El ala dura del PP recurre a Aznar para recuperar el voto m¨¢s ideol¨®gico
El expresidente ultima actos en Logro?o, Madrid, Zaragoza y ?vila
Estar¨¢ en cuatro o cinco m¨ªtines pero las invitaciones ¡ªdicen en su entorno¡ª son ¡°muchas m¨¢s¡±. El expresidente del Gobierno Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar cierra estos d¨ªas su agenda para regresar a la campa?a electoral del Partido Popular, aparentemente ajeno a la vor¨¢gine que vive su partido tras la detenci¨®n de quien fue su mano derecha en la econom¨ªa, Rodrigo Rato. Mientras el PP se replantea su estrategia, centrada inicialmente en la recuperaci¨®n econ¨®mica con la experiencia de 1996 y aquel llamado ¡°milagro econ¨®mico¡± como reclamo ante unas encuestas que pintan fatal, Aznar cuadra fechas para acudir a algunos de los territorios donde se ha reclamado su presencia.
?La direcci¨®n nacional cuenta con ¨¦l y fue el propio Mariano Rajoy quien lo telefone¨® hace semanas para que se involucrase en la batalla electoral. ¡°Hay una voluntad de que el PP vuelva a su esencia y Aznar conserva toda su fuerza, lo de Rato no le afecta directamente y adem¨¢s en ese caso quedan todav¨ªa muchas cosas que aclarar¡±, asegura un miembro de la direcci¨®n popular. La ruptura de Aznar con Rato, seg¨²n sus pr¨®ximos, viene de lejos. De cuando decidi¨® regresar del FMI, sin dar una explicaci¨®n convincente a quienes tanto hab¨ªan hecho ¡ªel entorno de Aznar asegura que el presidente ¡°se moj¨®¡± moviendo contactos internacionales¡ª para situarlo en una de las primeras instituciones del mundo. Mucho antes, su relaci¨®n personal ya se hab¨ªa enfriado mucho.
El entorno del expresidente da por hecho que har¨¢ campa?a en La Rioja, donde se afili¨® al PP (entonces AP) cuando viv¨ªa en Logro?o; en ?vila ¡ªla circunscripci¨®n por la que fue elegido diputado al Congreso la primera vez, en 1986¡ª y en Madrid, donde reside actualmente junto a su esposa, Ana Botella, adonde acudir¨¢ reclamado por la presidenta regional del partido y candidata a la Comunidad, Esperanza Aguirre. No tanto por la aspirante a suceder a Botella en la alcald¨ªa de la capital, Cristina Cifuentes, que va por libre, con una campa?a personalista que huye de los m¨ªtines casi tanto como de las fotos con Aguirre. Si finalmente se convoca el gran acto que se pretende en la capital de Espa?a con el expresidente, nadie en el PP duda de que Cifuentes sonreir¨¢ desde el estrado junto a Aznar. Pero la invitaci¨®n habr¨¢ partido de Aguirre.
Fue ella la primera en pregonar que quer¨ªa a Aznar a su lado y en reivindicar la batalla ideol¨®gica, una vieja reclamaci¨®n del expresidente. Y Aznar siempre ha dicho que va donde se le invita. Si no lo hizo en la campa?a de las europeas fue porque se le llam¨® a ¨²ltima hora y de mala manera para acompa?ar a su amigo y hoy eurodiputado Miguel Arias Ca?ete en Valladolid.
En el regreso a los m¨ªtines, Aznar estar¨¢ muy probablemente tambi¨¦n en Arag¨®n, por su amistad y compromiso con la presidenta y candidata, Luisa Fernanda Rudi. El expresidente cobrar¨¢ protagonismo durante la precampa?a o la primera semana de m¨ªtines porque en la segunda, pegada a la votaci¨®n del 24 de mayo, estar¨¢ de viaje fuera de Espa?a.
En FAES, la fundaci¨®n que preside, sus colaboradores sostienen que solo lo de Arag¨®n est¨¢ cerrado, que para el resto de los m¨ªtines se est¨¢n ultimando las fechas y que las invitaciones de los barones a sumarse a la campa?a en distintas autonom¨ªas siguen en pie tras el esc¨¢ndalo Rato. El PP de Madrid ratifica que ¡°ha habido un incremento de peticiones para que est¨¦ en su campa?a¡±.
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