El PP conf¨ªa en recuperarse al final con el decisivo voto oculto

El PP cree que est¨¢ viviendo su momento de tormenta perfecta, con una conjunci¨®n de factores adversos contra sus candidatos auton¨®micos y locales, y cuestiona los malos datos casi generales que reflejan la mayor parte de las encuestas. Sus expertos demosc¨®picos introducen una correcci¨®n a su favor de entre uno y tres puntos en la cocina de esos datos, seg¨²n los territorios. El PP entiende as¨ª que son ahora el partido del voto oculto, que no hay tanto votante indeciso como predicen los sondeos (lo limitan al 20% frente al 30% o 40% de muchas encuestas) y que al final los dos partidos cl¨¢sicos, populares y socialistas, se beneficiar¨¢n del voto reflexivo de los electores de clase media desencantados que ahora muestran cierta verg¨¹enza a anticipar el sentido de su papeleta.

La corrupci¨®n, los recortes aplicados, las promesas incumplidas, el escaso reflejo en las familias normales de la pregonada recuperaci¨®n en los grandes ¨ªndices macroecon¨®micos. Todos esos aspectos llevan a pensar a los responsables de las distintas campa?as de los candidatos auton¨®micos y municipales del PP que estas elecciones del 24 de mayo llegan en el peor momento posible. Y sobre todo el caso B¨¢rcenas. As¨ª lo reconocen media docena de candidatos auton¨®micos consultados y numerosos aspirantes a las alcald¨ªas m¨¢s relevantes.

El PP, como repite Mariano Rajoy todos los d¨ªas, se contenta as¨ª con ganar las elecciones el 24-M en el c¨®mputo global por apenas un punto al PSOE y con poder ense?ar la noche electoral un mapa azul de gaviotas en la mayor¨ªa de las autonom¨ªas y capitales donde ahora ya gobiernan aunque en muchos casos ese panorama se vea abocado a futuros e imprevisibles pactos con otras fuerzas, esencialmente Ciudadanos.

Un dirigente territorial del PP lo admit¨ªa esta semana con cierta sorpresa al revelar que algunos votantes, en la calle, le confesaban que no pensaban votar ahora a los populares aunque s¨ª ten¨ªan planeado hacerlo en las generales previstas para finales de a?o. Otro bar¨®n del PP era todav¨ªa m¨¢s expl¨ªcito: ¡°Muchos votantes tienen muchas ganas ahora de darnos un buen castigo y se ir¨¢n a votar a Ciudadanos para que tomemos nota y es m¨¢s que probable que luego, cuando vean el resultado de ese voto, los problemas para pactar y gobernar, decidan volver a votar a Rajoy en noviembre¡±.

Los estrategas m¨¢s pr¨®ximos a Rajoy auguran precisamente ese escenario de cierto voto prestado ahora a Ciudadanos, al que se descalifica como ¡°partido bisagra¡± y de temporada y del que se prev¨¦ cierto desinflamiento con los meses, sobre todo si no gestionan bien tras el 24-M su pol¨ªtica de pactos. El PP contempla ahora una p¨¦rdida relevante de voto, con problemas para repetir mayor¨ªas absolutas en la mayor¨ªa de las autonom¨ªas y grandes capitales, y una cierta recuperaci¨®n con el devenir de los meses, y con la repercusi¨®n de la mejor¨ªa econ¨®mica y del empleo. Por esa raz¨®n Rajoy dedica la mayor parte de sus discursos a resaltar el cambio a mejor constatado en estos ¨²ltimos tres a?os y el resto a ensalzar el comportamiento en este per¨ªodo tan dif¨ªcil del PP y de sus candidatos y no menciona nada sobre la corrupci¨®n o los errores propios.

El propio presidente y varios aspirantes territoriales han incidido mucho en la recta final de la campa?a en reclamar la ¡°movilizaci¨®n masiva¡± o un ¡°voto fuerte¡± de su electorado y en que se eviten ahora las divisiones y la fuga de los desencantados y se vuelva a confiar en el PP como la ¨²nica formaci¨®n ¡°segura, fiable y estable¡± en estos momentos para gobernar en Espa?a. El PP cifra en un 60% el voto fijo que a¨²n mantienen de sus electores m¨¢s recalcitrantes, un 20% de fugados a otras formaciones y ahora irrecuperables y limitan los indecisos al otro 20%, que son a los que m¨¢s se dirigen y que creen a¨²n captables en las horas finales con apelaciones a la responsabilidad, la sensatez y el sentido com¨²n.

El PP mantiene que el devenir de la campa?a les ha beneficiado, que sus explicaciones han calado y hasta Rajoy se permite decir que le hubiera gustado disponer de un poco m¨¢s de tiempo para llegar a m¨¢s puntos del pa¨ªs. Los trackings, las encuestas diarias internas que se hacen en algunos territorios para medir la tendencia de la temperatura pol¨ªtica, recogen que el PP ha recuperado tres puntos en estas ¨²ltimas semanas.

Varios barones populares han achacado esa recuperaci¨®n al efecto arrastre de sus mejores alcaldes, los que han hecho una gesti¨®n m¨¢s cercana, ajena a asuntos de corrupci¨®n, y los que generan menos resistencia a votar la papeleta del PP. En otras autonom¨ªas la posible presencia en el futuro parlamento de Izquierda Unida o UPyD, si no logran superar las respectivas barreras del 3% o el 5% m¨ªnimo de votos, tambi¨¦n podr¨ªa variar el resultado final a su favor.