Rajoy presidir¨¢ en octubre una sesi¨®n del Consejo de Seguridad de la ONU

Ser¨¢ la gran foto internacional de Mariano Rajoy: el jefe del Gobierno espa?ol presidiendo el Consejo de Seguridad de la ONU, el ¨®rgano decisorio de la principal organizaci¨®n planetaria. Ser¨¢ en octubre, durante la presidencia rotatoria espa?ola del Consejo, en una fecha a¨²n por cerrar que oscila entre el 13 y el 21, con la resaca de las elecciones catalanas y en la precampa?a ya de las generales, previstas para diciembre. Y con un asunto de calado en el orden del d¨ªa: la renovaci¨®n de la resoluci¨®n 1325 sobre Mujer, Paz y Seguridad, que cumple 15 a?os.

Durante el mes de octubre, por turno rotatorio, Espa?a presidir¨¢ el Consejo de Seguridad de la ONU. Habitualmente ser¨¢ el embajador espa?ol en Naciones Unidas, Rom¨¢n Oyarzun, quien lo haga, y excepcionalmente, el ministro de Exteriores, Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa-Margallo. Pero tambi¨¦n puede hacerlo, aunque no sea obligatorio, el presidente del Gobierno. Y Rajoy quiere aprovechar la oportunidad.

No ser¨¢ una sesi¨®n ordinaria la elegida, sino una especialmente importante, por el calado del asunto a tratar. Se trata de revisar la aplicaci¨®n de la resoluci¨®n 1325, aprobada en el a?o 2000, hace ahora 15 a?os, sobre Mujer, Paz y Seguridad. Esta fue, seg¨²n fuentes de Naciones Unidas, la primera que se ocup¨® sobre la situaci¨®n de la mujer en los conflictos, aunque luego le han seguido otras muchas.

El creciente uso de la violencia sexual como arma de guerra (de las violaciones masivas de los Balcanes al secuestro de ni?as por Boko Haram, sin olvidar los desmanes de los propios cascos azules) aconseja reforzar las medidas de prevenci¨®n y protecci¨®n. Pero no se trata de contemplar a la mujer solo como v¨ªctima, sino tambi¨¦n como protagonista en la construcci¨®n y consolidaci¨®n de los procesos de paz.

La diplomacia espa?ola lleva varios meses trabajando en este asunto y ha pedido a sus socios de la ONU que propongan objetivos y compromisos para presentar una propuesta de resoluci¨®n que actualice la 1325. Una resoluci¨®n con firma espa?ola.

No es sorprendente, por tanto, que Rajoy no quiera perderse la ocasi¨®n y que haya buscado un hueco en su agenda, a pesar de que ha restringido al m¨¢ximo sus compromisos internacionales hasta final de a?o, para poder volcarse en las elecciones catalanas e, inmediatamente despu¨¦s, en las generales.

De hecho, y salvo imprevistos de ¨²ltima hora, el presidente solo mantiene las citas que son absolutamente ineludibles: los dos Consejos Europeos (en octubre y diciembre), la cumbre del G-20 (en Antalya, Turquia, en noviembre) y la del cambio clim¨¢tico (en Par¨ªs en diciembre).

Rajoy no acudir¨¢ a la Asamblea General de la ONU, donde Espa?a estar¨¢ representada este a?o por el ministro de Asuntos Exteriores, y tampoco a la Cumbre sobre Desarrollo Sostenible, que se celebrar¨¢ en Nueva York el 25 de septiembre, a la que acudir¨¢ el rey Felipe VI.

Aun no se ha cerrado la fecha en la que se celebrar¨¢ la reuni¨®n del Consejo de Seguridad presidida por Rajoy. Inicialmente estaba previsto que fuera el d¨ªa 21, pero fuentes diplom¨¢ticas apuntan a que en esos d¨ªas no se encontrar¨¢ en Nueva York el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, con quien el presidente espa?ol se quiere entrevistar aprovechando su visita.

La alternativa es el 13 de octubre, al d¨ªa siguiente de la celebraci¨®n de la Fiesta Nacional. De cerrarse definitivamente, Rajoy volar¨ªa a Nueva York tras presidir en Madrid, junto al Rey, el desfile del 12 de octubre. Tal vez no se haya buscado, pero la sucesi¨®n de im¨¢genes ¡ªen la Fiesta Nacional, primero, y en el Consejo de Seguridad de la ONU, luego¡ª parece el sue?o de los estrategas de campa?a del PP. Y la pesadilla del presidente catal¨¢n, Artur Mas.