Miles de refugiados en el laberinto de la burocracia
A las carencias de los solicitantes que est¨¢n en Espa?a se le a?ade la falta de planes precisos para los que vendr¨¢n de la UE
La buena voluntad no basta. La acogida de refugiados requiere previsi¨®n y planificaci¨®n. Las negociaciones en Bruselas se eternizan y Espa?a no acaba de definir los planes de acogida de cerca de 17.000 refugiados que le corresponder¨ªan, seg¨²n sendas propuestas comunitarias. Mientras, los tr¨¢mites para los miles de solicitantes de asilo que ya est¨¢n en Espa?a se eternizan y las ONG tratan de paliar con un paquete de subvenciones aprobadas por v¨ªa urgente las agudas necesidades, acumuladas durante m¨¢s de un a?o largo de estrecheces. Las ONG doblan estos d¨ªas el n¨²mero de plazas para poder acoger a los que ya est¨¢n en Espa?a y se encuentran en listas de espera, alojados en servicios de emergencia o incluso en la calle.
De los miles de refugiados que van a venir poco se sabe. El Gobierno explica que esperan a que la UE organice los traslados y que mientras trabajan en un protocolo Integral de Acogida e Integraci¨®n, cuyo contenido no ha trascendido.?Los mandatarios europeos se reunir¨¢n esta semana para decidir sobre las cuotas, pero en los despachos oficiales y de las ONG sospechan que la llegada podr¨ªa demorarse semanas e incluso meses. "Pedimos saber cu¨¢ndo y c¨®mo van a venir y que haya una respuesta ¨¢gil", dice Julia Fern¨¢ndez Quintanilla, directora general de Accem, una de las tres organizaciones responsables de la acogida.
Primero, tapar agujeros
Los 13 millones de euros en subvenciones reci¨¦n aprobados se destinar¨¢n a solventar las carencias acumuladas durante m¨¢s de un a?o y a alojar a los solicitantes en lista de espera. Cear, Accem y Cruz Roja, las tres organizaciones encargadas junto al ministerio de Empleo de la acogida duplican sus plazas con la nueva partida. Una plaza no es solo una cama, es tambi¨¦n la asesor¨ªa jur¨ªdica, psicol¨®gica, el apoyo al empleo, las clases de espa?ol y el resto de servicios. Pronto habr¨¢ unas 1.500 plazas disponibles, unas 500 m¨¢s que hasta ahora. El aumento de plazas permitir¨¢ adem¨¢s alargar la estancia para los casos de especial vulnerabilidad. ¡°Vamos a doblar el n¨²mero de plazas para los que ya est¨¢n aqu¨ª, pero si vienen los 15.000 habr¨¢ que ampliar de nuevo¡±, dice Almudena Echevarr¨ªa del Programa de refugiados de Cruz Roja.
Los plazos que maneja el Ministerio de Empleo, competente para la acogida, son los de un m¨¢ximo de dos a?os, con llegadas escalonadas cada tres meses, seg¨²n confirma a este diario Marina del Corral, secretaria de Estado de Inmigraci¨®n y Emigraci¨®n. En principio, ser¨¢n refugiados de Siria, Afganist¨¢n, Irak y Eritrea.
Para que puedan venir deben crearse primero los llamados hotspots. All¨ª se entrevistar¨¢ a los candidatos y se les trasladar¨¢ en un m¨¢ximo de dos meses desde el inicio del proceso al resto de pa¨ªses de la UE. Para la selecci¨®n se tendr¨¢ en cuenta el idioma que hable el solicitante, los lazos familiares, culturales o sociales que tenga en pa¨ªses de la UE. No est¨¢ contemplado sin embargo que el demandante de asilo elija voluntariamente a qu¨¦ pa¨ªs quiere ir.
La distribuci¨®n de los refugiados una vez en Espa?a es una de las m¨²ltiples inc¨®gnitas que rodea el proceso. Una de las ideas que se baraja es tener en cuenta el origen y la formaci¨®n. As¨ª por ejemplo si en Siria eran agricultores o pastores, se les podr¨ªa acoger en zonas rurales. "Lo ideal es que se tengan en cuenta los perfiles", explica Del Corral. Lo que no habr¨¢, por lo menos de momento son cuotas para las CC AA.
Si se toma como referencia reasentamientos como los que se hacen desde Jordania, Cruz Roja explica que se podr¨ªan demorar cinco meses. Fuentes dipom¨¢ticas en Bruselas creen que en este caso se tratar¨¢ de acelerar el proceso. "El problema es que ahora no nos lo podemos permitir. Nos preocupa mucho que Alemania, Austria o Hungr¨ªa cierren las fronteras y esta gente se quede en pleno invierno en Los Balcanes", explica Jos¨¦ Javier S¨¢nchez, subdirector para Migraciones de Cruz Roja, tambi¨¦n encargada de la acogida. S¨¢nchez cuenta que llevan meses hablando con albergues, hoteles y residencias vac¨ªas, pero que hasta que el Gobierno no les diga cu¨¢ntos vienen, no pueden poner en marcha el dispositivo. La crisis en Espa?a ha dejado multitud de edificios de fundaciones, residencias o incluso hoteles vac¨ªos, que ahora las ONG aspiran a dar un nuevo uso.
