Las tasas tur¨ªsticas no calan en las comunidades aut¨®nomas
El impuesto solo se aplica en Catalu?a, donde no han ca¨ªdo los visitantes extranjeros El nuevo Gobierno de Baleares s¨ª se plantea recuperar este gravamen, derogado por el PP

Las reticencias a aplicar la llamada tasa tur¨ªstica, un impuesto que se cobra a los visitantes en muchas capitales europeas, siguen presentes en Espa?a. Tras las ¨²ltimas elecciones auton¨®micas, solo el nuevo Ejecutivo de Baleares se plantea recuperar esta tasa, que ya se aplic¨® con pol¨¦mica en las islas en 2002 y 2003. Los detractores argumentan que se corre el riesgo de perder visitantes. Pero no ha ocurrido as¨ª en Catalu?a, la ¨²nica comunidad en la que existe desde 2012 este impuesto. Entre 2012 y 2014, la llegada de extranjeros creci¨® un 20% en esta comunidad.
El debate se reabre en Espa?a cada cierto tiempo. ?Tasa tur¨ªstica s¨ª o no? La discusi¨®n ha durado esta semana solo un d¨ªa en Madrid, el tiempo transcurrido entre que un concejal del nuevo Ayuntamiento dijo que se estaba estudiando y el desmentido de la alcaldesa, Manuela Carmena, quien aclar¨® que "hoy por hoy" no est¨¢ previsto implantar el impuesto.
82 millones de euros en Catalu?a
Desde que el impuesto tur¨ªstico se puso en marcha en Catalu?a en noviembre de 2012, y hasta el 31 de diciembre de 2014, se han recaudado 82 millones de euros. El a?o pasado se recaud¨® un 5% que en 2013.
El tributo es finalista: una parte va a los Ayuntamientos y otra a actividades de promoci¨®n y a infraestructuras tur¨ªsticas. Parte de la recaudaci¨®n, por ejemplo, sirvi¨® para sufragar las aportaciones del Ejecutivo catal¨¢n al Circuit de Montmel¨® para garantizar el mantenimiento del Gran Premio de F¨®rmula 1 o la instalaci¨®n de la pista de hielo en la plaza de Catalunya de Barcelona por Navidad. Hoy el debate est¨¢ en si debe reorientarse la finalidad de ese tributo y en qui¨¦n lo gestiona.
"En un principio, en Catalu?a hubo mucho debate y mucha presi¨®n del sector privado", recuerda Ricard Santom¨¤, director de la Facultad de Turismo Sant Ignasi, vinculada a la Universidad Ram¨®n Llull. "Pero al ver que Barcelona y Catalu?a siguen siendo los principales destinos del pa¨ªs se termin¨®", a?ade este experto. Entre 2012 y 2014 el volumen de llegadas de extranjeros creci¨® el 20% en esta comunidad, de los 14,4 a los 16,8 millones de viajeros. La Generalitat recaud¨® 40,5 millones de euros el a?o pasado por ese impuesto, el 5% m¨¢s que el a?o anterior. El tributo ¡ªque oscila entre los 0,45 y 2,25 euros por persona¡ª es finalista: se destina una parte a los Ayuntamientos y otra a actividades de promoci¨®n e infraestructuras tur¨ªsticas.
Baleares lo plante¨® en su d¨ªa como una ecotasa, con fines medioambientales. Fue aprobada en 2001 y estuvo en vigor hasta que el PP regres¨® en 2003 al poder y derog¨® la ley. En los veranos de 2002 y 2003, se recaudaron 160 millones y con estos fondos se compraron espacios naturales y fincas de alto valor que ahora son de uso p¨²blico.
El nuevo Gobierno de la socialista Francina Armengol, que cuenta con el apoyo de Podemos y M?S, recuperar¨¢ ahora la tasa. De momento, se analiza d¨®nde y c¨®mo se cobrar¨¢ y a qu¨¦ se destinar¨¢n los fondos, si solo a temas medioambientales o para la reforma de zonas tur¨ªsticas.
