¡°El d¨ªa 25 mucha gente ver¨¢ que no hay ning¨²n apocalipsis¡±

La historia de Podemos se construye en torno a una palabra ¡ª¡°cambio¡±¡ª que, un a?o despu¨¦s de lograr 1,2 millones de votos en las elecciones europeas de 2014 no supone solo una aspiraci¨®n ¡ªromper el mapa de partidos el pr¨®ximo domingo¡ª, sino que refleja una evoluci¨®n del proyecto pol¨ªtico que ech¨® a andar en el Teatro del Barrio, en el barrio madrile?o de Lavapi¨¦s. El relato de la formaci¨®n que lidera Pablo Iglesias quiz¨¢ se parezca a uno de sus himnos, Todo cambia, popularizado por Mercedes Sosa. Todo ha cambiado en la organizaci¨®n porque, aunque nunca pretendi¨® ser un mero experimento, ha pasado de ser una fuerza calificada de radical a un partido que el d¨ªa 25 entrar¨¢ de lleno en las instituciones. Adem¨¢s de Iglesias, el principal art¨ªfice de ese camino es ??igo Errej¨®n, responsable de la estrategia pol¨ªtica, se?alado indirectamente por las cr¨ªticas de Juan Carlos Monedero por la moderaci¨®n del proyecto. Una circunstancia que este niega.

El coordinador de la campa?a llega al aeropuerto de Barajas con cuatro colaboradores cuando el vuelo a Mallorca, donde ayer particip¨® en un mitin, ya ha abierto la puerta de embarque. El s¨¢bado cancel¨® su participaci¨®n en el acto central, en Alicante, por una afon¨ªa, y desde el domingo, cuando apoy¨® a Manuela Carmena en una cita en Vallecas, ha ido recuperando la voz. Asume que el cambio que ha vivido Podemos tambi¨¦n ha alcanzado a su t¨¢ctica, principalmente por el auge de Ciudadanos.

¡°Una operaci¨®n audaz¡±

¡°Nosotros nacimos en una operaci¨®n audaz, muy acelerada. Casi al asalto. Nuestros adversarios ten¨ªan mucha dificultad de articular un proyecto de ciudadan¨ªa seductor. Al principio, no nos acababan de coger el tranquillo, pero finalmente reaccionan¡±, razona Errej¨®n ya en el avi¨®n. El hecho de que, poco a poco, los otros partidos, en su opini¨®n, acaben de entender el proyecto impulsado por cinco profesores de la Complutense, se traduce en tres reacciones. ¡°La campa?a del miedo, que es algo que no hay que despreciar. Cuando dicen que vamos a quitarles la segunda residencia no ofrecen un argumento pol¨ªtico muy sofisticado, pero les funciona¡±, indica. ¡°Una segunda idea es que el adversario ahora concede m¨¢s. Asume que no puede negar la idea de que estamos al final de una etapa y, por tanto, conceden que puede haber una cosa que se llama cambio. O¨ªr a Rajoy, por ejemplo, hablar del cambio en t¨¦rminos culturales es incre¨ªble. Hay actores que tienen que politizarse un poquito para torcer a Podemos¡±. La formaci¨®n, como reconoci¨® Iglesias, ha cometido errores en los ¨²ltimos meses y en ocasiones no ha logrado aplicar una estrategia de control de da?os m¨¢s eficaz.

Nacimos casi al asalto. Al principio no nos acababan de coger el tranquillo

Errej¨®n considera que la formaci¨®n de Albert Rivera, Ciudadanos, ha asimilado la primera parte lecci¨®n, la que ellos tuvieron que aprender, no sobreexponerse con diversos mensajes cada d¨ªa. ¡°Hay que hablar con el lenguaje del cambio, que tiene que ser un conjunto de ideas para arrebatar las banderas del cambio, y que eso sirva para los grandes poderes¡±. El cambio ha tenido que ver en Podemos tambi¨¦n con el viraje a la moderaci¨®n del programa, que ha abandonado ideas como el impago de la deuda o la renta b¨¢sica universal, defendidas antes de las europeas. Y esa ¡°moderaci¨®n¡±, que el propio Iglesias llama realismo, es lo que, seg¨²n el cofundador del partido Juan Carlos Monedero ¡°desarmar¨ªa a Podemos¡±. Semanas despu¨¦s de presentar su dimisi¨®n, Monedero habl¨® en una entrevista en EL PA?S, sin citar nombres, pero en clara referencia a Errej¨®n, de los ¡°generales mediocres¡± que existen en las formaciones. El n¨²mero dos del partido, que se ha distanciado de Monedero en los ¨²ltimos meses, asegura no sentirse en absoluto aludido por esas declaraciones. Iglesias, por su parte, volvi¨® a enfatizar ayer: ¡°En Podemos no hay generales mediocres¡±.

No obstante, Errej¨®n describe c¨®mo ha cambiado Podemos este ¨²ltimo a?o. ¡°Imagine que ¨¦ramos un barco peque?o que iba a toda velocidad. Ahora nos hacemos m¨¢s acorazado. Ahora tienes m¨¢s presencia, m¨¢s contactos, m¨¢s capacidad, m¨¢s peso institucional. Y creo que es m¨¢s dif¨ªcil representarnos como apocalipsis¡±, se?ala.

El valor del ¡°mientras tanto¡±

No hay que despreciar el mensaje del miedo. Funciona

Errej¨®n est¨¢ convencido de que, tras una etapa de dura resistencia de los principales partidos, ¡°el cambio ya es irreversible¡±. ¡°Ahora hay una pelea por la cual los actores pol¨ªticos reconocen que no es para tanto¡±. El polit¨®logo, en cualquier caso, asume que su formaci¨®n tiene que hacer equilibrios entre responsabilidad institucional y el pulso de la calle. ¡°Por una parte necesitas generar ¨¦pica¡±, asevera, y trazar un discurso incluyente para que ¡°los de abajo¡± se sientan protagonistas.

No obstante, los estrategas pol¨ªticos tambi¨¦n tienen que hacer concesiones y se?alar un camino. Errej¨®n cita, a este respecto, al expresidente de Uruguay Jos¨¦ Mujica. ¡°Dec¨ªa: ¡®Yo vengo de una tradici¨®n pol¨ªtica en la que todo es d¨ªa D, pero te das cuenta de que lo importante en pol¨ªtica es el mientras tanto¡±. En ese ¡°mientras tanto¡± estriba la actividad pol¨ªtica cotidiana, institucional, a la que aspira Podemos a partir del lunes: dialogar en los Parlamentos aut¨®nomos y en los Ayuntamientos; buscar acuerdos y forzar la aceptaci¨®n de medidas que consideran ¡°no de Podemos, sino de sentido com¨²n¡±. En definitiva, defiende, ¡°el d¨ªa 25 mucha gente ver¨¢ que no hay ning¨²n apocalipsis¡±.