La financiaci¨®n no ser¨¢ un problema. El Gobierno espa?ol ha insistido en que cumplir¨¢n con lo que pide Bruselas. Los grupos parlamentarios han aprobado una enmienda a los presupuestos de 200 millones para los refugiados, efectivos en 2016. La idea es que los que vengan se incorporen al sistema de acogida existente. "No podemos permitir ning¨²n trato preferencial. Todos los refugiados tienen los mismos derechos", indica la secretaria de Inmigraci¨®n. El sistema actual es bueno sobre el papel, coinciden los expertos. El problema es que la falta de recursos de los ¨²ltimos tiempos han saturado el sistema, como denunci¨® recientemente el Defensor del Pueblo.
"Estamos muy preocupados por la tardanza en acoger a los reubicados, pero tambi¨¦n nos preocupa en extremo [...] que las que est¨¢n en Espa?a esperando, en unas condiciones de extrema vulnerabilidad, se posponga sine die", indicaba Accem esta semana en una carta enviada al Ministro del Interior y en la que detallaba que en Madrid un demandante tiene que esperar hasta cuatro meses para obtener una cita en la oficina de asilo y entrar en el sistema de acogida. Muchos se quedan en la calle. La Comisi¨®n Espa?ola de Ayuda al Refugiado (Cear) asegura que este a?o ha habido 400 personas esperando plaza. Consultado, el ministerio de Interior no ha ofrecido respuesta.
Tampoco entran en el sistema los refugiados devueltos por el Reglamento Dubl¨ªn, que un d¨ªa abandonaron su plaza y ahora se encuentran desprotegidos en Espa?a. Ni los que a los seis meses salieron de los centros por los recortes, para dejar hueco para los de la lista de espera. Ni los 1.300 sirios, 500 de ellos ni?os, que esperan meses en el centro temporal de inmigrantes de Melilla (CETI) el traslado a la Pen¨ªnsula. All¨ª, hacinados ¡ªla ocupaci¨®n actual triplica la capacidad del centro¡ª cualquier esfuerzo de integraci¨®n resulta poco realista.
Fuera y dentro del sistema, la resoluci¨®n de los expedientes se dilata. Frente a los tres a seis meses que requiere la ley, la media ronda el a?o, sin tener en cuenta casos de dos y tres a?os, seg¨²n datos de Acnur.
Allanar las trabas burocr¨¢ticas
El desempleo, coinciden la Administraci¨®n y las ONG, es uno de los grandes retos para la integraci¨®n de los refugiados en Espa?a. Muchos de ellos optan por emigrar al norte de Europa en busca de oportunidades y convierten a Espa?a en un pa¨ªs de tr¨¢nsito. En los a?os de bonanza, en menos de los primeros seis meses de acogida, muchos encontraban trabajo en la construcci¨®n. Ahora ya no. Por eso, las ONG piden que se facilite la homologaci¨®n de t¨ªtulos y la eliminaci¨®n de trabas administrativas para el acceso a la formaci¨®n profesional. El ministro de Educaci¨®n, ??igo M¨¦ndez de Vigo, ha recordado a los huidos de Yugoslavia, para los que se aprob¨® un sistema de homologaci¨®n especial de t¨ªtulos. ¡°Hay que preverlo, hay que prepararse, que no nos pille sin haberlo previsto¡±, ha advertido el ministro.
¡°Allanar los tr¨¢mites burocr¨¢ticos¡± es para la secretaria general de Inmigraci¨®n y Emigraci¨®n, Marina del Corral un asunto prioritario, capaz de determinar el ¨¦xito o el fracaso de la integraci¨®n. La homologaci¨®n es solo uno de ellos. Para determinadas ayudas sociales por ejemplo, hay que haber estado empadronado cierto tiempo, o para alquilar un piso se pide un contrato de trabajo que los refugiados no tienen.
Coincide con ella Estrella Gal¨¢n, secretaria general del Comit¨¦ espa?ol de Ayuda al Refugiado (Cear), quien explica que la solidaridad despertada entre la ciudadan¨ªa ha calado tambi¨¦n entre algunas grandes empresas, que han llamado a su puerta con la idea de ofrecer oportunidades laborales a refugiados. M¨¢s all¨¢ de experiencias puntuales, otra clave de la integraci¨®n estar¨¢ en ver si la incipiente recuperaci¨®n econ¨®mica espa?ola se consolida y es capaz de generar empleo.
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