuentes del sector se?alan que son cantidades insuficientes para mantener el d¨ªa a d¨ªa de los centros, m¨¢s a¨²n cuando sus gestores deben afrontar el pago del cr¨¦dito pedido para construirlo y que en ning¨²n caso se compensa desde la Administraci¨®n. Y ah¨ª entran en juego las familias.
Las cuotas que pagan los alumnos ¨Cvoluntarias y no lucrativas por ley- se han disparado con este modelo. En uno de los colegios de Arturo Fern¨¢ndez, las familias pagaban 210 euros al mes. En un centro del Opus sobre terrenos de la Comunidad de Madrid se abonaban 170 euros. Uno de los centros investigados en la P¨²nica cobra 120. La media de los colegios de Escuelas Cat¨®licas, principal gestor del antiguo modelo concertado religioso en Madrid, es de 30 euros.
Lo que pagan las familias
Sobre el papel, la educaci¨®n concertada es tan gratuita como la p¨²blica. La normativa solo permite cobrar aportaciones voluntarias por clases complementarias o actividades extraescolares cuyos precios no deber¨ªan ser lucrativos. El car¨¢cter voluntario no siempre queda claro. Un estudio de la OCU de 2012 se?alaba que el 90% de los concertados obliga al pago de cuotas.
En uno de los centros promovidos por Alfadel, el Valle del Miro (Valdemoro), las familias pagan 120 euros mensuales por una hora extra al d¨ªa que se imparte de 9.00 a 10.00 para primaria y de 12.00 a 13.00 en infantil. Se llama complemento formativo y abarca actividades deportivas o idiomas. Las familias tambi¨¦n pagan por el material escolar, por el uniforme (incluido el gorro de la piscina) y por un IPad en leasing que les cuesta 300 euros al a?o m¨¢s un seguro de 250 euros. Sumando comedor, material escolar y uniforme (incluido el gorro para ba?arse en la piscina o los cuadernos) ronda los 300 euros mensuales por hijo, seg¨²n familias consultadas. Responsables de Alfedel aseguran que en sus centros se advierte claramente de ese car¨¢cter voluntario y que, con la crisis, se ha disparado el n¨²mero de familias que no abonan ninguna cantidad sin que eso haya tenido consecuencias. Desde la Consejer¨ªa de Educaci¨®n madrile?a se?alabn que estas actividades ¡°siempre est¨¢n bajo control de la Inspecci¨®n educativa¡± que realiza supervisiones ordinarias. En el ¨²ltimo a?o han impuesto dos sanciones.
Sobre el papel, la educaci¨®n concertada es tan gratuita como la p¨²blica. La normativa solo permite cobrar aportaciones ¡°voluntarias¡± por clases complementarias o actividades extraescolares que en los ¨²ltimos a?os han disparado sus precios en muchos centros. En uno de los centros promovidos por Alfadel, el Valle del Miro (Valdemoro), las familias pagan 120 euros mensuales por una hora extra al d¨ªa que se imparte de 9.00 a 10.00 para primaria y de 12.00 a 13.00 en Infantil. Se llama complemento formativo y abarca actividades deportivas o idiomas. Las familias tambi¨¦n pagan por el material escolar, por el uniforme (incluido el gorro de la piscina) y por un IPad en leasing que les cuesta 300 euros al a?o m¨¢s un seguro de 250 euros. Sumando comedor, material escolar y uniforme (incluido el gorro para ba?arse en la piscina o los cuadernos) supone unos 300 euros mensuales por hijo, seg¨²n una madre consultada. El cobro es legal siempre que se especifique que estas actividades son voluntarias.
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