Pero, de momento, Baleares es la excepci¨®n. El repaso realizado por EL PA?S en las comunidades en las que ha habido cambios en los Gobiernos da como resultado una falta de inter¨¦s en aplicar tasas tur¨ªsticas. As¨ª ocurre en Castilla-La Mancha, Arag¨®n, Extremadura, Valencia o Navarra, donde los reci¨¦n constituidos Ejecutivos dicen que no est¨¢ sobre la mesa. "Ni iba en el programa ni se ha planteado", resume Lydia del Canto, secretaria de Comunicaci¨®n de la Generalitat Valenciana. "Ni est¨¢ en la agenda ni lo va a estar", indican desde la Consejer¨ªa de Turismo de Andaluc¨ªa, que tras las ¨²ltimas elecciones de marzo est¨¢ gobernada por el PSOE en solitario. En Navarra, el acuerdo de gobierno entre Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e IE no aparece establecer ning¨²n tipo de tasa tur¨ªstica.
Los detractores avisan del riesgo de perder visitantes. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, sostuvo esta semana en Palma que el turismo en Baleares es "indestructible" y aunque la ecotasa "no acabar¨¢ con ¨¦l, s¨ª le har¨¢ da?o".
Euskadi no aplicar¨¢ la tasa tur¨ªstica antes de 2016. Es una medida que est¨¢ descartada en estos momentos, aunque el Gobierno vasco sigue "analizando su viabilidad". "Es una prioridad valorar bien la aprobaci¨®n de la tasa tur¨ªstica , pero no vamos a implantarla por el momento", aseguran fuentes del Departamento de Desarrollo Econ¨®mico. Este debate est¨¢ presente en esa comunidad desde 2013, cuando el Gobierno foral de Bildu en Gipuzkoa anunci¨® que ten¨ªa "muy trabajada" una tasa para esta provincia, que nunca se lleg¨® a aplicar.
Fernando Clavijo (CC), el nuevo presidente de Canarias ¡ªel segundo destino con m¨¢s turistas extranjeros en 2014 tras Catalu?a¡ª, no ha puesto sobre la mesa el impuesto. Pero s¨ª ha abierto el debate sobre la limitaci¨®n tur¨ªstica y pretende convocar un foro sectorial antes de final a?o en el que se prev¨¦ revisar el modelo de desarrollo tur¨ªstico en Canarias, que representa m¨¢s del 30% del PIB en las Islas.
Este debate tambi¨¦n se vive en Galicia, donde el Ejecutivo del PP no se plantea la tasa. Pero el nuevo alcalde de Santiago, Marti?o Noriega (de Compostela Aberta), ha llamado la atenci¨®n sobre la sobresaturaci¨®n de la capital gallega. El objetivo del Ayuntamiento, con un alcalde de las mareas al frente, es poner coto a la proliferaci¨®n incontrolada de plazas hoteleras de toda categor¨ªa y a la especulaci¨®n en los alquileres de bajos comerciales, gran parte tomados por tiendas de recuerdos.
Con informaci¨®n de J. Doria, L. Lucio, A. Manresa, M. Ormazabal, Ll. Pellicer, M. Planelles, S. R. Pontevedra, T. Santana y M. J. Serra.
Par¨ªs, Roma, ?msterdam...
La tasa tur¨ªstica no es un concepto nuevo en Europa. Algunos grandes destinos como Par¨ªs o Roma la cobran desde hace d¨¦cadas. Es el caso de Francia, la llamada taxe de s¨¦jours se remonta a abril de 1910, cuando comenz¨® a cobrarse para disponer de dinero con el que realizar promoci¨®n tur¨ªstica y mejora de infraestructuras para los visitantes. Actualmente, se cobra en palacios, hoteles, pensiones y campings. En 2015 va de los 20 c¨¦ntimos a 4 euros, seg¨²n el tipo de establecimiento y su categor¨ªa. En Italia, donde se llama tassa di soggiorno, la han impuesto en centenares de municipios. En Roma oscila entre los 2 y los 7 euros. En Venecia, de 50 c¨¦ntimos a 5 euros. Y en Florencia, de 1,5 a 5 euros. La tasa tur¨ªstica comienza a llegar incluso al arrendamiento de habitaciones y pisos a particulares, tanto en Europa como en Estados Unidos. Actualmente, la plataforma online de alquileres Airbnb est¨¢ negociando con Par¨ªs para encargarse de recoger tambi¨¦n este pago en todos los alojamientos que intermedia. Es algo que ya hace en ?msterdam, donde la compa?¨ªa ingresa los pagos de los turistas en las arcas p¨²blicas de la ciudad. Tambi¨¦n lo hacen en varias ciudades de Estados Unidos, como Washington, Chicago, Malib¨² o Filadelfia. Barcelona actualmente estudia regularizar el alquiler de habitaciones en viviendas, que tambi¨¦n pasar¨ªan a pagar la tasa tur¨ªstica.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.