Un libro analiza la relaci¨®n entre prensa y poder en la Transici¨®n

Listas negras de periodistas de izquierdas, profesionales vigilados por la polic¨ªa, cartas al Gobierno haci¨¦ndole saber que se hab¨ªa levantado una cr¨®nica cr¨ªtica y pidiendo auxilio econ¨®mico, maniobras para favorecer a un diario y perjudicar a otro e incluso p¨¢ginas de un peri¨®dico favorable al 23-F. Son algunos de los ingredientes de La prensa que se vendi¨® (Ediciones Carena), un libro en el que el periodista Luis Santos analiza las relaciones entre medios de comunicaci¨®n y poder durante la Transici¨®n: desde el boicot hasta la sumisi¨®n total.

La obra fue presentada ayer en la Fundaci¨®n Diario Madrid por el periodista Miguel ?ngel Aguilar, quien tambi¨¦n aparece en las p¨¢ginas del libro, ya que el Gobierno vet¨® su presencia en un acto militar en septiembre de 1982, lo que provoc¨® una en¨¦rgica protesta del entonces director de EL PA?S, Juan Luis Cebri¨¢n.

Aguilar destac¨® el valor de los documentos originales aportados en el libro y que sobrevivieron ¡°a la trituradora de papeles que funcion¨® sin descanso desde que UCD perdi¨® las elecciones¡±. Se trata, en palabras del autor, de ¡°un archivo de maldades¡± en forma de cartas, informes y notas confidenciales de los secretarios de Estado para la Informaci¨®n Manuel Ortiz, Josep Meli¨¤, Rosa Posada e Ignacio Aguirre entre 1978 y 1982. El primero, m¨¢s descriptivo, resum¨ªa para Adolfo Su¨¢rez las reuniones que manten¨ªa con editores, directores de prensa y banqueros. Las de Ignacio Aguirre, t¨ªo de la expresidenta madrile?a, iban m¨¢s all¨¢. ¡°Le dice al presidente a qu¨¦ medios hay que apoyar, propone soluciones bancarias y estigmatiza determinadas opciones progresistas¡±, mantiene Santos.

Tras analizar la documentaci¨®n, Santos asegura que existieron ¡°ejemplos de buen periodismo¡±, entre los que cita la edici¨®n especial de EL PA?S en plena intentona de golpe de Estado apoyando la Constituci¨®n ¡ª ¡°con el riesgo que eso supon¨ªa¡±¡ª o un editorial conjunto titulado ¡°No frustrar una esperanza¡± en el que EL PA?S, Informaciones, Pueblo, Diario 16, Arriba y Ya critican ¡°la instrumentalizaci¨®n de las fuerzas armadas pocos d¨ªas despu¨¦s de la legalizaci¨®n del PCE¡±. Frente a ellos, Santos cita un dossier en el que el secretario de Estado de Informaci¨®n Aguirre advierte al presidente de c¨®mo el director de Abc de Sevilla ha estado ¡°preparando psicol¨®gicamente a la opini¨®n ante la inevitabilidad y oportunidad del golpe militar¡±: ¡°Ya no se trata de mensajes subliminales, sino de incitaciones directas al golpe y a la subsiguiente represi¨®n, se?alando incluso con el dedo a las futuras v¨ªctimas, a la mala hierba que hay que erradicar¡±.

El libro recoge tambi¨¦n una nota ¡°muy confidencial¡± de Ignacio Aguirre para Calvo Sotelo en la que, ¡°ante las pr¨®ximas elecciones¡±, propone ¡°sanear econ¨®micamente¡± un peri¨®dico conservador ¡ª¡°ser¨¢ baza fundamental para que no triunfe el socialismo¡±, dice¡ª mientras se perjudica a EL PA?S ¡ª ¡°el diario de m¨¢s difusi¨®n, preferido por los ejecutivos y la juventud, bien hecho y con aureola democr¨¢tica¡± pese a su ¡°permanente escoramiento hacia la izquierda¡±, a?ade¡ª. Ejemplos de ¡°corrupci¨®n ¨¦tica¡±, seg¨²n el autor, y del ¡°descarnado lenguaje del mercadeo¡± entre parte de la prensa y del poder de entonces.