Multado el hombre que se atrincher¨® armado en un bar de M¨¢laga

Las cinco horas que Gustavo S., de 37 a?os de edad, tuvo ayer en jaque a la Polic¨ªa al atrincherarse armado en su bar de Torre del Mar, n¨²cleo costero de V¨¦lez-M¨¢laga, le van a costar 1.446 euros. Es la multa que le ha impuesto un juez (ocho meses y un d¨ªa, a raz¨®n de seis euros diarios) tras un juicio r¨¢pido celebrado este martes, en el que ha sido condenado por un delito contra el orden p¨²blico. La sentencia ha sido por conformidad, al aceptar el acusado los hechos y la pena.

El hombre lleg¨® sobre las 11.00 del lunes a la cafeter¨ªa, propiedad de su familia, ech¨® a los clientes y al personal del negocio y se encerr¨® en el local, armado con una escopeta, amenazando con suicidarse si no lograba solucionar un problema que existe con la comunidad de propietarios del edificio donde est¨¢ el bar. La ubicaci¨®n es cercana al paseo mar¨ªtimo, entre la calle Copo y la avenida Duque de Ahumada.

Fue su mujer la que alert¨® al Servicio de Emergencias 112 de lo que estaba pasando. La Polic¨ªa estableci¨® entonces el protocolo de actuaci¨®n previsto en estos casos para intentar convencer al hombre de que depusiera su actitud, algo que ocurri¨® poco antes de las 16.00, cuando el hombre abandon¨® voluntariamente su encierro. El dispositivo, con medio centenar de efectivos policiales, bomberos y servicios sanitarios, se cerr¨® sin incidentes y el hombre fue detenido y conducido a comisar¨ªa.

La Polic¨ªa le imput¨® inicialmente por des¨®rdenes p¨²blicos y desobediencia, aunque tras el juicio r¨¢pido celebrado en el Juzgado de Instrucci¨®n 3 de V¨¦lez-M¨¢laga, ha sido condenado en conformidad por un delito contra el orden p¨²blico a una multa de 1.446 euros.

Cuando el hombre se entreg¨®, los agentes comprobaron que el arma que portaba estaba inutilizada. El fondo del asunto son los problemas con la comunidad de propietarios por la terraza del bar, seg¨²n cont¨® ¨¦l mismo a Efe, y afirm¨® que tem¨ªa que pudiera llegar a cerrarse el negocio.

Durante su encierro, el implicado estuvo pidiendo documentaci¨®n relacionada con la comunidad de propietarios y, adem¨¢s de los especialistas de la Polic¨ªa, estuvo hablando con varias personas, incluida su mujer y el presidente de los vecinos del bloque.