El juez investiga ¡°dietas fantasma¡± en una unidad militar en Navarra

El Juzgado Togado Militar Central n¨²mero 2 ha abierto diligencias previas para investigar el pago de ¡°dietas fantasma¡± con las que supuestamente se nutr¨ªa una caja b en el Regimiento de Cazadores de Monta?a Am¨¦rica 66, con base en Berrioplano (Navarra). Las diligencias, que afectan a los coroneles que han mandado la unidad, se basan en el testimonio del cabo primero M. A. G. M., quien denunci¨® que las dietas se pagaban por comisiones de servicio atribuidas al personal de la unidad que en realidad no se realizaban.

Seg¨²n explic¨® el cabo primero, los pasaportes de las comisiones de servicio ¡ªpara maniobras o salidas del cuartel¡ª eran autorizadas por el coronel, pero las dietas no las cobraban sus supuestos perceptores, sino se transfer¨ªan a trav¨¦s de un programa denominado BBVA NET CASH a la cuenta de la unidad, con cargo a la cual se extend¨ªa un cheque por su importe total que pasaban a engrosar la Caja B, de car¨¢cter irregular. El justificante de la transferencia serv¨ªa para burlar el control del interventor

La existencia de las ¡°dietas fantasma¡± se destap¨® durante la investigaci¨®n de otra denuncia presentada por el militar contra sus superiores por un presunto delito de abuso de autoridad. A preguntas de su letrado, el abogado Antonio Su¨¢rez-Vald¨¦s, M. A. G. M. atribuy¨® la persecuci¨®n de la que supuestamente ha sido objeto a su conocimiento de dichas irregularidades econ¨®micas, ya que estuvo destinado durante siete a?os en la Secci¨®n de Habilitaci¨®n de la unidad.

El cabo primero explic¨® que ¨¦l se encargaba de confeccionar la lista nominativa de los militares que iban a realizar la comisi¨®n de servicio ¡ªcon indicaci¨®n del itinerario, los d¨ªas y la cantidad a percibir¡ª, para reclamar el pago de las dietas. y pudo comprobar que la misma no coincid¨ªa con la realidad, ya que ¡°se enviaba a menos personal del que figuraba¡±. ?l mismo se sorprendi¨® al verse incluido una vez en la lista del personal que prestaba seguridad en el destamento del refugio de monta?a de Belagua y tuvo que pedir que se retirase su nombre.

Esta conducta se repiti¨® en ¡°infinidad de ocasiones¡± y se extend¨ªa tambi¨¦n al uso de veh¨ªculos, seg¨²n el cabo, quien ha aportado al juzgado documentos de pago por un importe superior a los 14.000 euros entre noviembre de 2013 y enero de 2014 para sustentar sus afirmaciones.

¡°Atendiendo a que el pasaporte ven¨ªa siempre firmado por el coronel jefe de la unidad¡±, agreg¨®, ¡°entend¨ªa que ¨¦sta era la autoridad que ten¨ªa que conocerlo todo. Que la caja b es del coronel y que los relevos [entre los mandos] se hacen de todo lo que hay, incluida la caja b¡±, agreg¨®.

El cabo primero dijo ignorar qu¨¦ uso se daba al dinero desviado a la caja b y s¨®lo se?al¨® que ¡°era variado¡±, citando la compra de un cuadro de la Inmaculada que se encarg¨® a un pintor navarro y cuyo importe pas¨® de los 1.000 euros previstos a 3.000.

La denuncia inicial imputaba acoso laboral a dos tenientes coroneles y otros oficiales ya que, aunque el cabo primero ten¨ªa reconcida oficialmente la condici¨®n de Apto Con Limitaciones (APL), debido a una operaci¨®n en el hombro que le imped¨ªa realizar esfuerzos, fue obligado a participar en marchas o ejercicios de tiro incompatibles con su lesi¨®n bajo amenaza de retrirarle el llamado Complemento de Dedicaci¨®n Especial (CDE). Incluso fue enviado a Afganist¨¢n de agosto de 2011 a febrero de 2012 como conductor del coronel. Seg¨²n M. A. G. M., sus problemas empezaron tras ser elegido delegado en Navarra del Consejo de Personal, un ¨®rgano asesor del Ministerio, por la Asociaci¨®n de Tropa y Mariner¨ªa Espa?ola (ATME).