El hospital G¨®mez Ulla inaugura 8 camas para ¨¦bola y otras infecciones

El hospital militar G¨®mez Ulla de Madrid es, desde la ma?ana de este martes, el centro de referencia para tratar a personas con enfermedades infecciosas graves, como el ¨¦bola, la viruela o el ¨¢ntrax. La vicepresidenta del Gobierno, Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa, ha inaugurado las instalaciones de la planta 22 del centro sanitario, tras un a?o de obras para adaptarse a las ¨²ltimas medidas de seguridad.

El G¨®mez Ulla ya contaba con una unidad para tratar afectados por una posible guerra nuclear, biol¨®gica o qu¨ªmica (NBQ en el argot), pero se decidi¨® actualizarlas a ra¨ªz de la presencia de tropas espa?olas en zonas de conflicto por misiones humanitarias. Pero la primera demanda surgi¨® en agosto del a?o pasado, cuando se repatri¨® al misionero espa?ol Miguel Pajares. Entonces, las instalaciones del G¨®mez Ulla no estaban preparadas para recibirle y hubo que reabrir habitaciones del hospital Carlos III, que estaba en proceso de convertirse en un centro de mediana y larga estancia, seg¨²n los ¨²ltimos planes de la Consejer¨ªa de Sanidad de Madrid.

Las nuevas instalaciones, a las que solo tuvieron acceso los periodistas gr¨¢ficos, est¨¢n preparadas para atender a 8 enfermos. Se encuentran en la ¨²ltima planta del hospital, lo que permite aislarlas con mayor facilidad. Adem¨¢s, tiene acceso directo al helipuerto del tejado, con lo que se podr¨ªa ingresar a un enfermo sin alterar a los otros pacientes. Las puertas est¨¢n automatizadas para que no haya que usar picaportes (ese tipo de superficies son t¨ªpicos transmisores de virus que se depositan cuando los toca una persona infectada), tiene ventiladores y purificadores de aire y las salas para cambiarse son m¨¢s amplias con el fin de que el momento m¨¢s peligroso del proceso, el de quitarse los trajes de seguridad, se haga con la mayor comodidad posible.

Santamar¨ªa estuvo acompa?ada por los ministros de Defensa, Pedro Moren¨¦s, y Sanidad, Alfonso Alonso. Ella fue la encargada de coordinar la crisis creada por el contagio de ¨¦bola de la auxiliar Teresa Romero en el Carlos III hace un a?o, al asumir el mando del comit¨¦ interministerial que se organiz¨® para enmendar los problemas de gesti¨®n y comunicaci¨®n de la anterior ministra de Sanidad, Ana Mato.

Con la inauguraci¨®n, Madrid tiene dos unidades de referencia para tratar estas enfermedades. Una estatal, la del G¨®mez Ulla, y otra auton¨®mica, la del Carlos III, ya que este ¨²ltimo centro tambi¨¦n ha hecho obras para adaptarse ante la posibilidad de tener que volver a acoger infectados.